El mercado de las consolas de sobremesa es territorio de combate entre PlayStation y Xbox. Esto es un hecho. Nintendo siempre ha jugado en otra liga, cuenta con un público que busca el amplio y concreto catálogo de exclusivos que siempre ha tenido la casa y por eso su nueva máquina, Switch, no es un rival a despreciar, al margen de tener o no una de las otras. Jim Ryan, el responsable de Sony PlayStation en Europa, afirma que le gusta que Nintendo sea una gran competencia: lo ve beneficioso para el mercado.
Ryan explica a GamesIndustry cómo si alguien no se para a mirar verá que la competencia no es algo bueno para el mercado ni para las ventas de Sony, ya que esto supone perder una parte del consumidor «casual». Pero, explica, el resurgir (es de esperar que se refiere a las sobremesa, claro, porque en portátiles no hay competencia posible: Nintendo aplasta a todo el que asoma la cabeza) de Nintendo en el ecosistema de las consolas supone algo benficioso para todos.
La explicación, en términos muy sencillos, es directa y fácil de comprender: va a haber más gente mirando consolas, entrando en tiendas, buscando una plataforma de juego. «Si Nintendo Switch significa que algunas de esas personas, los millones de personas que se engancharon con la Wii vuelven… si entran a una tienda buscando una Switch, voy a intentar venderles una PS4«.