LaPS3 juega: muerte y baloncesto
Propuestas deportivas y un tanto masoquistas para pasar el fin de semana
Alex Mercer es historia. Pensaba que me llevaría algo más de tiempo pero, si bien el Modo Difícil ha tenido lo suyo en algunos puntos, no ha durado lo que yo quería que durase, hasta el miércoles de la semana que viene. A un trofeo facilito se ha quedado del Platino, no quiero que sea el 100.
Así que me encuentro jugando a un título que abandoné hace ya un par de años, después de que, tras derrotar al demonio Falange, un dragón me quitase de en medio al ir a cruzar el puente detrás del castillo y yo dejase escapar, presa de la mala leche: “Mierda”. Ahora bien, a medida que avanzo voy viendo las amplias diferencias con Dark Souls. La historia tiene más importancia o al menos resulta más comprensible, los enemigos son algo más bestias, pero muy básicos, fáciles de ripostear, pero me parecen más interesantes que los de Dark Souls.
Sin embargo, después de haber jugado a su secuela espiritual, realmente no está resultando tan complicado. Sobra decir que no pienso perder el tiempo en incontables horas de farmeo para encontrar una maldita piedra cuchilla ni nada por el estilo, no, las armas y anillos ya los tengo desde hace tiempo.
Sí, precisamente por eso estará resultando tener una dificultad tan ajustada, con algún encontronazo que sí que me manda de vuelta al Nexo. Pero realmente es un paseo, que voy dando con un amigo que no me deja avanzar si no es hombro con hombro quitando de en medio bicharracos. Boletaria nunca fue tan divertida.
Ya llegó, ya está aquí. Un nuevo fin de semana llama a nuestras puertas y nada mejor para un servidor que seguir disfrutando de una historia conmovedora como la que plantean los chicos y chicas de Telltale Games en el tercer capítulo de la segunda temporada de The Walking Dead. El pasado miércoles se puso a la venta In Harm’s Way y saber más sobre el devenir de los acontecimientos de la trama me emociona y acongoja a partes iguales.
Clementine se ha convertido por derecho propio en uno de mis personajes predilectos en esto de los videojuegos. No debe ser fácil poner como protagonista de la historia a una pequeña que tiene que soportar la indiferencia de los adultos en la mayoría de los casos mientras huye de los muertos vivientes y demuestra ser la superviviente perfecta al apocalipsis.
Con todo, el fin de semana es largo y no solo de PlayStation viven el hombre y la mujer. Cuando finalice In harm’s Way recuperaré el ritmo con The Legend of Zelda: Skyward Sword, una propuesta que me está costando mucho terminar por culpa de mi torpeza natural con los controles por movimiento. Sea como fuere, el fin de semana se antoja de lo más emocionante.
Amor y odio es la relación que mantengo con el mes de mayo. Durante muchos años estos 31 primaverales días han sido sinónimos de noches sin dormir, agobios continuos, nerviosismo frecuente, litros y litros de bebidas energéticas… Y todo por los exámenes, sí. Esas traicioneras pruebas a las que todo el mundo se suele enfrentar en esta época en cualquier que sea la etapa educativa que estemos llevando a cabo.
Sin embargo, y para un fanático de los deportes como yo, también es sinónimos de grandes eventos deportivos. La Final de la Champions League es uno de ellos (la Copa del Rey también en los años que no hay Mundial), así como el inicio del Roland Garros. Pero sobre todo de los Playoff de la NBA. Y este año no ha sido menos, con unas Finales de Conferencia que se encuentran ya a la vuelta de la esquina y que tienen de protagonistas a Miami Heat, Indiana Pacers, Oklahama City Thunder y San Antonio Spurs.
No voy a negar mi predilección por el equipo de Popovich y mis ganas de que Ginobili, Parker y Duncan vuelvan a alzarse con el anillo de campeón. Con ese deseo y con esas ganas de NBA, mi elección de este fin de semana -que además acompañará a cierto trabajo interesante que podréis leer el martes que viene- es NBA 2K14 para PS4. Y es que, o por las duras o por las maduras, en la realidad o la ficción, el verdadero Big Three ganará el campeonato NBA. Al menos en mi consola.