Cuando uno piensa en un juego de terror, en un juego gore, en un survival horror o en una maratón de los Teletubbies, sabes que va a ver muerte, sangre, horror y tripas por el suelo. Así que es algo que debería darse por hecho que va a haber escenas desagradables y violentas, no tiene mucho sentido querer censurarlo. Sólo que eso es justo lo que ha pasado en Japón, donde Resident Evil 7 ha visto cambiadas algunas de sus escenas para hacerlas más «agradables» al público nipón.
Censored Gaming (canal que no necesita mucha presentación, muestran los distintos tipos de censura presentes en algunos videojueogos) nos muestra cómo la localización japonesa de la última entrega de la saga ha cambiado algunos de los momentos más violentos y truculentos, para ofrecer algo más suave. Por ejemplo, en vez de una cabeza decapitada y putrefacta, tenemos una foto.
Las cosas como son, años de videojuegos nos han insensibilizado bastante así que nada menos que algo explícitamente violento puede impresionarnos, así que no tenemos muy claro si estos cambios no le pasarán factura al juego en Japón.