Si existe una franquicia capaz de triunfar con cada una de sus entregas, esa no es otra más que Call of Duty. Desde que Activision decidió lanzar de manera anual las diferentes partes de esta saga, varios estudios han sido los responsables de desarrollar varios superventas, destacando sobre todos ellos Infinity Ward, padre de la subsaga Modern Warfare, la responsable directa de cambiar las reglas del juego en lo que a cuestiones económicas se refiere dentro de la industria del videojuego.
Durante nuestro reciente paso por el E3 tuvimos ocasión de acceder a una presentación de la nueva entrega de la saga, Call of Duty: Ghosts, confirmando algunos detalles que ya habíamos tenido ocasión de conocer en días previos al evento y confirmando que el gigante de la distribución norteamericano prepara para este 2013 uno de los títulos más completos para su saga estrella.
En la presentación a la que tuvimos ocasión de asistir descubrimos la versión para próxima generación que llegará a las tiendas una vez PS4 y Xbox One aterricen en el mercado. Desde Infinity Ward nos ofrecieron algunas pinceladas sobre la línea argumental base del título, en el que EEUU ya no es la potencial mundial y diferentes países, hoy considerados subdesarrollados o en vías de desarrollo, han tomado el control mundial gracias a un inesperado giro de guión, con toda la tecnología a su favor. Con esta premisa nos sumergiremos en una nueva guerra que los responsables de Modern Warfare trabajan con sumo cuidado.
Los chicos de Infinity War destacan la importancia de la historia sobre otras cuestiones, dejando muy claro que la narración cinematográfica seguirá siendo el punto clave del modo campaña, donde veremos sucederse misiones espectaculares, repletas de fuegos de artificio, al estilo de un blockbuster hollywoodiense. Claro está, debemos traducir todo esto en la presencia de una buena cantidad de secuencias en script, así como en una jugabilidad bastante lineal, cuestión habitual de la saga, aunque en esta ocasión podremos movernos con algo de mayor libertad sobre el escenario.
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En PS3, Ghosts tendrá un aspecto similar al de Black Ops II (la entrega más reciente de la saga), aunque podremos apreciar diferentes cambios y mejoras a nivel visual. Durante la presentación se nos ofreció un pequeño vídeo documental en el que Infinity Ward explicaba las mejoras que presentará la propuesta en PS4, destacando un sistema de iluminación potenciado, así como una mayor teselación de la imagen, lo que da como resultado una mayor definición de los polígonos y un acabado más realista y acorde con la potencia de la próxima generación de consolas.
Aunque el gran atractivo de Call of Duty para el usuario medio siempre ha sido su multijugador, durante la presentación no tuvimos ocasión de conocer sus primeros detalles, por lo que deberemos seguir esperando para ver como se comporta la nueva generación de consolas con la vertiente online de la obra, aquella que ha sido desde siempre la responsable directa del éxito de ventas de cualquier entrega, desde Moder Warfare hasta Black Ops, pasando por World at War. Infinity Ward siguió con su presentación, ofreciéndonos dos secuencias ingame que nos dejaron claras las intenciones del estudio con esta nueva entrega.
La primera misión que vimos nos presentaba a Riley, el perro pastor alemán que tanto ha dado que hablar desde que se mostró el primer tráiler del juego. La desarrolladora ha prestado especial atención a este importante animal, que podremos controlar para llevar a cabo diferentes misiones y que nos acompañará durante muchas otras. Gracias a Riley podremos ladrar a los enemigos, haciendo que estos se muevan y se pongan en línea con nuestro rifle de francotirador, facilitando así la consecución de nuestro objetivo. Aunque no han sido pocas las bromas en torno a la presencia del can, habrá que ver si finalmente se gana al público tras el lanzamiento de la propuesta.
La otra misión que tuvimos ocasión de ver transcurría bajo el agua, dejando a las claras que las señas de identidad de Call of Duty siguen intactas: momentos impresionantes por doquier para que el jugador esté con la boca abierta el mayor tiempo posible. Durante la demo tuvimos ocasión de comprobar la escasa evolución en la inteligencia artificial de los enemigos o la poca innovación jugable que presentará Ghosts, donde apenas destaca la posibilidad de saltar una cobertura mientras disparamos. La propuesta, al menos en apariencia, parece en exceso continuista con las anteriores aunque, si algo funciona, mejor dejarlo como está.
Es evidente que Call of Duty: Ghosts cosechará su grueso de ventas en PS3 y Xbox 360, por lo que Infinity Ward parece haber actuado en consecuencia y, aunque la versión para PS4 y Xbox One será más espectacular, deberemos esperar hasta el próximo Call of Duty[I/] para ver lo que realmente nos depara la franquicia en la nueva generación. Con todo, los amantes de la saga pueden respirar aliviados, Infinity Ward no es por casualidad el estudio que ha entregado los mejores Call of Duty, y que sean los responsables de la nueva subsaga de la franquicia responde casi con seguridad a un plan que promete extenderse durante varios años.
Ghosts seguirá siendo esa explosión de fuegos artificiales en los que se ha convertido la saga más conocida del mundo de los videojuegos. La acción no parará de sucederse en ningún momento y gracias a los cambios y mejoras que Infinity está desarrollando veremos uno de los Call of Duty más interesantes que han salido en años, que deja de lado tramas que ya conocíamos para explorar una completamente nueva, donde los aspectos básicos de la saga permanecen presentes y dejan hueco a nuevos ingredientes para que la batalla por el reinado shooter siga con más fuerza que nunca.