Suele ser habitual que las expectativas generadas sobre un hecho en concreto nunca lleguen a ser cumplidas del todo por la tendencia a maximizar nuestros deseos más anhelados. El E3 es un ejemplo perfecto de ello, por lo que muy pocas veces al acabar una conferencia de prensa sentimos que lo que nos se nos ha mostrado ha calmado todos nuestros deseos relativos al devenir en el mundo de los videojuegos.
Esta serie de afirmaciones eran ciertas hasta ahora, ya que hemos asistido a uno de los eventos previos al E3 más espectaculares que se recuerden. Sony ha sacado músculo en un momento en el que el viento parece soplar a favor en busca de ese golpe encima de la mesa que deje claro a los competidores quien va en cabeza en la actual generación. Si bien es cierto que lo anunciado y más impactante carece de mucha información, la ilusión que se ha generado y se detecta en las diversas redes sociales quedará en el recuerdo durante mucho tiempo.
Y es que la conferencia no podía comenzar de mejor forma que resucitando a un deseado viejo conocido. Fumito Ueda se encontraba entre el público cuando su eterno proyecto, The Last Guardian, volvía a aparecer en un E3 después de seis años de especulaciones de todo tipo y con la esperanza perdida por parte de la gran mayoría de usuarios. Los Ángeles Memorial Sports Arena se caída con la aparición de la extraña criatura y el niño al que acompaña, ilustrando una escena tan entrañable como bonita a nivel artístico.
Sin embargo, ésto sería sólo el comienzo de lo que PlayStation tenía preparado al público. Para mantener el ritmo, ademas, Guerrilla Games saltaba al escenario para deshacerse de la saga Killzone por un tiempo y presentar una nueva propiedad intelectual. Horizon Zero Dawn surgía como un juego de acción en mundo abierto en el que la lucha contra enormes criaturas metálicas y tecnológicamente avanzadas está servida. Algo fresco que ha sorprendido además por la ambientación y por una calidad gráfica que acaba con transiciones entre el gameplay y las cinemáticas.
Pero los anuncios no se han detenido ahí. Hemos asistido a la presentación de un nuevo Hitman que llenará un hueco importante para los amantes del sigilo en esta generación. También Media Molecule nos ha lanzado el mensaje de que quiere que la comunidad siga mostrando su creatividad con el sorprendente Dreams, en el que podremos ser artistas prácticamente sobre un lienzo en blanco para crear personajes, escenario y quién sabe si también las reglas del juego que deseemos construir.
Street Fighter V tampoco podía faltar a la cita dada su exclusividad con PlayStation 4 y PC, y por dicho motivo éste era un momento ideal para presentar tanto a Cammy como a Birdie dentro de la plantilla de luchadores. No Man’s Sky era otro fijo dada la tremenda ambición del pequeño estudio Hello Games, y que ha vuelto a demostrar con un increíble gameplay que evidencia la inmensidad del proyecto. Activision aparecía también por primera, pero no única vez durante la noche, para anunciar un secreto a voces y que no era otra cosa que la tercera expansión de Destiny y que recibe el nombre de The Taken King.
Anuncios más correspondientes a la línea general de las conferencias que iban a ser la antesala de algo histórico. World of Final Fantasy, exclusivo de PS4 y PS Vita, iba a ser la previa del mayor bombazo que se recuerda en los últimos años, y es que el remake de Final Fantasy VII es una realidad. O al menos, su desarrollo. El público asistente no sabía si abrir la boca para gritar de emoción o para evidenciar su asombro. Fuese como fuere, el juego llegará primero a PlayStation 4, con lo que se entiende que también podrá disfrutarse más tarde en otras compañías. No disponemos de más información que el propio tráiler, pero lo cierto es que uno de los sueños más arraigados dentro de la comunidad de los usuarios está en camino de hacerse realidad.
Ante este hecho, muchos han tenido el problema de no llegarse a reponer a tiempo para el siguiente órdago de Sony. Tras el interesante anuncio del pack de juegos de Devolver Digital, Yu Suzuki aparecía en pantalla y todos sabían ya de qué se iba a tratar. Shenmue III está en desarrollo y necesita de financiación para acabarse. El objetivo son 2 millones de dólares, y en el momento en el que se está escribiendo el texto, pocas horas después de la conferencia, la cifra ya alcanza los 1,6 millones de dólares, con lo que es seguro que Shenmue III sea finalmente una realidad. Estará así pues disponible para PlayStation 4 y PC.
Tras los tres impactos directos al corazón del jugador, la conferencia ha continuado con Project Morpheus que, de momento, mantiene su nombre original y tampoco hacen acto de presencia los rumoreados periféricos Move 2. Breve mención al dispositivo que se podrá ver en la feria. Como también se vió y se podrá probar tanto Assassin’s Creed: Syndicate como Batman Arkham Knight, éste último recordando su inminente aparición en las tiendas el próximo día 23 de junio. Disney Infinity 3.0 preparaba el terreno para un impresionante tráiler de Star Wars: Battlefront, que luce realmente espectacular, de hecho tan espectacular como para sospechar si el juego corría en PC o en la propia consola de Sony.
Pero el final de la conferencia guardaba dos sorpresas. Activision volvía a saltar al escenario para mostrar Call of Duty: Black Ops III. Este significativo hecho venía a confirmar lo que pocos minutos después anunciarían ambas partes, y es el acuerdo por el cual los DLCs del juego saldrán antes en consolas PlayStation. Llega a su fin de esta manera el acuerdo con Microsoft al respecto y se crea una nueva alianza comercial entre los dos gigantes del entretenimiento digital.
Y la última de ellas, una de las más esperadas. Naughty Dog ha vuelto a demostrar por qué dispone de toda la admiración de la industria al exhibir en el nuevo gameplay de Uncharted 4: A Thief’s End un nivel de calidad gráfica totalmente impresionante. Además, las nuevas animaciones, la destrucción de los escenarios y una emocionante fase de conducción han hecho levantar al público de unos asientos que no volverían a tocar.
La conferencia terminaba de esta forma tocando con los dedos un nuevo techo técnico que pretende marcar el estudio de Sony, pero también con la sensación entre los asistentes de haber asistido a un momento histórico y que, sobre todo, tenía un dulce y agradable sabor nostálgico por la resurrección de deseos largamente esperados como son el remake de Final Fantasy VII o el desarrollo Shenmue III.