Bloodstained: Ritual of the Night, impresiones

Antonio López · 29 diciembre, 2018
Probamos el nuevo metroidvania de Koji Igarashi

Bloodstained: Ritual of the Night es uno de esos títulos que arrasó en Kickstarter tras poner en marcha su campaña de financiación colectiva. Koji Igarashi, nombre importante para Konami y la franquicia Castlevania durante años, es el principal impulsor de un proyecto que busca revitalizar el género metroidvania con una apuesta de corte clásico en su planteamiento jugable, capaz de recaudar más de cinco millones y medio de dólares hasta el momento en la citada plataforma de crowdfunding.

La propuesta de Igarashi estuvo presente en el pasado E3 2017, donde tuvimos ocasión de probarlo en las sala de reuniones de 505 Games, compañía que se encargará de su distribución internacional. Aunque aún falta tiempo para que lo tengamos en nuestras manos, pudimos hincarle el diente durante unos 20 minutos, descubriendo un título de plataformas 2.5D cargado de tesoros y secretos, que tiene el ambicioso objetivo de convertirse en el sucesor espiritual de Castlevania: Symphony of the Night.

Bloodstained es un RPG de desplazamiento lateral, según sus responsables, que tiene lugar en la Inglaterra del siglo XVII, una era en la que la vida de las personas cambió drásticamente debido a la Revolución Industrial. Los jugadores se ponen en la piel de Miriam, una huérfana marcada por la maldición demoniaca de un alquimista, que ve como su cuerpo se cristaliza. A medida que la maldición avanza, Miriam entra en un coma misterioso y se despierta diez años más tarde, un castillo aparece y el infierno resucita.

Con toda esta trama como excusa argumental nos encontramos ante un escenario enorme, repleto de habitaciones y lugares por descubrir. El backtracking forma parte incuestionable del planteamiento jugable, así como un sistema de combate directo y accesible en su control, aunque más profundo de lo que pueda parecer a simple vista. Podremos mejorar el equipo de Miriam, a la vez que nos enfrentamos contra enemigos de todo tipo y jefes finales que utilizan su propia estrategia de ataque.

Todo con la sana intención de recuperar un género muy querido por los jugadores, aunque siempre es conveniente saber gestionar las expectativas ante un título financiado mediante Kickstarter. No sería el primer desamor con la plataforma de financiación colectiva, que nos ha dejado algún que otro ejemplo agridulce en el pasado. Sea como fuere, habrá que esperar hasta 2018 para saber qué tipo de juego resulta ser Bloodstained: Ritual of the Night, puesto que no será hasta el primer semestre del año que viene cuando tenga lugar su puesta de largo.

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