La Bolsa también puede darnos pistas de qué videojuegos veremos en el futuro. La noticia de hoy viene desde Francia, con Vivendi (poseedora de Universal y, por tanto, poseedora de la marca Crash Bandicoot) desligándose por completo del gigante Activision-Blizzard, con una histórica venta de las acciones que tenía en la editora de Call of Duty o World of Warcraft por valor de más de 1.500 millones de dólares a «una gran empresa» sin nombre conocido aún.
Vivendi ya vendió una gran parte de su participación en el control en Activision-Blizzard hace dos años, pero había mantenido un 5,7% de esas acciones. Ahora ya, con este movimiento, no le queda ninguna relación. Aún así, Vivendi no sale de los videojuegos de primera línea, pues mantiene fuerte presencia entre el accionariado de Electronic Arts o Ubisoft.
Vivendi es la poseedora mayoritaria también de productoras como Universal Music, Canal Plus o Telecom Italia. Junto a Activision, sacó ediciones de Crash Bandicoot para todas las plataformas (móviles, Xbox, Wii, Nintendo DS, Game Boy Advance…) en una apuesta por el personaje que cambió gran parte de su carisma e identidad original, a cargo de Naughty Dog.