El Xokas al Gobierno Español: «No os paséis de listos o me voy a Andorra»
Por la posibilidad de regular a los streamers igual que a los canales de TV.
El éxodo de streamers como Rubius, Grefg o Auronplay a Andorra ha sido un tema del que se ha hablado muchísimo en los últimos tiempos; abriendo un debate sobre las tasas de impuestos que se cobran en España y las razones por las que tantos creadores de contenido se han marchado del país.
Más allá de eso, en estos últimos días el CNMC (Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia) ha abierto una consulta pública en la que se maneja regular a los streamers de la misma forma que a los canales de televisión del país; con restricciones según el horario, comisiones en la publicidad y otras situaciones que afectarían el devenir diario y las ganancias de los streamers.
Sobre este tema ha hablado el Xokas durante su más reciente directo en Twitch, lanzando una amenaza al Gobierno Nacional y al presidente, Pedro Sánchez, dejándole claro que si pretenden aumentar aún más los impuestos no dudaría en irse a Andorra.
La situación se hace mucho más llamativa porque el Xokas ha sido reconocido anteriormente por sus mensajes de cariño al país, por su postura positiva frente al pago de impuestos y su pensamiento de que España es su mejor lugar para vivir, tras haber visitado muchas otras latitudes.
Aquí te dejamos un clip con el mensaje del streamer:
El Xokas es mi pastor. pic.twitter.com/UBBERRMw5z
— WS Enfurecido $ (@WS_Enfurecido) 4 de febrero de 2022
Para colmo de males, estas palabras han despertado el instinto de ‘cancelación’ de muchos usuarios de Twitter que han intentado desprestigiar la imagen del creador de contenido, tachándolo de apátrida y otro tipo de consideraciones negativas por esta postura; aunque no es la primera vez que es atacado en dicha red social.
Más allá de la postura de Xokas, el asunto de la CNMC también debe preocupar a otros streamers que aún residen en España, pues esto repercutiría enormemente en su trabajo; lo que podría causar un éxodo aún más grande de creadores a Andorra y la pérdida de sus tributaciones para España, que no son pocos de miles de euros.
De momento, todo indica que aún queda muchísima tela por cortar sobre el tema.
