Un famoso filósofo griego predicaba una curiosa ideología. Esta consistía en siempre pensar hasta creer que durante el día iban a ocurrirnos las peores desgracias y así, si éstas finalmente no tenían lugar, estar felices porque el día ha sido bueno.
Quizás nosotros debamos hacer algo parecido, creed que la consola llegará unos meses más tarde, con fallos en el firmware, que que la subirán de precio... Como nada de esto pasará, podremos estar contentos de que todo ha ido bien. Siempre caemos en el error de pensar en lo mejor, y como raras veces se cumple, siempre nos desilusionamos. La culpa de esto no es sólo de Sony, también es nuestra por creer...