Impresiones Samurai Warriors 4
Afila tu katana, pues la necesitarás en breve
Resulta casi imposible entender el género del hack’n’slash oriental sin tener en cuenta las aportaciones que los recién renombrados como Tecmo Koei han realizado. Con obras de culto como Ninja Gaiden se han mantenido en la cumbre con otras franquicias más cercanas al juego que hoy nos ocupa como Dinasty Warriors o Warriors Orochi. Teniendo en cuenta que el otro día se anunció su edición conmemorativa, creemos que es el momento apropiado para contaros nuestras impresiones tras probar Samurai Warriors 4 en las oficinas de Koch Media.
Más centrados en el mercado japonés, donde tienen una demanda increíble y copan las listas de ventas según se lanzan, estas creaciones de Tecmo intentan conquistar los exigentes mercados occidentales poco a poco, pero sin renunciar ni una gota a su estilo característico. Las distintas sagas Warriors del estudio Omega Force resultan complicadas de enmarcar, pues aparecen varias cada año. En esta ocasión, Samurai Warriors quiere servir como regalo de décimo aniversario de esta ya veterana saga japonesa.
Esta nueva entrega tiene como fin ser la más grande y la mejor que se han visto, coincidiendo además con el desembarco de la misma en PlayStation 4. Parece que los más de 34 millones de unidades vendidas no son suficientes y tanto estudio como distribuidora quieren romper récords. Las mejoras y añadidos para esta nueva entrega se centran en varios pilares. Podríamos enumerarlos de esta manera: mejoras visuales -obvias, teniendo en cuenta la llegada a un hardware superior-, nuevos guerreros, nuevos ataques y nuevas modalidades de juego.
Entre estos nuevos personajes podemos nombrar a Noboyuki Sanada y Yoshitsugu Otani por ejemplo. Pese a la incorporación de nuevos samuráis, éstos se unirán a algunos de los que ya hicieron acto de presencia en las entregas anteriores. De este modo, entre viejos y nuevos guerreros la cifra asciende hasta los 55. En cada misión además se ha incorporado la opción de simultanear de personaje con tan sólo pulsar el botón Options al menos en su versión de PS4. Utilizando esta funcionalidad podemos reunir a ambos guerreros en una misma parcela del mapa para crear un efecto de cooperación offline, aunque la IA no sea aún para tirar cohetes.
Siempre será mejor ejercer estas funciones cooperativas en red. En este sentido, los usuarios de consolas Sony están de enhorabuena, pues se ha incorporado la opción de cross-play entre las tres plataformas en las que se pondrá a la venta (PS4, PS3 y PS Vita). De este modo se eliminan restricciones que no tienen sentido en muchos juegos que aparecen en varias consolas de la misma familia (aplíquese también a la competencia). Por si fuera poco, si adquirimos el juego en más de una, tendremos la opción de cross-save para portar nuestra partida de una plataforma a otra. De nuevo, ya podrían aprender otros estudios.
En cuanto a sus mecánicas de juego no encontraremos ninguna novedad de peso. Se avanza por unos mapas lineales acabando con cientos de soldados hasta que nos aparecen unos objetivos especiales de mayor resistencia. Como hemos citado antes, la IA no es precisamente un exponente de buen funcionamiento y por tanto será relativamente fácil acabar con los enemigos rasos y conseguir unos multiplicadores de combo escandalosos. Más puñeteros serán algunos oficiales o superiores, cuya gama de ataques y el daño de los mismos en zonas en las que nos arrinconen nos harán sudar y tener que dar uso a los ataques especiales.
Entre esos ataques encontraremos los denominados Hyper, una mezcla de velocidad y contundencia en los que además su representación gráfica es especialmente vistosa. Por otra parte encontramos el llamado Ataque de Ira que se realiza cuando un medidor de Carga Espiritual llega a su máximo, lo que a veces nos obliga a su desaprovechamiento con enemigos de baja amenaza. La otra opción de ataque en la que tenemos clara ventaja es a lomos de nuestro caballo, pues tenemos gran margen de ataque, mientras que somos un blanco menor por la altura. Podemos llamar al equino en cualquier momento.
La demo probada nos llevaba de la mano por el modo Historia, por lo que aún no podemos tener mucha conciencia sobre los distintos modos de juego que se incluirán. Se han anunciado los llamados Chronicle Mode y Vagrant Mode, que harán de esta entrega la probablemente más completa de todas las sagas de Omega Force. Teniendo en cuenta que dicha demo corría en PS4, nos vemos en la obligación de contaros qué tal le sienta la next-gen a los samuráis. Como era de esperar, una de las mejoras tiene que ver con el elevado número de enemigos en pantalla que el juego puede mover ahora y que está bastante mejorado con respecto a las anteriores entregas de este estilo -y ya era un número bastante considerable-. Sin embargo los enemigos repiten demasiado el modelo y rompen la sensación de credibilidad. Si se realizan mejoras en cuanto al tipo de estos modelos o sus animaciones copia-pegadas estaríamos ante el Warriors definitivo. La otra mejora es a nivel de animaciones de combate, modelado de los protagonistas y el texturizado en general, pero son algunas de las que se dan por hecho si saltas a la plataforma superior.
La nueva ambientación, que según nos dicen desde la distribuidora tendrá lugar en China da para cuestionarnos qué objetivos tendrán estos guerreros japoneses en el país vecino. A falta de probar si la versión de Vita mejora con respecto al nivel regular de la que hacían gala otras entregas similares de la portátil, podemos destacar sin duda la ambición de Omega Force por hacer algo aún más grande si cabe para este aniversario. El próximo 24 de octubre será cuando los guerreros afilen sus katanas y salgan al campo de batalla con edición física únicamente en PS4. Los usuarios de PS3 y PS3 Vita que quieran disfrutar de sus funcionalidades cross-play y cross-buy tendrán que adquirir la versión digital desde PlayStation Store.