Impresiones Tales of Xillia 2

Manuel Gimeno · 29 diciembre, 2018
La aventura sigue más allá de Jude y Milla

Es innegable que la pasada generación de consolas careció totalmente del entusiasmo que si había provocado su antecesora en cuanto a la concepción de juegos JRPG se refiere. Las innovaciones un tanto extrañas y la necesidad de cambiar algo que funcionaba a la perfección lastró un género que había dado muchas alegrías a sus fans, encontrándose ahora ante un triste yermo en el que de vez en cuando, sin embargo, podemos encontrar alguna que otra joya digna de ser jugada.

Títulos como Ni no Kuni: La Ira de la Bruja Blanca, Eternal Sonata o Lost Odyssey surgían de repente para recordarnos que no todo eran lamentaciones por esos lares, y que todavía había esperanzas para las buenas historias bien contadas y para la diversión jugable más clásica dentro del género. Pero sin duda, si hubiera que destacar una saga que abanderara estos pequeños estertores de resignación, esa sería Tales of.

Sobre todo esto ocurrió gracias en parte al cambio de tendencia surgido en la saga en cuanto al tratamiento de su localización, habiendo encontrado el año pasado hasta dos títulos que llegaban bajo una notable traducción de subtítulos al castellano, como fueron Tales of Xillia y Tales of Symphonia Chronicles. Por fin, la calidad de la saga llegaba a todo ese público que anhelaba una excusa para volver a zambullirse en la magia del género, sin excusas ni barreras idiomáticas que dejaran de lado a aquellos usuarios menos duchos en el habla anglosajona.

Con este cambio de tendencia de las obras bajo la producción de Hideo Baba, Tales of Xillia, que contó con un importante éxito el año al haber vendido la nada desdeñable cifra de más de un millón de copias en todo el mundo, su secuela, Tales of Xillia 2, sigue los mismos pasos hasta occidente, para aparecer de nuevo con subtítulos al castellano y la promesa de llegar de nuevo a toda esa gran masa de usuarios a la que anteriormente hacíamos referencia.

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Y es que, realmente, esa era la única excusa para que muchos no se atrevieran a jugar a un conjunto de JRPGs de gran calidad. En concreto, Tales of Xillia, que contó en nuestra página con una valoración de 85, nos invitaba a vivir una historia original, divertida y llena de magia de la mano de Jude y Milla, que contaba además con un entramado jugable dinámico y adictivo a todas luces, demostrando que se puede innovar en esta vertiente sin renunciar a la esencia clásica que hizo del género lo que fue en anteriores etapas tecnológicas.

Tales of Xillia 2 sigue ese mismo camino y lo mejora, algo que nos congratula de enorme manera. Pero antes de todo hay que contar algo de la historia, aunque sin desvelar posibles spoilers para todos aquellos que no hayan podido jugar a la siguiente entrega. Nos encontramos ante un planteamiento de los hechos que nos trasladan en el tiempo un año después del fin de la historia del primer Tales of Xillia, encontrándonos en el camino a los personajes que protagonizaron aquella aventura, e incluso pudiendo cumplir misiones relacionadas con ellos y que nos darán más información acerca del nuevo rumbo que adquiere sus vidas.

Para todos aquellos que se lo estén preguntando, evidentemente, el hecho de haber jugado a Tales of Xillia aportará un extra de información fundamental para entender la historia en toda su amplitud, pero Tales of Xillia 2 cuenta una aventura totalmente independiente a la misma, por lo que si no jugamos en su momento a la primera entrega no tendremos ningún problema a la hora de disfrutar al máximo de un argumento que tendrá como principales protagonistas a Ludger Kresnik y Elle Marta.

Estos dos nuevos personajes cruzarán de forma inesperada sus caminos, en un contexto en el que el mundo se ve envuelto de nuevo en un conflicto a gran escala en el que se anhela la paz. Ludger Kresnik por su parte, luchará contra la influencia de un hermano, Julius Kresnik, cuya sombra se cierne sobre él de forma muy alargada, mientras que Elle Marta trata de alcanzar Canaan con la convicción férrea de encontrar allí a su padre en el lugar donde los sueños se convierten en realidad.

Pese a que no queremos extendernos más en este aspecto, sí es necesario comentar que durante la historia nos hemos encontrado con una de las novedades que aparecen con respecto a Tales of Xillia, y es la posibilidad de elegir opciones en los diálogos o en las acciones de nuestro personaje en secuencias muy concretas. De esta forma, vemos como Tales of Xillia 2 cuenta con varios finales diferentes, dependiendo de las elecciones que hayamos ido realizando en todo momento.

Uno de los mayores activos con los que contaba Tales of Xillia se ve mejorado y ampliado en Tales of Xillia 2. La diversión del Dual Raid Linear Motion Battle System que tan buenos resultados ha dado en la saga, pasa al siguiente nivel en Tales of Xillia 2 con la concepción del Cross Double Raid Lineal Motion Battle System. Con este sistema veremos como se han ampliado acciones como las de atacar, pudiendo realizar golpes dependiendo de la inclinación con la que usemos el pad. Pero también encontraremos una profundización mayor en las vinculaciones, además de una transición muy rápida entre la elección de los hasta cuatro combatientes si decidimos renunciar a las órdenes que cumple automáticamente la inteligencia artificial.

Pero una de las características más novedosas será la transformación que podrá llevar a cabo Ludger Kresnik, que adoptará un aspecto imponente que vendrá acompañado de un poder fuera de lo normal, y que nos ayudará a superar las fases más complicadas gracias a esta nueva fórmula. También, podremos intercambiar el estilo de lucha que en ese momento esté esgrimiendo el personaje, cambiando su forma de pelar en cualquier momento y dándole una mayor dimensión a cada combate. Un conjunto de novedades que se añaden a una buena estructura para plantear un sistema todavía más cuidado que antes.

Por último, y por lo que pudimos comprobar, otra las novedades la encontramos en el Orbe de Allium, que sustituye al de Lilio. En lugar de evolucionar a nuestro personaje de acuerdo a aquel sistema que tanto se parecía al de Final Fantasy XIII, encontraremos una evolución basada en diferentes áreas, a saber: fuego, agua, tierra, viento, luz y oscuridad. De esta forma, eligiendo cualquier de ellas, iremos desbloqueando artes y habilidades que poder ir añadiendo al repertorio de nuestro personaje.

Con todo esto, y habiendo jugado unas cuantas horas que se nos han pasado volando, podemos asegurar que nos encontramos ante otro gran JRPG para la veterana PlayStation 3. A falta de profundizar en una historia que llama la atención y apunta maneras, las bases jugables y argumentales parecen ser las adecuadas, ofreciendo importantes mejoras que respetan al máximo las virtudes del primer Tales of Xillia. Únicamente queda esperar unas pocas semanas para que por fin el juego salga a la venta y podamos disfrutar al completo de la historia que ahora cuentan Ludger Kresnik y Elle Marta.

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