Ayer, día 13 de noviembre, los trabajadores de Ubisoft Montreal vivieron su particular pesadilla de viernes 13. La semana del lanzamiento de Assassin´s Creed Valhalla quedó empañada por un suceso que no paso de ser una falsa alarma, pero que provocó horas de tensión y confusión entre la población.
En las horas finales del día, la policía de la ciudad recibe una llamada alertando de una toma de rehenes en las oficinas de Ubisoft Montreal. Las fuerzas de seguridad se ponen en marcha; acordonan las inmediaciones, avisan a los ciudadanos que evitan la zona y un equipo táctico se desplaza hasta en edificio.
En el interior, los trabajores observan cómo la policía acordona la calle y cunde el pánico, como es lógico. Decenas de trabajadores se atrincheran la en azotea del edificio y bloquean la puerta de acceso ante el temor de que haya un asaltante o asaltantes dentro.
A continuación, las fuerzas de seguridad entraron en el edificio en busca de la amenaza. Afortunadamente, no encontraron a ningún asaltante, ni había una toma de rehenes en curso. Aún así, evacuaron todo el edificio y continuaron con la búsqueda.
Al final todo quedó en un buen susto. La policía determinó que se trataba de una falsa alarma y que la llamada recibida en el 911 era una broma de muy mal gusto, la cual le costará caro a su autor, pues se trata de un delito y se castiga con hasta 5 años de cárcel.
Ahora la investigación se centra en identificar al autor de la llamada. Hasta el momento se baraja la hipótesis de que esta fue realizada desde el propio inmueble, donde hay otras empresas alojadas además de las oficinas de Ubisoft.
The police operation in connection with a hostage taking call is over. No threat has been detected and no injuries are reported. An investigation will follow to shed light on the call behind this important police force deployment. #SPVM
Details ➡ https://t.co/dLBvQERo0n pic.twitter.com/LsnXoaVrza
— Police Montréal (@SPVM) 14 de noviembre de 2020
La operación policial en relación con la llamada avisando de una toma de rehenes ha finalizado. No se han detectado amenazas y no hay heridos. Se realizará una investigación para esclarecer la llamada que ha provocado este gran despliegue policial.
Por su parte, la empresa francesa de videojuegos ha emitido hoy un comunicado oficial informando de que todo el equipo se encuentra bien físicamente, agradeciendo a las fuerzas de seguridad canadienses su rápida intervención.
Es un alivio saber que todo terminó siendo una falsa alarma y que no se trataba de un ataque terrorista que intentaba replicar los atentados de París del 13 de noviembre de 2015, como temían las autoridades en un principio.
Seguiremos atentos al desarrollo de las investigaciones hasta que se conozca la identidad del autor y la razón que le ha llevado a poner en alerta a una de las ciudades más seguras de Norteamérica.