La Academia de las Artes y las Ciencias Interactivas y la organización de la Gamelab 2012 nos anuncian que Kazunori Yamauchi recibirá el Premio de Honor 2012. Yamauchi-san es el creador de la saga Gran Turismo, uno de los videojuegos más exitosos de la historia que se caracteriza por su logrado hiperrealismo. Yamauchi-san, sucede así como Premio de Honor al mítico Hideo Kojima, y mantendrá en la Feria una charla coloquio.
Diseñador de videojuegos y piloto de carreras profesional. Sólo Kazunori Yamauchi (Kashiwa, Japón, 1967) podía crear Gran Turismo®, que lleva vendidas más de 65 millones de copias en todo el mundo desde su lanzamiento en 1997. Sin embargo, de niño Yamauchi-san soñaba con ser astronauta o director de cine mientras acompañaba a sus padres, viajantes de cerámica, por todo el país. Debió ser en esos largos trayectos donde se enamoró de los coches. Inquieto por naturaleza, a los diez años empezó a programar sus propios videojuegos, así que cuando unos años más tarde consiguió su primer trabajo en la división de videojuegos de Sony se vio sorprendido por poder ganarse la vida con su hobby.
Su primer proyecto en Sony fue el diseño de un juego de carreras de coches al estilo de Mario Kart titulado Motor Toon Grand Prix, que vio la luz en 1994. El lanzamiento tuvo un notable éxito, pero Yamauchi-san pronto sintió las ganas de superar la estética de dibujo animado para acercar la experiencia de juego lo más posible a un auténtico coche de carreras. Fue así como comenzó a trabajar en el desarrollo de Gran Turismo. El juego estuvo listo en 1998 y no sólo se convirtió en el más vendido de la PlayStation original, sino que fue recibido como una auténtica revolución por su meticuloso detalle en la simulación y la gran cantidad de vehículos que incorporaba.
Gran Turismo se ha convertido en una de las franquicias más exitosas de la historia, repitiendo estratosféricos datos de venta en cada una de sus cinco entregas. Pero su influencia supera al mundo de los videojuegos: hizo que se exportaran a Estados Unidos algunos vehículos que hasta entonces sólo se vendían en Japón; además, compañías como Aston Martin, Ruf, Venturi y Alfa Romeo vieron aumentar su popularidad; y el propio Yamauchi-san ha sido contratado como asesor por grandes marcas como Volkswagen.
Pero el fervor de Yamauchi-san por el automovilismo supera lo virtual: como piloto profesional de carreras, ha participado en el Campeonato de Nürburgring de Resistencia de la VLN, en Las 25 Horas de Thunderhill o en Las 24 Horas de Nürburgring, donde este año ha formado equipo con el español Lucas Ordóñez, quien a su vez entró al mundo de la competición profesional ganando un concurso de la Gran Turismo Academy.
Diseñador de videojuegos y piloto de carreras profesional. Sólo Kazunori Yamauchi (Kashiwa, Japón, 1967) podía crear Gran Turismo®, que lleva vendidas más de 65 millones de copias en todo el mundo desde su lanzamiento en 1997. Sin embargo, de niño Yamauchi-san soñaba con ser astronauta o director de cine mientras acompañaba a sus padres, viajantes de cerámica, por todo el país. Debió ser en esos largos trayectos donde se enamoró de los coches. Inquieto por naturaleza, a los diez años empezó a programar sus propios videojuegos, así que cuando unos años más tarde consiguió su primer trabajo en la división de videojuegos de Sony se vio sorprendido por poder ganarse la vida con su hobby.
Su primer proyecto en Sony fue el diseño de un juego de carreras de coches al estilo de Mario Kart titulado Motor Toon Grand Prix, que vio la luz en 1994. El lanzamiento tuvo un notable éxito, pero Yamauchi-san pronto sintió las ganas de superar la estética de dibujo animado para acercar la experiencia de juego lo más posible a un auténtico coche de carreras. Fue así como comenzó a trabajar en el desarrollo de Gran Turismo. El juego estuvo listo en 1998 y no sólo se convirtió en el más vendido de la PlayStation original, sino que fue recibido como una auténtica revolución por su meticuloso detalle en la simulación y la gran cantidad de vehículos que incorporaba.
Gran Turismo se ha convertido en una de las franquicias más exitosas de la historia, repitiendo estratosféricos datos de venta en cada una de sus cinco entregas. Pero su influencia supera al mundo de los videojuegos: hizo que se exportaran a Estados Unidos algunos vehículos que hasta entonces sólo se vendían en Japón; además, compañías como Aston Martin, Ruf, Venturi y Alfa Romeo vieron aumentar su popularidad; y el propio Yamauchi-san ha sido contratado como asesor por grandes marcas como Volkswagen.
Pero el fervor de Yamauchi-san por el automovilismo supera lo virtual: como piloto profesional de carreras, ha participado en el Campeonato de Nürburgring de Resistencia de la VLN, en Las 25 Horas de Thunderhill o en Las 24 Horas de Nürburgring, donde este año ha formado equipo con el español Lucas Ordóñez, quien a su vez entró al mundo de la competición profesional ganando un concurso de la Gran Turismo Academy.