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Cualquiera de los que nos dedicamos a esto de hablar sobre videojuegos puede seguramente confirmaros lo siguiente. Hay veces que, cuando tienes un análisis de un juego por delante, quieres que te guste. Esperas que te guste. Porque te gusta el género, por ser fan de la saga, porque te parece interesante, por lo que sea. Es en esos casos cuando más duele cruzarse con productos mediocres y sin terminar. Como os podréis imaginar dada esta presentación, esta ha sido ni más ni menos que la situación que me he encontrado con Sniper Ghost Warrior 3, que roza lo ofensivo en cuanto a productos inacabados se refiere.
Voy a empezar como siempre, hablando del argumento del juego. Estamos en la frontera de Georgia, inmersa en medio de una guerra civil que, como tienen la mala costumbre estas guerras, mata más ciudadanos que soldados. Aquí entra en juego nuestro protagonista, hermano de un francotirador que aparentemente ha sido tomado como prisionero por parte de los malos de turno. Y tú, por supuesto, tienes que averiguar si sigue con vida al tiempo que salvas toda la región con tu rifle. ¿Puede haber más clichés? Sí, porque el diseño de los personajes, que no es precisamente sorprendente, sigue todos los arquetipos ridículos de películas de serie B. Sólo diré que la espía rusa viste de negro, con ropa ceñida y es pelirroja. ¿Viuda Negra decís? ¡Por Dios, no!
El argumento es de peli de relleno de Xtreme emitida un domingo y protagonizada por Tom Berenger, pero cumple. La complejidad argumental no es el objetivo y sirve como excusa para darle un contexto a ser un francotirador que es lo interesante. Nuestro personaje por supuesto lleva entre su arsenal un rifle de francotirador, amén de un arma secundaria que puede ser un fusil de asalto, una escopeta o incluso un arco. Por supuesto también lleva un arma de mano, que será siempre una pistola o una recortada.
El arsenal a nuestro alcance es bastante variado y lo he encontrado justo como debe ser, tanto en cantidad como posibilidades. Hay más de una docena de armas de cada tipo y cada una ofrece distintas opciones de personalización. Cargadores, miras, accesorios, silenciadores y por supuesto camuflajes, aunque no ofrecen ninguna ventaja táctica. Con tanta variedad, más que un juego de francotiradores se trata de un shooter con posibilidades y mecánicas de juego de francotirador. No tendréis mucho problema en jugar con un fusil de asalto toda la partida, siempre que no vayáis en las dificultades más altas. Ahora que hemos mencionado lo medianamente bueno, vamos con lo malo. La cosa va para largo.
Sniper Ghost Warrior 3 se juega como título de mundo abierto, que dado el resultado es un error inmenso. En lugar de fases cerradas con zonas limitadas por las que movernos, podemos decidir subir a algún lugar elevado, aprovechar esta ventaja, despejar una zona y deslizarnos ladera abajo. Bien, primer problema. Con una frecuencia ofensiva, algún accidente geográfico impide que toquemos el suelo y nos quedamos en el aire. Dado que no hay posibilidad de hacer viaje rápido desde este punto, no queda más remedio que volver a cargar la partida, con su correspondiente tiempo de carga (de lo que hablaremos largo y tendido un poco más adelante).
La cámara lenta en los mejores disparos, una fuente de congelaciones en el juego.
Las texturas del mapeado cargan a destiempo y mal, es tristemente frecuente que, si miras en la lejanía (disimulada por supuesto con una niebla muy poco sutil) veas claramente cómo se van cargando. Algo simple y llanamente imperdonable por los mencionados tiempos de carga, de los que hablamos ahora mismo.
De tres a cinco minutos, de reloj, en cargar la partida. Esto jugando en PS4, desconozco si en PS4 Pro sucederá como en Ghost Recon Wildlands, en el que se notaba una buena diferencia entre jugar en una u otra plataforma. Se supone que este tiempo de carga sencillamente brutal, que se da cada vez que cargas la partida o cambias entre las cuatro zonas que componen el juego, es para cargar todo el mapeado (mentira, viendo el tema de las texturas) y para "reducir el tiempo de viaje rápido" y "reducir el tiempo que tardas en resucitar". El tiempo que tardas en hacer viaje rápido oscila entre los 15 a 20 segundos. El tiempo que tardas en resucitar puede irse fácilmente a los 20 (así que al final tardas más o menos lo mismo que en cualquier juego), no lo hace por completo y para colmo, de muy malas maneras. Antes de ver a tu personaje y poder controlarlo puedes escuchar perfectamente lo que pasa a tu alrededor y se puede dar la situación de respawnear cerca de enemigos que te matan antes de ver nada.
Los paisajes no compensan los insoportables tiempos de carga.
Los enemigos son, en pocas palabras, feos. En especial los francotiradores, en los que el intento de poner un camuflaje "de verdad" da lugar a un diseño que, sin ánimo de recurrir a tópicos, es poco más que de PS2. Especialmente notable en las capuchas de los mismos, que parecen hechas de cartón piedra.
Llegamos a la parte interesante de la jugabilidad que es el usar los rifles de francotirador para esas llamativas secuencias a cámara lenta en las que eliminamos al enemigo. Resultan interesantes y las animaciones en las que la bala penetra en el cuerpo del enemigo son más creíbles que, por ejemplo, en Sniper Elite. Aquí el enemigo cae al suelo de una forma bastante creíble. El problema viene cuando te das cuenta de que las balas son mágicas. Ya puedes disparar desde lo alto de un acantilado y apuntar a la coronilla del malo de turno, que en la animación vas a ver la bala entrar por un lateral, de frente o por detrás, completamente horizontal. Esto mata completamente la experiencia resultante, la verdad.
La conducción es muy básica, algo que puede ser para agradecer por jugadores como un servidor o un grave defecto para los que buscan un mundo abierto con todas sus consecuencias, así que no entraré a criticarlo ya que es muy subjetivo. Personalmente lo agradezco.
Un argumento digno de cualquier película de acción de bajo presupuesto.
En el apartado favorito de todos los jugadores, están los bugs. El primero son congelaciones. Congelaciones bastante habituales y que son más frecuentes durante las animaciones de cámara lenta. Congelaciones al activarse la cámara lenta en un juego de francotiradores, magnífico. Cabe destacar que este es uno de esos pocos juegos que al congelarse la pantalla se queda paralizada, en lugar de salir el infame CE-34878-0. Por supuesto, hay que cerrar la aplicación y volver a pasar por los cinco minutazos de tiempo de carga. Cuando el juego ni siquiera sabe que se ha congelado, mala señal. Directamente relacionado con este problema está el de las partidas corruptas, como ha sido el caso de un servidor. Ya sabéis que cuando un juego se congela mientras se guarda la partida hay riesgo de archivo corrompido, pero por suerte tenía a mano un backup de la partida.
Otro problema que es lo que me ha llevado a desechar total y absolutamente el juego es un bug que hace que todas tus armas se bloqueen. Dado que las armas se desbloquean a medida que avanzas en la historia y no hay opción de repetir misiones, esto implica que te quedas sin ellas de forma permanente. Al investigar un poco al respecto sobre posibles soluciones me encuentro con que no soy precisamente el único que se ha cruzado con este problema. Finalmente, aunque no por ello menos importante, el hecho de que en muchas ocasiones vayas a llevar a cabo un interrogatorio a un enemigo y este se teletransporte a varios metros de ti, dando la alarma, no ayuda a calmar la mala leche que te termina subiendo por el cuello.
Lo peor, por encima de los defectos inmensos que hacen de este un título en pocas palabras injugable, es que detrás de sus infumables tiempos de carga e imperdonables y frecuentes congelaciones, se puede adivinar un título entretenido. Que un producto decente se vea lastrado de esta manera por un trabajo a medio hacer, que para colmo de males ni siquiera viene completo (supuestamente, el multijugador se ha retrasado hasta el tercer trimestre para que "disfrutemos de la campaña". Visto lo que quieren que "disfrutemos" no quiero ni imaginar el trabajo que falta por hacer en el multi en realidad) y a un precio de 70 € es algo sin justificación alguna.
El triste motivo por el que le tengo que dar la calificación que le doy es porque, simplemente, tal como está el juego ahora mismo no podría recomendarlo ni de oferta, incluso estando el Pase de Temporada disponible de forma gratuita. Si sentís más adelante la tentación de haceros con él, buscad antes si se han solucionado estos errores o estad dispuestos a soportar todos los problemas que ello conlleva. Es una pena, pero esto tiene toda la pinta de ser el último juego de la saga si no se pone solución inmediatamente. Cuando se arregle, estaré encantado de volver a darle una oportunidad.
Tenéis a vuestro alcance una buena variedad de armas, una para cada ocasión.
Voy a empezar como siempre, hablando del argumento del juego. Estamos en la frontera de Georgia, inmersa en medio de una guerra civil que, como tienen la mala costumbre estas guerras, mata más ciudadanos que soldados. Aquí entra en juego nuestro protagonista, hermano de un francotirador que aparentemente ha sido tomado como prisionero por parte de los malos de turno. Y tú, por supuesto, tienes que averiguar si sigue con vida al tiempo que salvas toda la región con tu rifle. ¿Puede haber más clichés? Sí, porque el diseño de los personajes, que no es precisamente sorprendente, sigue todos los arquetipos ridículos de películas de serie B. Sólo diré que la espía rusa viste de negro, con ropa ceñida y es pelirroja. ¿Viuda Negra decís? ¡Por Dios, no!
La típica peli de acción
El argumento es de peli de relleno de Xtreme emitida un domingo y protagonizada por Tom Berenger, pero cumple. La complejidad argumental no es el objetivo y sirve como excusa para darle un contexto a ser un francotirador que es lo interesante. Nuestro personaje por supuesto lleva entre su arsenal un rifle de francotirador, amén de un arma secundaria que puede ser un fusil de asalto, una escopeta o incluso un arco. Por supuesto también lleva un arma de mano, que será siempre una pistola o una recortada.
El arsenal a nuestro alcance es bastante variado y lo he encontrado justo como debe ser, tanto en cantidad como posibilidades. Hay más de una docena de armas de cada tipo y cada una ofrece distintas opciones de personalización. Cargadores, miras, accesorios, silenciadores y por supuesto camuflajes, aunque no ofrecen ninguna ventaja táctica. Con tanta variedad, más que un juego de francotiradores se trata de un shooter con posibilidades y mecánicas de juego de francotirador. No tendréis mucho problema en jugar con un fusil de asalto toda la partida, siempre que no vayáis en las dificultades más altas. Ahora que hemos mencionado lo medianamente bueno, vamos con lo malo. La cosa va para largo.
Sniper Ghost Warrior 3 se juega como título de mundo abierto, que dado el resultado es un error inmenso. En lugar de fases cerradas con zonas limitadas por las que movernos, podemos decidir subir a algún lugar elevado, aprovechar esta ventaja, despejar una zona y deslizarnos ladera abajo. Bien, primer problema. Con una frecuencia ofensiva, algún accidente geográfico impide que toquemos el suelo y nos quedamos en el aire. Dado que no hay posibilidad de hacer viaje rápido desde este punto, no queda más remedio que volver a cargar la partida, con su correspondiente tiempo de carga (de lo que hablaremos largo y tendido un poco más adelante).
La cámara lenta en los mejores disparos, una fuente de congelaciones en el juego.
De tres a cinco minutos, de reloj, en cargar la partida. Esto jugando en PS4, desconozco si en PS4 Pro sucederá como en Ghost Recon Wildlands, en el que se notaba una buena diferencia entre jugar en una u otra plataforma. Se supone que este tiempo de carga sencillamente brutal, que se da cada vez que cargas la partida o cambias entre las cuatro zonas que componen el juego, es para cargar todo el mapeado (mentira, viendo el tema de las texturas) y para "reducir el tiempo de viaje rápido" y "reducir el tiempo que tardas en resucitar". El tiempo que tardas en hacer viaje rápido oscila entre los 15 a 20 segundos. El tiempo que tardas en resucitar puede irse fácilmente a los 20 (así que al final tardas más o menos lo mismo que en cualquier juego), no lo hace por completo y para colmo, de muy malas maneras. Antes de ver a tu personaje y poder controlarlo puedes escuchar perfectamente lo que pasa a tu alrededor y se puede dar la situación de respawnear cerca de enemigos que te matan antes de ver nada.
Los paisajes no compensan los insoportables tiempos de carga.
Llegamos a la parte interesante de la jugabilidad que es el usar los rifles de francotirador para esas llamativas secuencias a cámara lenta en las que eliminamos al enemigo. Resultan interesantes y las animaciones en las que la bala penetra en el cuerpo del enemigo son más creíbles que, por ejemplo, en Sniper Elite. Aquí el enemigo cae al suelo de una forma bastante creíble. El problema viene cuando te das cuenta de que las balas son mágicas. Ya puedes disparar desde lo alto de un acantilado y apuntar a la coronilla del malo de turno, que en la animación vas a ver la bala entrar por un lateral, de frente o por detrás, completamente horizontal. Esto mata completamente la experiencia resultante, la verdad.
La conducción es muy básica, algo que puede ser para agradecer por jugadores como un servidor o un grave defecto para los que buscan un mundo abierto con todas sus consecuencias, así que no entraré a criticarlo ya que es muy subjetivo. Personalmente lo agradezco.
Un argumento digno de cualquier película de acción de bajo presupuesto.
Otro problema que es lo que me ha llevado a desechar total y absolutamente el juego es un bug que hace que todas tus armas se bloqueen. Dado que las armas se desbloquean a medida que avanzas en la historia y no hay opción de repetir misiones, esto implica que te quedas sin ellas de forma permanente. Al investigar un poco al respecto sobre posibles soluciones me encuentro con que no soy precisamente el único que se ha cruzado con este problema. Finalmente, aunque no por ello menos importante, el hecho de que en muchas ocasiones vayas a llevar a cabo un interrogatorio a un enemigo y este se teletransporte a varios metros de ti, dando la alarma, no ayuda a calmar la mala leche que te termina subiendo por el cuello.
De los horrores de la guerra, a la guerra más horrorosa
Lo peor, por encima de los defectos inmensos que hacen de este un título en pocas palabras injugable, es que detrás de sus infumables tiempos de carga e imperdonables y frecuentes congelaciones, se puede adivinar un título entretenido. Que un producto decente se vea lastrado de esta manera por un trabajo a medio hacer, que para colmo de males ni siquiera viene completo (supuestamente, el multijugador se ha retrasado hasta el tercer trimestre para que "disfrutemos de la campaña". Visto lo que quieren que "disfrutemos" no quiero ni imaginar el trabajo que falta por hacer en el multi en realidad) y a un precio de 70 € es algo sin justificación alguna.
El triste motivo por el que le tengo que dar la calificación que le doy es porque, simplemente, tal como está el juego ahora mismo no podría recomendarlo ni de oferta, incluso estando el Pase de Temporada disponible de forma gratuita. Si sentís más adelante la tentación de haceros con él, buscad antes si se han solucionado estos errores o estad dispuestos a soportar todos los problemas que ello conlleva. Es una pena, pero esto tiene toda la pinta de ser el último juego de la saga si no se pone solución inmediatamente. Cuando se arregle, estaré encantado de volver a darle una oportunidad.
Tenéis a vuestro alcance una buena variedad de armas, una para cada ocasión.
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