Esta mañana he probado una versión casi final de Farpoint, el exclusivo de PlayStation VR que pretende revolucionar el mundo de los shooters con realidad virtual. Y, a espera de ver qué tal rinde a partida avanzada, su duración en horas respecto a su precio, etc. lo cierto es que las sensaciones que deja este viaje que puede jugarse en cooperativo online son francamente únicas e inmersivas. Todo se debe, esencialmente, al PlayStation Aim Controller, el nuevo mando que va a lanzar Sony junto al videojuego el próximo 17 de mayo y que no es, como muchos pensaban, un acoplador de plástico para el PS Move, sino que hablamos de una nueva forma de jugar a shooters en primera persona, un dispositivo capaz de interactuar perfectamente con nuestra posición, nuestro ángulo de visión y nuestra puntería.
Farpoint es, como os cuento en el vídeo de abajo, lo más cerca al disparo con armas futuristas que vais a estar con un casco de realidad virtual pueso, sea el que sea. Y además es un videojuego bastante hardcore, por lo tanto, una alegría automática. En este descubrimiento de superficies planetarias inexploradas y repletas de bichos que esperamos que dure muchas horas nos esperan la necesidad de cambiar de armas constantemente, la toma de coberturas y puestas a cubierto, la sincronización con el compañero, la gestión inteligente de munición… Como si jugáramos a Destiny, a Dead Space o a Mass Effect, aquí el despliegue de balas silbando por los aires, granadas, minas, golpes cuerpo a cuerpo, etc. fluye sin cesar en una experiencia muy bien trabajada también en el efecto estereoscópico y la profundidad, junto a su sobrecogedor apartado artístico y lumínico.
Farpoint me ha gustado mucho y me ha ilusionado en un momento donde creía que la realidad virtual estaba empezando a encerrarse en experiencias rápidas y ocasionales, donde vemos poquísimos juegos en sentido tradicional, salvo Resident Evil 7 y algún otro adaptado. Su talante de superproducción y la posibilidad de jugarlo de principio a fin con un amigo que esté en su casa, conectado con su casco, y con el Aim Controller entre las manos jugando como nunca antes a un shooter, hace que, si su diseño de niveles es tan bueno como prometen estos primeros pasos que he podido dar en el evento #PSVRJourney de esta mañana en Madrid para enseñarnos éste y Starblood Arena, estemos ante algo muy grande e importante, crucial en esta carrera a medio gas que está siendo la Realidad Virtual.
Y sobre Starblood Arena, con lanzamiento la semana que viene en la Store de PSN y otro candidato a seguir la estela de Rigs en cuanto a compoetitivos multijugador -esperemos que esta vez con más contenido-. Resulta increíble lo arriesgado de su propuesta jugable, solo para estómagos de acero por la verticalidad y giros de sus partidas vertiginosas, donde el vuelo es libre y hay que mirar en todas direccioes para fijar objetivos, disparar distintas armas, soltar minas, hacer rodeos, etc. Al parecer, va a haber muchos personajes que desbloquear, cada uno con sus habilidades, y muchos modos y mapas. En apenas unos días podremos ponernos el casco para recorrerlo de principio a fin, si es que tiene fin por su talante esencialmente online competitivo…