El condensador de fluzo: Oddworld Abe’s Oddysee
Luchar por la libertad o acabar como menú del día, PSX contra la esclavitud
El 19 de septiembre de 1997 asistíamos, en Europa y Norteamérica, al lanzamiento de uno de los primeros juegos de PSX que dejaría su sello para la posteridad. Todo ello a pesar de las mecánicas de juego calcadas a otros súper ventas como el Prince of Persia original de Broderbund (con los derechos de la saga ahora en poder de Ubisoft) o el Flashback de Delphine Software (compañía francesa que desapareció tras su bancarrota). La desarrolladora Oddworld Inhabitants nos traía este plataformas en 2D de scroll lateral donde cogíamos las riendas de Abe, un ser de la raza mudokon que nacido esclavo en el mundo de Oddworld (un mundo donde habitan diversas razas) se dedicaba a trabajar duramente en las fábricas de comida de Granjas Hostiles.
Pero toda cambia el día que Abe escucha por accidente las intenciones de sus jefes de la raza dominante glukkon. Los negocios no van todo lo bien que deberían y han decidido sacar una nueva línea de comida con carne de mudokon. Es en ese momento en el que comienza la huida hacia delante de nuestro protagonista y por el camino tendrá que ir rescatando a sus compañeros de raza para librarlos de su nuevo destino como menú del día. El viaje de Abe se va a ver plagado de obstáculos en su nuevo objetivo de destruir a la fábrica que ya ha conseguido la extinción de otras razas y ahora pretende comenzar con la de los propios mudokons.
Nuestro personaje gozaba de un control excelente para llevar a cabo todas las tareas que se le venían encima, saltos, ataques e incluso sigilo para atravesar algunas zonas. Y por si eso no fuera suficiente Abe contaba con un par de poderes que resultaban muy útiles durante la aventura, la posibilidad de poseer a algunos miembros de la raza Stig y así poder usar su armamento y poder abrir una serie de portales que se encontraban repartidos por los escenarios y así desplazarse a otras zonas de otro modo inalcanzables. Estos portales también servirán para que nuestros amigos mudokons escapen de la esclavitud a la que les someten los glukkons.
Además una fiel mascota acompañaba a Abe en la aventura para ayudarle como montura a superar zonas en las que el salto del mudokon no era suficiente. Se trataba de Elum. Algunos puzzles del juego también requerían de la sincronización de acciones entre personajes y objetos.
A nivel técnico el juego raya a un gran nivel en todos sus aspectos. Gráficamente es una delicia de originalidad a pesar de usar mecánicas que ya se veían superadas por los motores gráficos en 3D. El detalle con el que se creó el mundo de Oddworld es digno de mención, tanto en escenarios como habitantes. Todo está recreado sin escatimar en sprites ni colorido. Las secuencias de vídeo muestran una gran calidad y sobre todo la introducción cinemática nos explica muy bien el argumento del juego. Es, en sí, una verdadera obra de arte en su concepto.
El apartado sonoro brillaba especialmente al llegarnos doblado perfectamente al castellano. La música no acompañaba el desarrollo completo del juego, pero sí hace acto de aparición en los momentos claves de la trama. Los diálogos que mantenemos con otras criaturas no pasan de pequeñas frases que se repiten dependiendo de la interacción que tengamos con ellas pero cumplen a la perfección.
Abe’s Oddysee se convirtió por derecho propio en uno de los juegos más recordados del catálogo de PSX por su ambientación, la riqueza del mundo que describe y su jugabilidad. Sus creadores diseñaron un mundo que bien podría haber protagonizado una saga literaria en lugar de haberse convertido en un videojuego.
Oddworld Abe’s Oddysee contó con una secuela en PSX, Oddworld Abe’s Exoddus, que salió un año más tarde, en 1998. La idea inicial de la desarrolladora era crear cinco juegos sobre la saga con cinco protagonistas diferentes pero esos planes finalmente no se llevaron a cabo. Posteriormente han existido diversos juegos ambientados en el universo de Oddworld entre los que destacan Oddworld Munch’s Oddysee (exclusivo de Xbox y segundo juego de los planificados originalmente) y Oddworld Stranger’s Wrath (que si vio la luz en PlayStation 3). También se han adaptado estos juegos a versiones para consolas portátiles.