El medio informativo PC Gamer tuvo recientemente una entrevista con el director de Dark Souls II, Yui Tanimura, en donde hablaron largo y tendido sobre ciertos aspectos que atañen al videojuego, sobre todo su dificultad.
“Nuestro objetivo no es hacer un juego difícil. Nuestro objetivo es ajustar la dificultad a un nivel en el que los jugadores sean capaces de superarlo y sentir que han logrado algo grande. La IA se ajustará de una forma más natural pero al mismo tiempo serán los jugadores quienes controlen sus movimientos”, declaraba Tanimura.
“Los mensajes de texto que aparecían en la primera entrega volverán de manera similar en Dark Souls II. Además, habrá un chat de voz para algunas situaciones específicas cuando juguemos con otros jugadores”, seguía comentando el director. “En Dark Souls II hemos ajustado las clases para que estén más definidas sus diferencias. Yo personalmente recomiendo a los nuevos jugadores la clase Warrior ya que empiezan con un escudo y un sistema ortodoxo de lucha”.
El detalle gracioso fue cuando se le preguntó sobre si habría algún objeto como el pendiente que hubo en Dark Souls. Este objeto dio lugar a muchas teorías sobre el uso que tenía, “la intención que teníamos con este objeto no era la de ser cruel, pero esperamos que los jugadores hayan disfrutado de esta experiencia en Dark Souls”, finalizaba Tanimura.