Desde que se anunció en aquel Marzo del 2007 en una entrevista a Sony realizada por NG-Gamer y hasta nuestros días, el servicio virtual multimedia online de Sony , Home, ha sido capaz de atraer y distraer nuestra atención y tiempo sin llegar a ser el elemento más “protagonista” de la PS3, por decirlo de alguna manera.
Desde que se anunciara como una revolución en cuanto a comunicación, innovación y entretenimiento online nos ha ido llegando información por cuenta gotas, inundándonos con rumores que parecían no tener fin, haciéndonos la boca agua con imágenes dignas de admiración y comprensión intentando darles veracidad y credibilidad contando los días, las horas y los minutos de la marcha atrás hacia esa beta cerrada tan esperada y que muchos de nosotros ansiábamos mirando nuestra bandeja de correo electrónico esperando recibir una invitación de Sony.
Finalmente en Diciembre del 2008, después del anuncio oficial de Sony todos estábamos esperando a que apareciera ese tan esperado icono “Home” en nuestra barra de menú PS3, comiéndonos las uñas desesperadamente y preguntándonos porque a nuestro colega y/o vecino le ha aparecido y a nosotros no. Sin mas tardar, apareció como caído del cielo en nuestra PS3, ese icono tan peculiar y original que empapa de un azul espectacular nuestro fondo de pantalla; y así, le dimos a ver qué ocurría…
Comenzaba una descarga, de pocos megas, y comenzaba a su vez esa sensación que te recorre todo el cuerpo creando expectación y adrenalina. ¿Cómo será finalmente? ¿Cómo decoraré mi estudio? ¿Se podrá jugar a la bolera? ¿Será igual que Los Sims? ¿Podré ver películas en el cine con mi colega, cada uno en su casa? ¿Cómo funcionará? Una vez terminada la descarga, se nos informa de que se usará un total de 3 gigas y pico de nuestro disco duro para Home; tras aceptar, aparece una pequeña animación en la que deja mostrar un recuadro azul diseño “Home” que cae a un fondo blanco cuadriculado y en el que podemos leer “Pulsa X para conectarte…”. Sin dejar que acabe esa ráfaga de música aguda pulsamos la “X” y nos disponemos a conectarnos a los servidores de Home, nos disponemos a conectarnos a los servidores de Home, nos disponemos a conectarnos a los servidores de Home, nos disponemos a conectarnos a los servidores de Home… No es que me haya quedado rayado cual vinilo, pero esto fue lo que ocurrió y no es de extrañar; mientras unos esperaban aquel famoso icono a que hiciera escena en su barra de menú PS3, los que ya lo teníamos pusimos un trozo de papel con celo alrededor del botón x para entrar cuanto antes al esperadísimo Home; y claro, nadie podía entrar con tanta afluencia de gente. Los foros se llenaron de mensajes de desesperación y socorro, a todos nos pasaba lo mismo y es que aquel fatídico mensaje siempre quedará en nuestra memoria: Network Error: C-991.
Después de aquello conseguimos, por fin, entrar y empezar a personalizar nuestro personaje eligiendo modelos establecidos o creando nuestro único y original personaje. Tras la descarga del Plaza Home, todos nos quedábamos en el mismo sitio que empiezas, observando la grandeza y hermosura del espacio virtual que Sony nos había regalado con una cámara que se movía realizando paneos horizontales y verticales mezclados con zooms dignos de cine, mostrándonos todo el ambiente mientras en nuestra cabeza aparecía un mensaje de “Vuelve pronto…”. Decenas de personas moviéndose de un lado para otro, como si tuvieran que hacerlo todo en el menor tiempo posible; de 30 personas que había, en 25 ponía “hola” encima de su cabeza; todos estaban entusiasmados y expectantes , intentando descubrir: “¿Qué más hay?“.
Y eso fue lo que hicimos todos y cada uno de nosotros, avanzamos el joystick izquierdo hacia delante y comenzamos a caminar, otros a correr… Nos quedábamos mirando la magnitud del espacio Plaza, sus carteles, sus paneles de vídeo, el precioso estanque con puente incluido, las diferentes mesas de ajedrez y damas que ni yo ni unos cuantos pudimos probar al principio… También experimentamos con nuestro personaje, muchos ya hacían los típicos corros para bailar alrededor de la famosa pantalla de proyección donde se repetía una y otra vez la música de LocoRoco 2, otros adoptaban una postura mas tranquila y filosófica y simplemente se marginaban y se sentaban a contemplar los 360 grados; la máquina de hacer pompas cobró un protagonismo fugaz y parecía que todo era perfecto hasta que jamás dimos con el botón de saltar y entonces empezaron los malos comentarios que fueron apagados rápidamente con la descarga de la bolera, del cine y del centro comercial. Y es que quién no ha pasado ratos agradables en ese amplio espacio de colores vivos, ese espacio al que podemos llamar bolera pero también cápsula del ‘gamer’ en Home; y es que es aquí dentro donde podemos disfrutar de las míticas máquinas recreativas, echar una típica partida al billar, visualizar vídeos en las diferentes pantallas gigantes o, obviamente, retar a cualquiera que se crea superior a nosotros a los bolos; siempre y cuando haya alguna plaza libre, claro está.
Otra de las facetas de Home que rápidamente experimentamos fue el famoso centro comercial al que todos esperábamos entrar cuanto antes, y es que no teníamos idea de que tuviésemos que pagar por una simple silla 1,99 euros o por una bonita planta grande con hojas 0,75 euros, algo que a muchos nos defraudó pero que entendimos al momento al ver muchos objetos de pago y otros pocos de descarga gratuita como una mesa de cristal de diseño poco prometedor; sin embargo nos encantó el Centro Comercial con su estructura dinámica, su música de fondo pedante digna de cualquier centro comercial, su techo futurista y sus “numerosas” tiendas en las que encontramos desde sofás de cuero negro, pasando por lámparas o mesas de cristal hasta una figura de robot o una estantería de espadas de samurái. Llegaba otro de los grandes momentos que muchos estábamos esperando, y ese era el de descubrir el Cine. La más sonada y formulada pregunta fue la de: “¿Podré ver películas de mi disco duro con mi colega que está en su casa y no tiene la película?” De momento no, pero eso no nos importó cuando entramos en el complejo cinematográfico y nos embaucó su diseño y amplitud con escaleras que nos llevan a pasarelas con carteles informativos de películas o contenidos descargables exclusivos, esa gran pantalla panorámica de la sala central que no para de anunciar traillers o la gran ambientación de todo el complejo, especialmente dentro de las salas de proyección donde podemos elegir verlo desde la butaca o verlo con un ligero zoom. Todos estos espacios nos dejaron boquiabiertos (aunque un poco decepcionados con los tiempos de carga entre espacio y espacio) y con ganas de ver más y más, necesidad que saciamos cuando nos percatamos de que podemos crear Clubs exclusivos dentro de Home para clanes, grupos de amigos o cualquier cosa que se nos pase por la cabeza; eso sí, siempre pagando una cuota para la creación del club, pero que supone un avance en cuanto a la dificultad de concentrar a tus amigos en un espacio concreto en el que nadie, si no son invitados, podrá acceder; algo que muchos de nosotros agradecerá ya que nos ofrece otra herramienta de comunicación y reunión a los usuarios tal como Messenger o Skype y que ya muchos asiduos a Home están utilizando como medio para publicar anuncios, informes o simplemente mantener al día a los miembros del Club de todo tipo de actividades.
Todos nos quedamos satisfechos pero insuficientes de contenido y la verdad, era de esperar que justo cuando saliera Home no estuviese al 100% de sus posibilidades, algo totalmente comprensible y lógico; pero que Sony ha estado abusando de esto, es cierto. Y es que el espacio virtual Home de PS3 a muchos de nosotros se nos ha quedado “escaso” por la falta de esos prometidos espacios de juegos como Little Big Planet, Uncharted : El Tesoro de Drake o Warhawk que están llegando muy poco a poco como el espacio de Far Cry 2 o las carreras con avionetas de Red Bull.
En definitiva, Home es espectacular en el modo de conectar con gente de otros puntos de la tierra, interactuar con ellos , jugar a los bolos, echar una partida de ajedrez, pilotar una avioneta o simplemente mantener una conversación real en vivo. Home es lo que muchos de nosotros estábamos esperando conseguir con solo un click y de forma gratuita.