Si intentamos hacer un balance entre todos los jugadores del mundo, pocos serán aquellos que no conozcan la saga de Final Fantasy, que tiene el honor de ser una de las que más fans aglomera alrededor del globo.
Lo que si sonará más extraño a muchos de ellos es alguna entrega del juego que se desarrolle en un mundo eterno (teóricamente) y su principal característica es que sea un juego en red con cuotas de pago. Eso es Final Fantasy XIV, que llegará en breve a nuestra PS3 y que ya lo ha hecho para la plataforma de PC.
La única referencia que podemos tomar es FFXI, al que pocos o muy pocos han tenido la opción de jugar ya que su lanzamiento se produjo en PS2 y PC que por aquel entonces se llevó muy buenas notas, pero que muchos no pudieron disfrutar ya que lamentablemente la plataforma online de PS2 no era lo que es hoy día la de PS3.
Final Fantasy XIV se presenta como el juego que intenta afianzar esta apuesta, ya que con Playstation Network ya implantada de sobra y todas las facilidades que se dan hoy día en PC (y las que había antes claro) pues se puede hacer un buen negocio en cuanto a jugadores para ambas versiones.
Básicamente Square-Enix nos presenta un juego clásico de Final Fantasy, con una historia lineal (puede que algo más abierta, con muchas misiones secundarias o algunas que podamos hacer a nuestra manera) pero en resumen la historia sigue siendo lineal porque parece que en juegos que se abre demasiado se pierde intensidad con el paso del mismo.
Nos situamos en el mundo imaginario de Eoreza. Aquí, se vive un tiempo algo expentante, ya que tiempo atrás hubo una guerra entre una de las mayores y poderosas ciudades-estado (Ala Mihgo) y un extraño país venido del este (Garlean Empire) con el resultado de victoria para el segundo y la situación de arrasado para el primero. Con ello, los países más cercanos a Ala Mihgo, decidieron crear un Imperio para poder repeler e impedir ataques extranjeros futuros, con lo que hay que crear un gran ejército.
Pero el Imperio nunca se crea, y todos esos soldados que se han formado para la causa quedan sin empleo y sin nada que hacer, por lo que se proponen hacer una serie de trabajos, o guilds, y se pasan a llamar aventureros.
Nuestro personaje es uno de ellos, al que podremos crear a nuestro antojo con un completísimo editor. El estilo que sigue tanto el personaje como el mundo en sí nos suena mucho, ya que mezcla aspectos de la ciencia ficción como del medievo, parecido a FFIX. Eorzea no sólo es un mundo nuevo para esta aventura, sino que los programadores quieren que sea casi un mundo real, al que incluso han implantado una religión (no es demasiado novedoso que se incluya una religión en Final Fantasy, pero el detalle y todo lo que rodea a ella puede dar mucho juego).
Pero es que además, el mundo de Eorzea, muestra unos parajes naturales poco imaginables con ese nivel de detalle en un juego de este estilo, con muchas criaturas, muchas de ellas enormes y difíciles de vencer, y algunas de ellas nos ayudarán a hacernos la misión más fácil.
En cuanto a los niveles de experiencia, no es el típico juego en el que tengamos que ir subiendo niveles, ya Final Fantasy XIII se desbamcó de ese estilo, y en la nueva entrega se va a llevar un poco más lejos. Podemos elegir clases, como en todos los juegos de rol online, pero aquí podemos elegir qué clase usar en cada momento, ya que cada arma lleva una relacionada. A medida que cambiemos de arma, potenciaremos diferentes habilidades relacionadas con esta arma, y podemos usar varias clases, lo que no nos obliga a continuar la aventura si nos hemos equivocado de opción al comienzo.
Como último detalle que debe ser nombrado, la banda sonora corre a cargo del gran Nobuo Uematsu, por lo que tenemos espectáculo sonoro asegurado. Final Fantasy XIV llegará próximamente para PS3, no queda mucho.