Con el desmantelamiento de la editora THQ muchos fueron los que se interesaron por una serie de productos de contrastada fama y largo recorrido. Algunos de ellos eran apuestas más arriesgadas que otras, pero todos contaban con la dificultad de ser obras inacabadas amenazadas por la inestabilidad que supone cambiar de dirección cuando el rumbo está marcado. Sin embargo, en el momento que a la puja se unen distribuidoras como 2K Games, uno sabe que la calidad estará como objetivo principal, y acabar algo empezado no será la única opción.
Y es de esta manera como WWE 2K14 surge como una franquicia que lleva años dando grandes dosis de diversión a aficionados, pero ahora en el barco de una empresa que sabe muy bien hacia dónde quiere dirigirlo. Con un título híbrido de dirección y a caballo entre dos proyectos, WWE 2K14 destila cosas nuevas y otras no tantas en este primer contacto. La lucha libre más colorida y espectacular vuelve un año más de la mano de 2K Games.
Con el siempre imponente The Rock poniendo imagen a esta nueva andadura de la franquicia y a su cambio nominativo, WWE 2K14 introduce varias mejoras que no pasarán desapercibidas para todos los fans del presing catch. La primera de ellas y más llamativa es la inclusión de un modo de juego que ha visto la luz en franquicias deportivas similares, incluso dentro de la propia 2K Games. Hablamos de una modalidad de juego que nos invitará a rememorar los mejores momentos de WrestleMania de los últimos 30 años, asistiendo a batallas épicas que cambiaron de alguna manera el rumbo de este gran espectáculo.
De esta forma, la inclusión de El Último Guerrero o Hulk Hogan anunciadas durante estos meses cobra un sentido mucho mayor, pues durante este modo de juego ellos, junto a otros luchadores como lo puedan ser Andre el Gigante o Undertaker, se enzarzarán en una de tantas peleas históricas que muchos recordamos y guardamos en nuestra retina cuando, años atrás, estas reyertas nos mantenían en vilo pegados al televisor.
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Pero todo no se reduce a la posibilidad de realizar los 45 combates legendarios perfectamente preparados para ser revividos, sino que todo el contexto se ha dispuesto adecuadamente para que la imagen de los combates sea lo más fiel posible a cómo se produjo en su día. Nos encontramos así pues con filtros de color vintage, sonidos de ambiente más clásicos, entradas al ring añejas… Una gran cantidad de elementos que nos trasladan a otra época y a otro momento de la competición, donde los luchadores realmente se hacían a sí mismos y su faceta dramática elevó al presing catch a la posición que goza actualmente.
Aunque, al final, lo importante sigue siendo la interacción, las posibilidades de asestar al rival los golpes más espectaculares y contundentes que den con su piel en las lonas del ring. En este punto, volveremos a ver muchos de los movimientos y animaciones de siempre, pero con ligeras mejoras que acaban haciendo mucho más sólido el sistema de combate. Inherente al resto de modos y de situaciones, pero que en “30 años de WrestleMania” invita a realizar ciertas acciones para emular totalmente aquellos combates míticos de los que hablamos.
Se trata de listas de acciones que nos darán la oportunidad de emular los combates exactamente como se produjeron, motivando al usuarios a cumplir todos y cada uno de los retos para tener la satisfacción –y las correspondientes recompensas jugables- de haber sido partícipe con total fidelidad que uno de esos momentos inolvidables.
Sin embargo, más allá de todo esto, continuamos teniendo al final una oportunidad única de luchar cómo y cuándo queramos en todo tipos de combates de ayer y de hoy. Las mecánicas de lucha, dejando de lado los retos del modo clásico, se encuentran algo más desarrolladas, evidenciando un trabajo por la búsqueda de mayores posibilidades para que las batallas gocen de variedad total y absoluta.
De esta manera, a la ya más que vista y divertidísima interacción con los escenarios, WWE 2K14 aporta una mayor longitud en las combinaciones de puñetazos y patadas asestadas por los luchadores, provocando auténticas y espectaculares series de golpes. Además, ciertos movimientos irán acompañados de secuencias QTE, ya sea por llevar a cabo un movimiento extremadamente espectacular o por repetir hasta el KO contundentes y continuas arremetidas.
Más de 30 luchadores de ayer y de hoy que veremos bregar con todos esos elementos ya conocidos y en los modos de juego más típicos y espectaculares. Personajes, además, que contarán con la cualidad de exhibir comportamientos característicos, pero también golpes y tretas muy típicas en cada una de sus exhibiciones. ¿Qué sería de John Cena sin su “You can’t see me”, el Rey Misterio sin su “Hurricanrana” o The Rock sin su implacable “Sharpshooter”?
Si bien es cierto, a pesar de estas pequeñas mejoras en el ámbito interactivo y de todas las posibilidades descritas, no parece que WWE 2K14 se vaya a desmarcar demasiado de la línea seguida por Yuke’s en años anteriores. Ciertas animaciones, pese a haberse visto ampliadas, necesitan la frescura de un trabajo realizado de manera específica en ser renovadas. Algo que estamos seguros que ocurrirá cuando 2K Games tenga la oportunidad de iniciar y terminar el proyecto por sí misma.
Mientras tanto, nos encontramos con un producto que parece beber de lo de siempre, pero con mejoras necesarias para motivar su adquisición y volver a provocar luchas contundentes a lo largo del ring. Un montón de personajes con movimientos espectaculares, la personalización de siempre, la interacción total con el entorno y un nuevo modo de juego creado de manera muy acertada son las principales bazas para que WWE 2K14 empiece su andadura a bordo de 2K Games con paso firme, seguro, pero con buena perspectiva de futuro.