Semana intensa, semana de juegos nuevos y semana de festival de variedad en la redacción de LaPS3. Algún redactor se lo ha montado muy bien, cubriendo la totalidad de la semana con una oferta muy variada y completa; algún otro va a rebufo de lo que trabajó esta semana, enganchado está el pobrecillo; mientras, alguien sigue enarbolando la bandera a cuadros y las gafas de pasta con los títulos indie, con el nostálgico de turno disfrutando de uno de los mejores Final Fantasy de los últimos tiempos.
Después dos semanas jugando de forma intensiva a los dos Tales of Symphonia remasterizados, realmente me apetece cambiar un poco de aire consolero antes de lanzarme a por Final Fantasy X HD la próxima semana.
La verdad es que posiblemente dediqué unas horas a Castlevania: Lords of Shadow 2 de cara al contenido descargable de la semana que viene, otro par de horas a comenzar una nueva partida de Tales of Symphonia: Dawn of the New World y algo de tiempo a un juego del que por el momento no puedo decir nada.
En el caso de que cualquier de estos me aburra, oigo a Big Boss llamándome desde el Campamento Omega, que seguramente me dé unas cuantas horas de diversión y merece conseguir ese 100% tan atractivo. Desde luego, por variedad al alcance de la mano no será.
Bueno, no exactamente, aunque jugando a inFAMOUS: Second Son no pude quitarme de la cabeza en ningún momento Héroes, aquella fantástica serie que sucumbió ante la terrible huelga de guionistas que dio al traste con otras tantas producciones televisivas. Poco tienen que ver en personalidad Peter Petrelli y Delsin Rowe pero, evidentemente, esa capacidad de absorber los poderes de otros personajes les relaciona de forma instantánea.
El caso es que, como venía comentando en el análisis publicado en el día de ayer, toca coger a Delsin para completar la historia tomando las decisiones malignas, aquellas que hacen decantar la balanza del karma hacia el lado del mal. Está bien ser el chico bueno, tomar las decisiones que se consideran correctas y tener la conciencia tranquila, pero me quedé con ganas de darle una patada en el culo a algún que otro personaje durante el transcurso de la historia.
Pero además, las ganas de seguir jugando siguen ahí, y es lo que más valor le doy a inFAMOUS: Second Son en este momento. Varios fueron los defectos que señalé del juego, como los enemigos poco variados o las misiones secundarias cortas, pero Sucker Punch sabe crear la necesidad de que introduzcamos el juego en la consola una vez más, que disfrutemos de nuevo de la enorme calidad gráfica de un juego de nueva generación.
Esta semana ha sido un poco movida por las fallas, así que este fin de semana toca relajarse frente a los mandos echando unas partidas a Rogue Legacy. Este título se define como un roguel-”lite” cuya historia se desarrolla dentro de las diferentes salas de un castillo que se generan aleatoriamente en cada partida.
Una de las peculiaridades de Rogue Legacy es que cuando se muere, el jugador no podrá elegir jugar con el mismo personaje sino que tendrá que elegir hacerlo con uno de sus descendientes. Y a veces éstos presentarán un obstáculo extra con el que no se había contado: hace menos daño a los enemigos o no recuerda las zonas del mapa donde se ha estado, entre otros.
Por otra parte, el mapa, dividido en varias zonas con diferente dificultad, está compuesto por habitaciones que presentan mecánicas muy variadas. De esta forma, el jugador puede encontrarse salas donde deberá resolver un acertijo para conseguir una determinada armadura, habitaciones repletas de complicados enemigos o cámaras secretas que esconden tesoros y que sólo se puede acceder a ellas si se pertenece a una determinada clase. Lo mejor de todo es que poco a poco y con el dinero que se va consiguiendo, se va mejorando el personaje gracias a la posibilidad de comprar nuevas habilidades, armadura o hechizos.
Se que muchos van a poner el grito en el cielo, pero Final Fantasy X nunca ha sido santo de mi devoción. El tema religioso (por más que mi compañero Manuel se empeñe en que tratan de criticarlo enmascaradamente) es algo que me echa muy para atrás, y la gracia de ir rezando entre los diversos templos no es algo hecho para mi. He intentado darle diversas oportunidades en varias ocasiones, pero nunca me ha terminado de enganchar.
Es algo que quiero solucionar con Final Fantasy X | X-2 HD Remaster, la increíble remasterización que se ha marcado Square Enix que consigue elevar a esta propuesta al primer puesto en este tipo de adaptaciones. Ahora revisitar Spira y conocer a sus personajes es toda una experiencia visual en donde en ocasiones parece como si no fuera originario de PlayStation 2.
Además de llevarme algo de faena a casa con algunos textos que leeréis durante esta semana, invertiré mis tiempos muertos en Metal Gear Solid V: Ground Zeroes. Es un juego que quiero saborear cual whisky añejo, así que es el complemento ideal para mis pequeños ratos de descanso. Lo jugaré, además, haciendo uso de la APP desarrollada para él (iDroid) puesto que la experiencia de juego se vuelve más inmersiva y completa.