BioShock Infinite, tercera parte de la exitosa franquicia Bioshock, es un videojuego en primera persona que situa al jugador en 1912 adoptando el papel de Booker DeWitt, un detective al cual le han encargado la mision de recuperar a una misteriosa mujer de una ciudad flotante llamada Columbia, situada en el cielo y sostenida mediante globos y dirigibles.