Bueno, pues después de conseguir el platino de este juego, puede decir que desde mi punto de vista, este platino se me ha hecho pesado (hay que repetir demasiadas veces todo el juego, nueve en mi caso). La única dificultad radica en la obtención del emblema Big Boss, que con un poco de paciencia y un enfoque de prueba y error acaba saliendo. El resto es fácil, cansino, pero fácil gracias a la guía, porque si no es por la guía todavía sigo buscando algunas de las melodías del iPod (concretamente las que llevan encima algunos soldados).
A falta de jugar al MGS5, el juego que más me ha gustado de la saga ha sido el MGS3. Lo siento por los defensores a ultranza del MGS4, a mi me gustó más el tres, tanto en historia como en juego (el 4 es tremendamente corto desde un punto de vista estrictamente interactivo. La historia es buena y el acto 4 es genial, sobre todo para los que hayan jugado a las entregas anteriores). Y en lo que a dificultad del platino se refiere me quedo con el MGS2 como el más difícil de todos. Una vez más, repito que esta es mi opinión antes de haber jugado al MGS5.