¿Cansado de juegos comprados en formato digital que acaban no siendo lo que prometen, están inacabados, contienen algún malware o necesitan grandes actualizaciones de primer día para funcionar correctamente? Pues Reino Unido ha empezado una histórica lucha contra esto, facilitando la petición de devolución del dinero por parte del comprador.
Tony Hawk 5, con un parche más grande que el juego para funcionar correctamente
La The Consumer Rights Act se actualiza mirando de cerca las compras en servicios como la Store de PSN, Steam o GOG en PC o el Bazar Xbox Live. Según la normativa que ha entrado en vigor hace unas horas, el comprador puede solicitar a la empresa editora la devolución del importe en su totalidad si el producto adquirido no cumple con los estándares esperables, está incompleto, necesita actualización para funcionar correctamente, etc.
La medida legal, muy polémica, luchará también contra el software que incorpora virus o mecanismos del llamado malware. El Gobierno británico investigará a las empresas acusadas y se podrán imponer penalizaciones por acusaciones reiteradas.
De momento, este paso supone un avance histórico en Europa -no en Estados Unidos- y vuelve a dejar claro que el comercio electrónico y la compra de productos culturales como los videojuegos en formato digital está a la orden del día con un peso mayor o similar que el formato físico.