Una de las noticias más negativas de los últimos días en España fue el asesinato de Samuel Luiz, un lamentable suceso marcado por la homofobia, la intolerancia y una desmedida violencia que bajo ningún concepto debería ser admisible en el Siglo XXI.
No obstante, un artículo publicado por el diario El País ha intentado desviar la atención de las problemáticas antes mencionadas y achacarle gran parte de la responsabilidad a los videojuegos, apuntando directamente a Fortnite en su titular, el cual modificaron hace unas horas después de las miles de críticas en redes sociales.
El artículo, que cuenta con la participación del psicólogo Javier Urra, nos deja frases desacertadas como: «El 99% de los videojuegos consisten en matar, patear, reventar, asesinar… Y encima les dan puntos por ello«, una aseveración que carece de todo tipo de solidez, ya que no ha existido ningún estudio capaz de abarcar fehacientemente un espectro tan amplio como el de los videojuegos para referirse a un todo de una forma tan ligera.
«Nosotros crecimos llorando con Marco, o viendo la relación de Heidi con su abuelo. Hoy, nuestros jóvenes tienen como referencia a youtubers que, a salvo en sus habitaciones, explican cómo matar en Fortnite, o cómo hacer en GTA [otro juego] para tener relaciones sexuales con una mujer en un coche y luego pegarle un tiro para quitarle el dinero».
Lo anterior es otra cita textual del artículo, que acude a una absurda comparativa generacional para intentar satanizar a los videojuegos y su impacto en la cultura general, más allá de que varios estudios de las universidades más prestigiosas del mundo han dejado claro que jugar no aumenta la propensión de las personas a ser violentas.
El enfoque de este artículo ha generado indignación en miles de personas en redes sociales, pues consideran errónea la dirección que se le quiere dar al caso desde el citado medio, metiendo con calzador a los videojuegos en una ecuación a la que pocos serían capaces de relacionarlos.
Para finalizar, el artículo compara al gusto por los videojuegos con problemas serios de la sociedad actual como la adicción al alcohol en los jóvenes o la falta de comunicación intrafamiliar.
¿Qué opinas de lo publicado en El País?