Half-Life 3 es uno de esos juegos que no necesita salir a la venta para que se hable de él. De hecho, prácticamente nadie espera que lleguemos a verlo nunca jamás a la venta. Pero siempre es un buen tema de conversación. Marc Laidlaw, uno de los principales guionistas cuando el proyecto aún parecía posible, ha explicado que no habría sido el final de la historia.
En declaraciones a Arcade Attack, Laidlaw ha explicado cómo la idea con esta tercera parte era dejarlo listo para poder ceder el paso a una nueva generación. Las intenciones del guionista, su idea sobre cómo debería haber terminado esta tercera entrega, es que acabase como las dos primeras. Con el protagonista en un lugar y estado indeterminados, esperando a ver cómo se desarrollaban los acontecimientos hasta el siguiente juego.
Es decir, que la idea era crear un cliffhanger constante en cada entrega, prolongando la saga tanto como fuera posible pero nunca concluirla del todo. Si lo vemos en perspectiva, el cliffhanger del final de la segunda entrega es técnicamente la meta que se buscaba: el final abierto definitivo, sin conclusión alguna siquiera a la vista.