Bueno, mi Play lleva encendida sin apagar nunca casi 2 años (hasta esta semana que he salido de vacaciones). 24/7 jugando o haciendo folding con Live. Si alguna vez aparezco desconectado es que se ha perdido la conexión, pero la Play sigue procesando.
Las Plays están preparadas para trabajar de forma continuada sin problemas observando las distancias que permitan la circulación forzada de aire y quitándole el polvo (interior) de vez en cuando. Una de las razones que se comentaron para que Xbox no se uniera al proyecto folding@home fue que se recalentaba en exceso por la potencia de calculo exigida.
Uno de los problemas que tienen los procesadores no es el trabajar a una determinada temperatura sino lo que se conoce como stress térmico. Cuando encendemos un ordenador (o la Play) el procesador sube rápidamente de temperatura provocando la dilatación de los materiales que lo conforman. De igual forma, cuando la apagamos desciende su temperatura rápidamente produciendose la contracción de los mismos. A diferencia de la creencia popular un ambiente fresco en una habitación con aire acondicionado no es lo mejor para la salud de la Play, a no ser que nunca la apagues. Cuanto más baja es la temperatura de la habitación mayor es el diferencial térmico al que se ve sometido el sistema con lo que las dilataciones y contracciones son mayores. Para entenderlo facil, esto es como coger una pieza de plástico o una varilla de metal y empezar a doblarla en un sentido y el contrario: al final, después de un determinado numero de dilataciones/contracciones terminara por partirse.
Si quereis prolongar la vida de la Play, enecnderla y apagarla una vez al día en vez de encenderla para jugar y luego apagarla para cenar y luego volver a encenderla para jugar un poco más, etc.
De todas formas un enemigo mayor que el sobrecalentamiento son las fluctuaciones en el suministro eléctrico. Muchos fallos son provocados por esto mismo aunque luego se achaquen al sobrecalentamiento.