PES 2017 quiere derrotar a FIFA 17 de la mano del F.C. Barcelona

El año 2015 supuso para Konami muchas cosas, y no necesariamente malas. Estoy seguro que habréis pensado inmediatamente en el “affair Kojima” (e incluso alguno que otro en las máquinas de Pachinko); y sí, ese es sin ningún género de dudas el culebrón principal que tuvo entretenida tanto a la compañía japonesa como a la industria del videojuego durante bastantes meses. Pero en esta ocasión no van a ocupar estas líneas las andanzas del bueno de Hideo, sino más bien el importante paso adelante que logró la saga Pro Evolution Soccer en un momento en el que su gran rival empezaba a dar claras muestras de agotamiento.

Un año más tarde, y después de que Metacritic valorara a PES 2016 (87) por encima de FIFA 16 (82), Konami pretende lograr dos cosas: mejorar lo conseguido sin tocar lo que funciona y atraer a los amantes del fútbol virtual con novedades que puedan plantar cara a la fuerte apuesta para este año de EA Sports. De lo primero ya hablamos en nuestras anteriores impresiones que parecía conseguido, mientras que con lo segundo el objetivo se pretende alcanzar con el gran acuerdo oficializado hace poco más de una semana con el F.C. Barcelona.

Y es que, con la exclusividad de LaLiga Santander que dispondrá este año FIFA 17, que Konami sea Partner Premium de F.C. Barcelona durante los próximos tres años asegura a la compañía y al título una visibilidad en la llamada “mejor liga del mundo” que de otro modo no iba a ser posible. De esta manera, Pro Evolution Soccer 2017 se hace del Barça por completo de una forma que nunca antes se había visto; a excepción de aquellos títulos de Codemaster que realizaron entre 2003 y 2005 una oda total a 22 históricos equipos europeos, entre los que se encontraban el Madrid de los galácticos o el Barcelona de Ronaldinho.

Esta alianza hará las delicias de todos los aficionados del Barça, pues además de una portada donde aparecen parte de las estrellas el equipo actual, PES 2017 se asegura en exclusividad el Camp Nou y ofrece un equipo de leyendas del conjunto culé para MyClub en el que se encontrarán cracks mundiales de todos los tiempos como Ronaldo, Pujol, Rivaldo, Xavi, Luis Enrique o Ronaldinho. Además de equipajes clásicos de diferentes temporadas, y una edición especial caja metálica con el escudo del club.

Por supuesto, uno de los grandes atractivos que ofrecerá Pro Evolution Soccer 2017 siendo Konami Partner Premium del Barça es la alta calidad de los rostros de todos sus jugadores, capturados con técnicas de foto-escaneado en 3D. Y desde luego, mi impresión fue que el conjunto culé y los futbolistas clave disponibles en la demostración actualizada que probé eran sobresalientes; los mejores que seguramente se vayan a ver este año, incluso por encima de la nueva entrega de FIFA. Sin embargo, las dudas vienen después, cuando uno observa que jugadores menos importantes no se acercan ni de lejos a lo que mismamente podemos ver en el tráiler que acompaña a estas líneas.

Y justo éste y el tema de las licencias, junto al hecho de que el título se acerca casi a la categoría de producto fanservice, son tres de los motivos por los que más de uno recelerá de PES 2017 al verlo en las estanterías de las tiendas, el menos en España. El fútbol es un deporte muy pasional, y en nuestro país ver que uno de los videojuegos anuales del deporte rey está personalizado por dentro y por fuera con los colores del Barça puede ser suficiente motivo tanto para obviar su compra como para llevárselo a casa con los ojos cerrados. Y lo cierto es que, más allá de filias y fobias, Konami a nivel jugable está dando motivos de sobra para que se produzca la segunda situación.

Como comentaba al principio del texto, Pro Evolution Soccer 2017 sigue la misma senda que ya creó su antecesor para desde ese punto mejorar en tres puntos clave: la pelota, los futbolistas y la inteligencia artificial. Tres pilares fundamentales que ahora se refinan gracias al dominio del Fox Engine que por fin ha logrado el denominado PES Team, y cuyo logro esgrimen ahora sus máximos responsables para mostrar fortaleza ante el Frostbite de FIFA 17; pues al contrario que lo que seguramente esté ocurriendo en EA Sports, ellos ya dominan un motor que ha sido capaz de crear una maravilla técnica de la talla de Metal Gear Solid V.

Pero volviendo a las mejoras, esta última demostración me ha permitido corroborar que todos los ámbitos de actuación han sido revisados notablemente, y que esa sensación a PES 6 se sigue respirando en el ambiente. Tal vez, el mayor avance venga representado en el llamado Control reality, la capacidad de los jugadores para moverse con o sin balón de la forma más convincente posible. Esto da lugar a movimientos naturales que responden a los botes más impredecibles de la pelota, y la adaptación total del jugador a lo que debe hacer con el esférico inmediatamente después. La sensación desde la primera partida era que el control es extraordinariamente ágil e intuitivo, a pesar del punto de lentitud que le han querido otorgar a esta entrega para calmar de alguna manera los correcalles que se producían en la edición del año pasado. Las físicas y las animaciones se notan también en los forcejeos con los rivales, en la fuerza que dispone cada futbolista para enfrentarla con los demás y así poder ganar cada encuentro con o sin balón por en medio.

La habilidad con el pase fue otro de los motivos de satisfacción de la demo. Ya sea al primer toque o con el balón controlado, la sensación de tener el control de la pelota era notable, pero sobretodo lo era el notar que, dependiendo de la ejecución, del tempo del pase y de la presión rival éste se ejecutaba mejor o peor. PES 2017 parece que quiere apuntarse a aquello de “fácil de aprender, pero difícil de dominar” en esta vertiente, pudiendo cualquiera familiarizarse con el control de todo un equipo pero exigiendo dedicación para acabar dominando todas las opciones que ofrece el juego.

Otro cantar es el tercer pilar, el de la inteligencia artificial. El PES Team tiene un reto importante por delante en este asunto si quiere que la franquicia acabe de asentarse definitivamente en esta generación, y por lo que pude comprobar aún queda bastante para que esto ocurra. Dejando de lado IA adaptable que por motivos lógicos no pude comprobar, la mejora de los porteros con respecto a Pro Evolution Soccer 2016 se nota, pero era extremadamente fácil meter gol nada más encarar al meta y chutar con precisión en la portería. Eso sí, pocas cantadas me dieron tiempo a ver más allá de la imposibilidad de alcanzar el balón cuando lo tiras colocado. Siendo una demo previa a la versión final, todavía queda mucho para concluir de forma definitiva cómo son los cancerberos en esta última edición.

Lo que no pude sacar en claro, y que se guarda Konami para la Gamescom, es el tema de las licencias. Como gran asignatura pendiente de la saga, los fans acérrimos dirán que no es algo tan necesario, y los que no lo son tanto lo esgrimirán como argumento para recelar del juego y no comprarlo. Pero lo cierto es que en este asunto EA Sports siempre he llevado la delantera, y parece ser que este año no será diferente. Eso sí, Adam Bhatti, product manager del juego, asegura que al menos esta vez las plantillas sí estarán actualizadas desde el mismo día de lanzamiento, ya que este fue uno de los otros motivos de descontento de los jugadores el año pasado.

Con todo esto, y conociendo las armas de PES 2017 y FIFA 17, uno puede empezar a ver que el primero se centra en consolidar un buen resultado, mientras que el segundo busca encontrar un revulsivo que lo saque de una zona de confort que le empezaba ya a pasar factura. La batalla entre las mejoras jugables y la puesta en escena está en marcha, y la primera bala la disparará Konami con Pro Evolution Soccer 2017 el próximo 15 de septiembre, justo cuando se produzca su lanzamiento.