E3 2015: Impresiones Mirror’s Edge Catalyst

Antonio López · 29 diciembre, 2018
Faith vuelve a las andadas para liberarnos de la opresión de la autoridad

DICE sorprendió a propios y extraños en la pasada generación, cuando lanzó un juego de plataformas en primera persona que nos invitaba a superar su campaña principal sin utilizar armas y disfrutar de una experiencia en la que no faltaban los momentos de tensión y las persecuciones más espectaculares.

Con Mirror’s Edge Catalyst, DICE y Electronic Arts quiere recuperar y revivir una saga que parecía abocada al fracaso, aún cuando contaba con decenas de miles de seguidores que reclamaban incansables una nueva entrega. Catalyst permitirá a los fans de Faith descubrir sus orígenes y adentrarse en una historia que promete emociones fuertes. Tras esperar pacientemente y asistir a una presentación privada del título, hemos podido hincarle el diente en una demostración de 15 minutos que nos ha dejado con ganas de mucho más.

La demostración del juego comenzaba con un sencillo tutorial que nos permitía hacernos con los controles. Para no entrar en detalles sobre el argumento y evitar así destripar algunas partes del mismo, sólo diremos que tras tomar el control de Faith se cruza en nuestro camino un tipo que nos pide que le sigamos. Al acompañarlo aprendemos a movernos por el entorno y a interactuar con el mismo. Hemos podido acceder a Catalyst a través de la versión para PC del título, aunque lo hemos jugado con el mando de Xbox One. Tras completar la introducción y hacernos con los controles hemos pasado a controlar a Faith y a intentar superar tres objetivos diferentes, una simple muestra de lo que nos espera en el juego final.

El primero ha sido una especie de contrarreloj que nos invitaba a superar una serie de puntos de control a la mayor velocidad posible. Los saltos entre edificios y otras cuestiones propias del mundo del parkour se convierten en los protagonistas indiscutibles de esta nueva propuesta de la saga, que retoma la ambientación futurista y fría, con tonos blancos y azulados que sin duda gustarán a los aficionados del título original. Al igual que en el primer juego, habrá algunos entornos marcados en rojo, que serán aquellos por los que nos resultará más sencillo desplazarnos.

DICE nos ha asegurado que el juego será accesible para cualquier tipo de jugador, aunque es cierto que los más habilidosos se verá recompensados con mejores puntuaciones y con unos resultados más satisfactorios. Tras llegar al final de nuestra carrera, hemos aceptado el segundo encargo, que consistía en recoger un objeto y llevarlo del Punto A al Punto B. Lo que parecía una misión rutinaria se ha convertido en una batalla campal cuando hemos sido atacados por los enemigos, a los que hemos noqueado gracias a las habilidades para el combate de Faith.

El jugador podrá completar la aventura sin matar a ningún enemigo, aunque podremos noquearlos para hacer más sencilla nuestra misión. Además de los clásicos movimientos de combate, Faith podrá realizar espectaculares piruetas para desarrollar una especie de movimiento final que dejará a nuestros perseguidores por los suelos. El combate se antoja fluido y muy dinámico, por lo que no habrá lugar para el aburrimiento, aunque conviene recordar que Faith no es ninguna mujer indestructible, por lo que habrá que tener especial cuidado con los enemigos armados. Desde DICE nos han asegurado que siempre y cuando Faith se mantenga en movimiento, estaremos a salvo. Pararse a mirar puede ser fatal para la salud de nuestra protagonista. Tras esta segunda misión hemos ido directos a comenzar la tercera, en la que debíamos hackear un terminal de propaganda de la autoridad para hacer publicidad de los runners, el grupo rebelde al que pertenece Faith.

Estas tres misiones que hemos podido probar durante la demostración son sólo una pequeña muestra de lo que podemos esperar una vez el juego se ponga a la venta el próximo mes de febrero de 2016. Las sensaciones generales han sido buenas y parece que DICE tiene la sana intención de resucitar una marca que no consiguió muy buenas ventas, pero sí una legión de seguidores incondicionales. Aprovechar la ocasión para explicar los orígenes de la carismática Faith parece algo obligado, por lo que esperamos saber mucho más sobre este personaje, en el que se ha invertido una ingente cantidad de tiempo sólo para modelar su rostro, incluso cuando solo lo vamos a ver en contadas ocasiones.

A nivel técnico, Mirror’s Edge Catalyst resulta de lo más llamativo, con unos entornos tan detallados como sencillos, cuestión lógica si tenemos en cuenta la iconografía de la saga. Además, DICE confirmó durante la conferencia previa al inicio de este E3 que habrá completa libertad de acción, por lo que podremos afrontar el juego a nuestra manera, siguiendo así la tónica habitual de este generación, que no es otra más que los escenarios de mundo abierto. Además, según destacaron desde el estudio sueco, no habrá pantallas de carga, por lo que la experiencia que propone Catalyst será continua y sin barreras. No le perderemos la pista.

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