El nuevo Need for Speed, que llega a PlayStation 4 este otoño y va a suponer una nueva forma de entender la serie ya que es un juego que solo funciona online por su componente de mundo persistente y abierto junto a otros jugadores, no tendrá ampliaciones de pago.
Ni DLCs ni microtransacciones, según ha explicado Electronic Arts en esta sesión de preguntas y respuestas con los fans. Se busca un juego enorme y actualizable pero que ya esté completo con el desembolso inicial. «No hay planes para ningún DLC de pago», añadían.
La intención ha sido muy aclamada entre gran parte de los usuarios y jugadores potenciales del título, que ya presenta un modelo arriesgado de online permanente, como Destiny, pero que desde luego cambiará para siempre cómo nos enfrentamos a Need for Speed.