Para todos aquellos valientes que aguantaron hasta el final viendo la conferencia de Sony, no les será fácil olvidar el momento en el que salieron del progresivo sopor en el que se estaban introduciendo poco a poco con un inesperado y sorprendente tráiler de Mortal Kombat X. El juego desarrollado por NetherRealm mostraba su ya característica violencia extrema en las grandes pantallas que ocupaban gran parte de Los Ángeles Memorial Sports Arena, dejando al público sin aliento ante los brutales fatalities que se iban sucediendo.
Sorpresa fue el tráiler por su contenido, no por su presencia, pues el estudio ya había anunciado semanas antes el desarrollo de esta última entrega de la saga. El juego se mostraba a un nivel técnico sorprendente en consolas de nueva generación, algo que pudimos corroborar en una presentación similar pero algo más extensa que pudimos ver en el estand de Warner Bros en el Convention Center.
Pero además de las imágenes mostradas, si Mortal Kombat X levanta expectación es por la calidad que desprendió en su día su antecesor, Mortal Kombat, que recibía el mismo nombre que la primera entrega del juego. Con la vuelta de Ed Bonn y la aparición del estudio NetherRealm, la franquicia resurgió de sus cenizas y recuperó gran parte de toda la fama lograda en sus inicios, construyendo desde ese momento un entramado jugable característico que se pudo disfrutar también en Injustice: Gods Among Us.
Y este no es otro que la interacción con los escenarios y el uso que se hace de ellos en plena batalla. Por lo que se pudo ver en la presentación, volverá de nuevo a tener un peso importante, aprovechando en todo momento los elementos que caigan sobre el suelo o que simplemente estén dispuestos a lo largo y ancho de la zona de combate.
Pero evidentemente, y aunque su utilización supone uno de los aspectos principales de Mortal Kombat X, hay muchas novedades que nos obligan a dejar caer los ojos sobre el juego para averiguar que acaba por ofrecernos NetherRealms. Entre ellas está el modo historia, muy destacable también en Mortal Kombat y en Injustice: Gods Among Us y que en esta ocasión nos trasladará 25 años después de los hechos acaecidos en el primer juego, con lo que muchos de los personajes principales de la saga no estarán disponibles, dando paso a una remesa de nuevos luchadores muchos de los cuales están aún por ser desvelados.
Sin embargo, encontraremos, como no podía ser de otra manera, a los míticos Scorpion y Sub-Zero una vez más, desencadenando la ya eterna batalla del hielo contra el fuego con la sangre y las vísceras como perfectas acompañantes. Ellos serán dos de los personajes que completen el amplio elenco de 24 que estarán disponibles para ser elegidos durante el combate. Pero no son los únicos anunciados, pues ya conocemos hasta 4 luchadores nuevos más que hemos podido ver ya en acción.
Entre ellos encontramos a Cassie Cage, hija de los conocidos Johnny Cage y Sonya Blade, que fusionará el estilo de lucha característico de sus padres, descubriendo a través de sus movimientos toda la herencia genética recibida en esta particular unión. También encontraremos a Kotal Kahn, uno de los nuevos y misteriosos personajes que descubriremos en Mortal Kombat X, y que tendrá la apariencia de un poderoso guerrero azteca.
Por otro lado, hallaremos también a Ferra y Tor, una peculiar pareja que ya hemos visto en acción y que se coordinará perfectamente para lanzar poderosos golpes por parte de la mole de carne, mientras que el pequeño lacayo asestará rápidas y mortales cuchilladas. Por último tendremos a D’Vorah, una combatiente con un cuerpo y unos movimientos que recuerdan a los de un insecto, y cuya principal virtud será una rapidez totalmente endiablada.
Pero nada de esto importaría si no viniera acompañado de una jugabilidad acorde con las circunstancias. Como hemos comentado, la violencia gratuita y los litros de sangre volverán a inundar nuestra pantalla, sobre todo cuando de nuevo aparecen las animaciones y secuencias que muestran mediante rayos X las fracturas y las lesiones que los golpes producirán en los cuerpos de los luchadores.
Por supuesto, no nos podíamos olvidar de los fatalities, una seña de identidad de la franquicia y que en Mortal Kombat X vuelven con la variedad y crueldad más elevada vista hasta la fecha. La clave en este sentido aparece dado que cada estilo de lucha que emplee cada personaje irá acompañado de un movimiento final diferentes, completando una variedad en el repertorio de golpes y finalizaciones totalmente impresionante.
Este estilo de lucha aumentará la profundidad jugable de cada personaje, teniendo que emplear muchas más horas para acabar de dominar todas sus habilidades. El ejemplo que se nos fue mostrado fue el de Scorpion, con el que se podía elegir tres formas diferentes de luchar, a saber: ninjutsu, hellfire o inferno. La primera se centrará en el combate cuerpo a cuerpo con katanas, la segunda a distancia y lanzando proyectiles y la tercera haciendo uso del poder infernal.
Finalmente, una de las características más llamativas del juego y que aumentarán la inmersión es la calidad gráfica que muestra el ya exprimido motor gráfico Unreal Engine 3. Con una resolución de 1080p y a una tasa de imágenes de 60 cuadros por segundo, Mortal Kombat X desprende más detalles que nunca en la lucha, encontrando una gran diferencia con la anterior entrega de NetherRealm en los momentos más impactantes.
En definitiva, nos encontramos con uno de los candidatos más espectaculares dentro del género de lucha para los próximos años, y que además viene avalado por un estudio que ha mostrado en diversas ocasiones de lo que es capaz de hacer con una saga tan mítica como Mortal Kombat.