La historia de Private Division y Take-Two viene dando tumbos desde hace ya varios meses, con el cierre del estudio Roll7 y la salida de decenas de empleados de la empresa.
Ahora, Strauss Zelnick, CEO de Take-Two, le ha confirmado al medio Variety que Private Division ha sido vendida; sin desvelar que empresa ha ejercido la compra ni el monto involucrado en la transacción.
La operación incluye todas las IPs de Private Division, como OlliOlli y Rollerdrome. Sin embargo, Take-Two solo se quedó con los derechos de un juego, No Rest for the Wicked, que aún sigue en Early Access para PC.
En los últimos años, Private Division pasó de ser una pujante editora de videojuegos indie a una empresa sin prácticamente potencial comercial en el mercado para Take-Two; por lo que su venta o disolución era algo que se esperaba en la industria.
«Estamos agradecidos por las contribuciones que el equipo de Private Division ha hecho en Take-Two. Confiamos que continuarán siendo exitosos», comentó Zelnick.
¿Qué esperas de Private Division en el futuro?