Cuando se anunció que Bungie se pasaba al desarrollo multiplataforma, todos los fans del género de de los disparos en primera persona con componentes online se mantuvieron pendientes de Destiny, su nuevo proyecto. La sombra de Halo era alargada y Bungie puso toda su técnica en un juego que se convirtió en un superventas instantáneo. Destiny ha ido depurando y añadiendo mecánicas de juego a lo largo del año que lleva a la venta, ofreciendo una experiencia que han disfrutado y siguen disfrutando miles de personas.
A medida que avanzábamos en la historia, se nos iban ofreciendo atisbos de algunas de las cosas a las que podríamos hacer frente más adelante: se nos hablaba sobre la Cámara de Cristal, recogíamos la Espada de Crota, nos enfrentamos a un Arconte huido del Presidio de los Ancianos… Cosas que, en algunos casos, venían incluidas en el propio juego, mientras que otras estarían disponibles a través de contenidos descargables más adelante, como sucede con Oryx, que llegará al juego a través de la próxima expansión del juego: El Rey de los Poseídos.
El Rey de los Poseídos nos hará viajar a Phobos, una de las lunas de Marte; un planeta que ya conocemos perfectamente. Marte está bajo el control de los Cabal, aunque está claro que los Vex tienen algo que decir. Sin embargo, en el satélite tendremos que llevar a cabo una batalla a gran escala contra algo diferente. Un antiguo señor de la Colmena, venerado como un dios dentro de la mitología de Destiny, acompañado de su terrorífico ejército, los Poseídos. Oryx entra en escena y evidentemente, quiere venganza: no en vano, hemos matado a Crota, su hijo.
Este nuevo enemigo es cruel, malvado y poderoso. Nos enfrentamos a un ser que ha cogido a nuestros antiguos enemigos y los ha llevado a otra dimensión. Los Cabal, Vex y miembros de la Colmena bajo su mando han vuelto como Poseídos, lo que les da nuevas formas y poderes. ¿Recordáis a los Psiónicos Cabal, por ejemplo? Ahora podrán dividirse para multiplicar el peligro que representan.
Algo que los jugadores de Destiny han pedido durante bastante tiempo son nuevos lugares que visitar. Un nuevo mundo que explorar, en el que descubrir formas de hacer frente a las amenazas que estos territorios ignotos nos planteen. Pese a que inicialmente nuestra particular guerra contra Oryx dará comienzo en Phobos, el auténtico lugar en el que se desarrolla la historia será en el Dreadnought, la nave en la que el monstruo ha venido a por nosotros. Esta nave está estacionada cerca de Saturno, que es el límite al que se pueden aventurar los pocos humanos que quedan antes de entrar en la zona bajo el control de la Oscuridad. Así que es bastante posible que Oryx no sea el único peligro al que tengamos que hacer frente en esta expansión y es que, si lo pensáis, aún no sabemos qué es lo que se esconde realmente ahí fuera.
El Dreadnought funciona como la luna de la Tierra, Venus, Marte o el Cosmódromo: es un lugar grande, que cuenta con varias zonas a través de las que viajaremos y en las que, por supuesto, habrá otros Guardianes haciendo lo propio. Nuevas misiones nos esperan en esta zona, así como nuevas patrullas que llevar a cabo.
Poner nuevos enemigos y una nueva zona está bien, pero hay que hacer algo más. Amén de más niveles de luz y, por supuesto, nuevo equipamiento, El Rey de los Poseídos incluye dos cosas que los jugadores de Destiny han pedido durante bastante tiempo.
La primera de estas dos cosas es la esperada tercera subclase para nuestros Guardianes, que añade el elemento al que aún no tenían acceso.
Los Titanes, podían hasta ahora llevar a cabo mortíferos asaltos usando el elemento Arco (electricidad) o usar el Vacío para proteger a los que estuvieran cerca de ellos. La nueva subclase permite acceder al elemento Solar, con el que convocar un poderoso martillo cargado del poder de las estrellas con el que abrasar a los enemigos, con la subclase Quiebrasoles.
Si habéis escogido la senda del Cazador, hasta ahora habéis podido usar el Arco para imbuir vuestros cuchillos de electricidad, o del elemento Solar para convertiros en el pistolero definitivo. Ahora, con acceso al poder del Vacío gracias al Acechatinieblas, haréis gala del nombre de vuestra clase para usar un arco elemental con el que dar caza a las peores criaturas del universo.
Finalmente, los hechiceros podían usar el elemento Solar o el Vacío para hacer frente a los peligros de la Oscuridad, pero ahora tendrán acceso a un nuevo y atractivo poder: el Arco fluirá desde sus manos con la subclase Invocatormentas, friendo literalmente a aquellos inconscientes que se atrevan a cruzarse en nuestro camino.
El segundo añadido largamente esperado es una nueva Incursión que se suma a las ya existentes. Bungie no ha querido ofrecer por el momento información concreta con respecto a esta misión. Es más, aún no han confirmado siquiera de forma oficial que sea Oryx el auténtico enemigo de ella, por lo que quizás podríamos llevarnos alguna sorpresa. Además, en el Crisol entrarán nuevos modos de juego, entre los que destaca uno en el que se nos pide recoger «el Chispazo», un artefacto que tendremos que recoger y conseguir lanzar contra la base del enemigo, o bien evitar que ellos hagan lo propio.
El Rey de los Poseídos se plantea como una enorme expansión. Bungie ha afirmado que se trata de algo colosal. Se añaden nuevas misiones, tanto de historia como de patrulla, asaltos, una Incursión… Se amplían nuestras posibilidades con una nueva subclase, se nos dará acceso a nuevo equipo y, quizás algo que muchos esperasen, se avanza en la historia dentro del universo de Destiny, aunque aún no se ha especificado hasta qué punto.
Se trata sin duda de un conjunto de novedades realmente atractivo y que promete mejorar aún más una experiencia de juego que ha dado a muchos cientos de horas de diversión. Sin embargo, se plantea una gran pega, o más bien dos que se relacionan de forma directa. El Rey de los Poseídos no se encuentra incluido dentro del Pase de Expansión y su precio no es bajo.
Unido al hecho de que aún quedan bastantes cosas que saber con respecto a ella, no queda más remedio que esperar hasta ver si el nivel de la expansión está a la altura de su coste: Bungie y Activision han hecho una apuesta arriesgada con El Rey de los Poseídos. Y son muchos los que están dispuestos a aceptar la apuesta. Aunque por ahora, habrá que esperar hasta el próximo 15 de septiembre, fecha oficial de lanzamiento de la expansión, para poder comprobar en qué termina esto.