Exposición Vida Extra:
El pasado 20 de Abril se inauguró en el Espai Cultural Caja Madrid en Barcelona la exposición “Vida Extra”, donde se nos muestra la repercusión e influencia de los videojuegos en la sociedad actual, hasta el punto de convertirse en algo cotidiano.
La exposición nos destaca como los videojuegos se han instalado en nuestras vidas (cuenta con la atención ya de un 65% de la población), la popularidad en aumento del medio y el cambio sociológico que esto supone. Nos abarcan todas las facetas que pueden adquirir los videojuegos, desde creadores de tendencias a transmisores de valores, herramienta de enseñanza y por supuesto fuente de imaginación y diversión.
El itinerario de la exposición está organizado mediante diferentes respuestas a la pregunta que hace de subtitulo de la misma: ¿Por qué no podemos vivir sin videojuegos? , y entre las que se encuentran: “Mueven mi mundo”, “Invento mi
tiempo”, “Quiero jugar”, “Soy más listo”,“Tengo un millón de amigos” y por último, “He visto cosas que vosotros no creeríais”.
Te hacemos un breve repaso por que puedes encontrar en cada una de ellas:
“Mueven mi mundo”
En esta primera etapa se nos muestra como los videojuegos han conseguido consolidarse como un gran motor económico. De hecho, actualmente genera más beneficios que la industria cinematográfica.
Una de las razones de esto se encuentra en el un alto porcentaje de población seguidora del medio (65%). La proliferación de juegos en los que se requiere de varios jugadores en la misma habitación ha proliferado la sociabilidad de los jugadores, los cuales un 80% asegura que su vida social ha mejorado gracias a los videojuegos y más de la mitad creen que su capacidad de trabajo en equipo ha mejorado al igual que su capacidad de superación.
Y en contra de lo que se suele pensar del jugador, este distribuye su tiempo de ocio de manera muy similar al no jugador, escuchando música, visitando el cine o haciendo deporte entre otras cosas, prácticamente con la misma frecuencia que la persona que no juega a videojuegos.
“Invento mi tiempo”
La segunda etapa la exposición se centra en el potencial creativo de los videojuegos. Donde podemos vivir aventuras de todo tipo en muy dispares escenarios virtuales, encarnando a personajes de muy distinto registro o incluso que se ajusten a nuestros gustos o persona. En el mercado también podemos ver como coexisten juegos de todo tipo, donde cada vez se diversifican más los perfiles de jugador, y que hace que actualmente encontremos juegos para cualquier edad o para cualquier tipo de persona.
La proliferación de los “avatares” como medida de personalización de nuestros personajes virtuales. La influencia de los videojuegos no solo en los jugadores si no en otros medios como el cine, el cual ha adaptado a la gran pantalla diferentes videojuegos y cuya práctica esta siendo bastante común y en aumento en los últimos tiempos.
Y como colofón la evolución de los videojuegos, la mezcla de artistas gráficos, guionistas, programadores, que son capaces de crear una obra, que muchos críticos y la sociedad en sí empieza a darle la categoría que se merece: cultura/arte.
“Quiero jugar”
En esta etapa, nos cuentan como los juegos independientemente de que puedan abstraernos, concentrarnos o incluso resultarnos adictivos, su única finalidad y para lo que fueron inventados es como elemento de ocio, para entretener y divertir a los jugadores. Y que al fin de al cabo solo se trata de eso, jugar.
Pero como de alguna manera la historia o el juego sale de la pantalla para instalarse en nuestras conversaciones, algo que ya hemos tomado como algo totalmente natural, el pensar en un videojuego fuera de la habitación donde lo jugamos o conversar sobre él.
“Soy más listo”
Aquí nos muestran a los videojuegos como herramienta para el aprendizaje. Como con ellos se pueden transmitir valores, conocimientos o desarrollar habilidades. Todo esto gracias a que a diferencia del cine, el protagonista eres tu mismo, el que vive las experiencias, el que tiene que tener la habilidad, el que se lleva los conocimientos, y el que aprende lo que se le enseña.
Algunas escuelas y universidades utilizan videojuegos para dar ejemplos sobre comportamiento social o clases de historia, así como algunos pilotos de formula uno utilizan los videojuegos para conocerse mejor las pistas donde luego correrán en la realidad, son algunos ejemplos de todo lo que los videojuegos pueden llegar a aportar.
“Tengo un millón de amigos”
En este apartado nos hablan de las redes sociales creadas a partir de los juegos, donde cada día más podemos comprobar que las compañías desarrolladoras hacen más énfasis en el apartado online del juego, donde se puede jugar con gente a través de Internet independientemente del país o condición de la persona con la conectamos y jugamos, esto crea grupos a través de Internet, comunidades, campeonatos organizados y otras nuevas formas de relación social.
También nos nombra el “cosplay”, moda originada en Japón que consiste en adquirir el aspecto de tu personaje favorito de videojuegos y como algunos a parte de adquirir su aspecto, imitan sus comportamientos.
“He visto cosas que vosotros no creeríais”
En la última etapa encontraremos por un lado la influencia del videojuego en otros ámbitos, como el cine, la música, etc. La evolución desde la máquina recreativa, como ha llegado a convertirse en la videoconsola que tenemos en casa e incluso llevarnos con nosotros a todas partes con las nuevas consolas portátiles.
El lenguaje creado por los videojuegos no solo a nivel narrativo y tecnológico si no a los cánones jugables que se han creado, definiendo como se juega, que tipos de objetivos se suelen proponer, como se solventan, etc.
Para finalizar, y para resumir, como el videojuego ha pasado de ser un producto secundario, a tener una gran importancia en la sociedad, siendo casi algo cotidiano, creativo y en constante evolución.
Para el que esté interesado en visitar la exposición, la encontrará en el Espai Cultural Caja Madrid desde el 20 de abril hasta el 19 de julio en Plaza Catalunya, 9 (Barcelona), la entrada es gratuita y los horarios:
-De lunes a sábado de 10 a 21h
-Domingos y Festivos de 10h a 14h
Entrevista:
Tuvimos el placer de entrevistar a David Casacuberta, comisario de la exposición, también es profesor de filosofía en la Universidad Autónoma de Barcelona y preside la ONG «Fronteras Electrónicas España». Esto es lo que respondió a nuestras preguntas:
1-¿Cual fue la idea o motivación que promovió la exposición “vida extra”?
La idea surgió del think-tank que asesora Caja Madrid. A mí siempre me han interesado las implicaciones sociológicas de los videojuegos, y encontraba que se simplifica y estereotipa mucho el mundo de los videojuegos, de manera que me puse a confeccionar una primera propuesta, que fuimos evolucionando hasta tener los primeros guiones, etc.
2- ¿Crees que el resultado ha sido satisfactorio o bastante fiel a la idea inicial?
Sí, completamente. Hemos tenido libertad total a la hora de plantear conceptos y tesis. El equipo de diseño de La Mosca y la diseñadora de expos Eva Goenaga han hecho suya la idea de la expo desde buen principio y sus soluciones gráficas o de montaje han sido siempre las más adecuadas para los conceptos que queríamos presentar.
3- ¿Cómo te han influido a ti los videojuegos?
Es difícil hablar sobre uno mismo. Sí puedo decir que recuerdo con cariño las tardes de adolescente jugando con el Commodore 64 o jugar partidas con los amigos en los arcades.
Sin haber jugado a videojuegos la exposición sin duda habría sido diferente, mucho más erudita y libresca, sin entrar en lo que hace de los videojuegos un mundo vibrante y en continua transformación.
4-¿Qué relación te une a los videojuegos actualmente?
Cuando uno está muy ocupado montando cosas, dando clases, etc. es difícil seguir jugando. Lo cual es una pena. Mi relación con los videojuegos es ahora básicamente profesional: probar un juego nuevo para hacerme una idea de sus posibilidades, ver como está organizada una consola etc. Esporádicamente puedo jugar con amigos o familia a un juego sencillote de la Wii.
5- La relación entre videojuegos y sociedad se ilustra en la exposición como algo realmente positivo, crees también que al igual que muchas voces que se alzan, ¿pueden influir también de alguna forma negativamente en la sociedad?
Sin duda, los videojuegos pueden tener efectos negativos, pero no más ni menos que la forma en que puede influir un libro, una película, un partido de fútbol… El efecto de imitación de actos violentos que puede generar un videojuego ha sido también demostrado para las películas, pero no he visto a prácticamente nadie demonizando a Tarantino.
Digamos que si alguien no es demasiado sociable, buscará los instrumentos para continuar en ese estado. Un adolescente puede quedarse en casa en lugar de salir a la calle jugando a los videojuegos, pero también viendo películas o navegando por Internet.
6-¿Que crees que le puede aportar la exposición a un “gamer” (jugador habitual de videojuegos)? ¿Y a una persona que no conoce demasiado sobre videojuegos?
Creo que es un expo que tanto neófitos como experimentados pueden disfrutar por igual. El jugador se reconocerá en ciertas actitudes y sonreirá al ver referencias a juegos antiguos, pero es fácil que también desconozca muchos de los datos sociológicos o psicológicos que ofrecemos. La persona neófita además podrá revisar algunos de los estereotipos que normalmente se tiene sobre los videojuegos.