Impresiones de las expansiones de Borderlands 2

David Soriano · 29 diciembre, 2018
Probamos La Escabechina Sangrienta de Mr. Torgue y La Gran Cacería de Sir Hammerlock.

Hace unos días se anunció que será lanzado un pack que incluirá las expansiones que están saliendo para Borderlands 2. Muchos pensarán qué tienen estos contenidos descargables como para que se merezcan el lujo de ser trasladados a un Blu-ray. La respuesta es fácil, más que contenidos descargables, lo que Gearbox ha hecho con el primer Borderlands y su secuela ha sido crear auténticas expansiones, valiosas a partes iguales tanto por su duración como por su grado de diversión.

Tras La Capitana Scarlett hemos podido probar otro par de ampliaciones (La escabechina sangrienta de Mr. Torgue y La Gran Cacería de Sir Hammerlock) que pasamos a desgranar en las siguientes líneas:

En primer lugar entre estos dos apareció La escabechina sangrienta de Mr. Torgue. En este caso, la historia no consigue enganchar tanto como la anterior, que suponía un soplo de aire fresco con lo que se veía en la historia principal. Partamos de su base: nada más acceder a la nueva zona que se desbloquea con este DLC accedemos a la segunda de mayores proporciones de todo Borderlands 2. En el vídeo de introducción comprobaremos la agresividad de Mr. Torgue, el personaje que da nombre a este contenido descargable. Para que os hagáis una idea aquellos que jugasteis a las expansiones del primero, estamos cerca de aquel DLC de oleadas protagonizado por Mad Moxxi. Precisamente la exhuberante fémina será una de nuestras ayudantes, junto con la debutante más querida de la segunda entrega: Tina Chiquitina.

La premisa de este DLC es simple: conseguir batirnos por oleadas cada vez más complicadas para conseguir ser el mayor cabronazo (literalmente). Derrotando a los enemigos más duros o superando dichas oleadas y otras misiones secundarias de este contenido descargable obtendremos la nueva moneda Torgue, único método de pago para unas nuevas máquinas expendedoras que dan armas exclusivas de la marca Torgue bastante potentes y que nos pueden venir bastante bien para la aventura principal. Ya se sabe, es parte del encanto que tienen las expansiones de Borderlands, se entrelazan perfectamente con la historia principal y cambiar de una a otra es tan fácil como usar un punto de viaje rápido de Pandora.

Pasemos ahora a el último en hacer su aparición y penúltimo en total: La Gran Cacería de Sir Hammerlock. Para quien no caiga ahora mismo, Sir Hammerlock es ese lunático con gran afán por las cacerías de animales y criaturas cuanto más raras posibles. Nos encarga unas cuantas misiones, además de ser uno de los primeros personajes aliados en aparecer en la aventura principal de Borderlands 2.

Desde el equipo de Gearbox que desarrolla estos DLCs han decidido afortunadamente no complicarse mucho la vida ni dar demasiadas vueltas de tuerca al papel que Sir Hammerlock debería tener en este DLC: el de invitarnos a participar en un curioso safari y su consiguiente cacería. Bajo esta premisa se esconde una campaña corta (unas 4-5 horas) pero que se acompaña de un elevado número de secundarias para aumentar el grueso de duración de la expansión.

Como viene siendo habitual, la acción se desarrolla en una nueva zona ajena a los problemas de Pandora, a la que se puede acceder en cualquier momento, como ya hemos comentado en el punto anterior, pero que en esta ocasión conviene que sea terminada tras la historia principal, pues no sabemos bien porqué, pero desvela algunos spoiler de la trama principal.

Se añade otro nuevo vehículo, exclusivo de este DLC, pero sin duda alguna el gran punto a favor se lo lleva el diseño artístico, tanto de los nuevos enemigos, como del escenario. Contrasta mucho estos nuevos escenarios tipo sabana con ciertas zonas tóxicas, en oposición a aquellos entornos gélidos del comienzo del juego y la tónica general de los entornos de Pandora.

Gearbox se está doctorando en lo que a contenidos descargables se refiere, pocos (hablando de Borderlands 1 y 2) han dejado con la sensación de ser prescindibles. Estos dos de los que hablamos arriba no lo son, y cumplen perfectamente con lo que este invento de la presente generación debería haber sido: ampliaciones opcionales y voluntarias que sumen horas de diversión y que prolonguen la vida útil de sus juegos meses después de su lanzamiento. Quedamos expectantes por ver qué despedida nos tienen preparada para uno de los juegos más desternillantes que se recuerdan, y que con las citadas expansiones, no hacen más que aumentar su locura.

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