SaiSaEr
Saisaer
Esta es la clase de noticias que, independientemente de vuestra plataforma de juego, queremos compartir por ser importantes para toda la comunidad en general. Porque pueden servir para sentar unas bases del desarrollo de ciertas leyes específicas para el mundo de los videojuegos y que, evidentemente, son cada vez más necesarias. Reino Unido ha sido el primer país en condenar a un jugador por llevar a cabo un swatting contra otro.
Para aquellos que no conozcáis el término, o que más posiblemente, lo conozcáis pero no lo sepáis, se trata de una de las "bromas" que tanto abundan por internet. Consiste en conseguir los datos personales de un jugador, que en el caso ideal será un jugador que retransmita partidas en directo. Con esta información, haces una falsa llamada con una amenaza generalmente relacionada con el terrorismo, o facilitas información a la policía sobre actividades delictivas que están teniendo lugar en ese mismo momento en casa de la víctima. El resultado es que la policía o incluso un equipo de asalto, dependiendo del país y el nivel de amenaza, toma la casa del afectado, algo que lógicamente se puede ver en directo.
Sin embargo, hay casos en los que esta supuesta broma sale incluso peor de lo que puede ser la situación para alguien que ve asaltada su casa sin motivo y ha sido el caso Tyran Dobss. Otro jugador, que se enfrenta a 20 años de prisión, se hizo pasar por él en una llamada en la que llevaba a cabo una amenaza terrorista. Dada la situación global actual, la respuesta fue inmediata y contundente. Durante la reducción del supuesto terrorista, éste sufrió varios daños entre los que destaca una fractura de cráneo. Tanto el "bromista" como un compañero que le ayudó a llevar a cabo la broma tienen ahora por delante la perspectiva de dos décadas de prisión, ya que se considera que no sólo han provocado daños personales sino han causado una situación de alerta para la seguridad pública. Es evidente que la falsa amenaza de terrorismo influye en la condena, pero esperamos que esto derive en sentar una jurisprudencia clara sobre el swatting.
No se vosotros, pero personalmente veo necesarias estas cosas. Como indicábamos al principio, hace falta una mayor legislación a este respecto para evitar casos como este, o como el de otras faltas de respeto que se esconden detrás de supuestas bromas y con las que algunos hacen negocio.
Para aquellos que no conozcáis el término, o que más posiblemente, lo conozcáis pero no lo sepáis, se trata de una de las "bromas" que tanto abundan por internet. Consiste en conseguir los datos personales de un jugador, que en el caso ideal será un jugador que retransmita partidas en directo. Con esta información, haces una falsa llamada con una amenaza generalmente relacionada con el terrorismo, o facilitas información a la policía sobre actividades delictivas que están teniendo lugar en ese mismo momento en casa de la víctima. El resultado es que la policía o incluso un equipo de asalto, dependiendo del país y el nivel de amenaza, toma la casa del afectado, algo que lógicamente se puede ver en directo.
Sin embargo, hay casos en los que esta supuesta broma sale incluso peor de lo que puede ser la situación para alguien que ve asaltada su casa sin motivo y ha sido el caso Tyran Dobss. Otro jugador, que se enfrenta a 20 años de prisión, se hizo pasar por él en una llamada en la que llevaba a cabo una amenaza terrorista. Dada la situación global actual, la respuesta fue inmediata y contundente. Durante la reducción del supuesto terrorista, éste sufrió varios daños entre los que destaca una fractura de cráneo. Tanto el "bromista" como un compañero que le ayudó a llevar a cabo la broma tienen ahora por delante la perspectiva de dos décadas de prisión, ya que se considera que no sólo han provocado daños personales sino han causado una situación de alerta para la seguridad pública. Es evidente que la falsa amenaza de terrorismo influye en la condena, pero esperamos que esto derive en sentar una jurisprudencia clara sobre el swatting.
No se vosotros, pero personalmente veo necesarias estas cosas. Como indicábamos al principio, hace falta una mayor legislación a este respecto para evitar casos como este, o como el de otras faltas de respeto que se esconden detrás de supuestas bromas y con las que algunos hacen negocio.
