La actual generación de consolas ha nacido de la mano del auge de los grandes televisores, y ahora mismo, los bolsillos más pudientes o que mejores ofertas, se hacen con televisores 4K o, si están aún más a la última, que incorporen la tecnología HDR. Así que no es de extrañar que el objetivo de las revisiones de estas consolas se centre en ofrecer dicha resolución y poder hacer uso de la citada tecnología HDR (recordad que PS4 también puede hacerlo desde la última actualización). No obstante, Microsoft está muy segura de la superioridad de Scorpio.
Albert Penello, responsable de planificación de Xbox, ha señalado cómo desde el principio, el diseño de Scorpio ha tenido un objetivo claro: los 4K nativos. Y tan claro como ese objetivo señala el hecho de que hace falta la gráfica con 6 teraflops y el ancho de banda para la memoria que figuran entre las especificaciones de la memoria.
Así que, para él, los 4.2 teraflops de PS4 Pro no van a ser suficientes para hacer funcionar las resoluciones 4K de manera nativa.
«Se que esos 4,2 teraflops no son suficiente para hacer auténtico 4K. Así que creo que nuestro producto aspira a algo más alto, y que tendremos menos asteriscos [en referencia a los clásicos mensajes de que el aspecto visual puede depender de una u otra cosa, o que los anuncios no representan el juego real] en lo que respecta a las experiencias en 4K que ofreceremos», explica a Eurogamer.
Desde luego, buen cruce de indirectas y directas en público llevan Microsoft y Sony últimamente con sus dos máquinas venideras. Conviene saber que quizá son productos realmente distintos y no tan competidores, de ahí también que se vayan a llevar un año de diferencia en cuanto a lanzamiento en tiendas y hardware. Project Scorpio tiene prevista su salida en otoño de 2017 mientras que PS4 Pro nacerá el próximo 10 de noviembre.