Tenía que cambiar, tenia que volver a ilusionarnos, y tenía que ser algo que se sintiera verdaderamente fresco y remodelado de pies a cabeza tras un agotamiento que ha durado demasiados años y una pausa imprescindible. Ubisoft da un nuevo reinicio a su saga más exitosa con un Assassin’s Creed Origins que puede parecer más de lo mismo con skin egipcia y faraónica, pero que mando en mano, ahora que lo hemos jugado tranquilamente en el E3 2017, está realmente reinventado y actualizado, evolucionando aspectos muy necesarios como su sistema de combate o de reparto de tareas, misiones y exploración. En el video impresiones de más abajo tenéis más en profundidad lo que nos parece…
Sí, todos sabemos que los juegos de From Software como Dark Souls o Bloodborne han sido influyentes dentro del rol de acción, con otros exponentes calcados como Nioh o The Surge, y el diseñador de Assassin’s Creed Origins que ha estado enseñándonos a mis compañeros y a mí cómo jugarlo y sus novedades no se corta en reconocer que obviamente los juegos de Miyazaki también les han servido para encontrar un mejor camino por donde llevar la acción cuerpo a cuerpo de este Egipto espectacular. Y es que si, Bayek, el Assassin protagonista, combate rudo y táctico, con el escudo en alto, teniendo que esquivar para asestar, apuntando bien al objetivo exacto que quiere, y dejando la antigua fórmula del machacabotones y los espadazos sin sentido en algo totalmente del pasado.
Eso sí, este nuevo combate no perdona, y a veces el ángulo de cámara tampoco, dejando vendido al protagonista ante golpes que no se pueden ver venir y quitan mucha vida injustamente. Esto se refuerza con una IA bastante agresiva y que ya parece no turnarse ni esperar a los demás, algo muy criticado en anteriores juegos de la saga. Nos ha encantado el combate, pero también el nuevo sistema de crafting y loot, porque ahora llegan las piezas comunes, raras y legendarias a Assassin’s Creed, como las hay en tantos otros juegos y que esperemos que no sean motivo de colar opción a micropagos para abrir cajas de botín con dinero real. Decía el diseñador que no tiene noticias de que vaya a haber posibilidad de microtransacciones. Pero a saber…
La misión jugada, una principal, nos lleva por un sector del mapa minúsculo en comparación con el vastísimo terreno que tendremos disponible, con regiones bien diferenciadas y que hasta cambian de enemigos, en el caso de la guarnición romana. Comentaba con mis compañeros que nos hubiera gustado que este primer vistazo fuera más bien a Alejandría, al Valle de los Reyes, a la zona de los principales templos a orillas del Nilo, o al complejo de Keops. Pero lo que tenemos es una aldea rural, en un conjunto de misiones de aproximadamente la octava o décima hora de juego, que -y esto nos encanta- no llenan el mapa de iconos como hasta ahora, sino que el jugador debe ir explorando y autogestionándose dónde pone indicadores e investiga para hablar con otros y recibir encargos y tareas que le permitan hacerse con más materias primas con las que mejorar arco, flechas, ropajes de armadura, visión del águila rastreadora…
La ambientación sobrecoge y se siente muy viva, aunque es cierto que gráficamente quizá podría dar un poco más de sí y no dista tanto de lo que ya vimos en Syndicate, quitando ahora todas las nieblas, eso sí, y dibujando unos horizontes formidables que con el catalejo quedan al descubierto sin fisuras. El parkour y el sigilo repiten, sí se sienten más tradicionales y como en las últimas entregas de la serie. Y los bugs, cruzamos los dedos para que el juego final salga tan pulido y óptimo como Syndicate, pero hay que decir que en esta versión alpha nos hemos encontrado con un hipopótamo encima de una barca que ha puesto nervioso a medio staff de los que estaban enseñándonos qué puntos ver de la demo.
Quedan poco más de cuatro meses para conocer, el próximo octubre, cómo se formó La Hermandad y a los primeros Assassins de toda esta historia. No hay detalles sobre la conexión con los otros juegos, ni cómo será la Abstergo de este Origins, pero son bastantes los indicios que nos hacen sentir que estamos ante algo grande y varios los motivos claros para que hablemos de nuevo reinicio para la saga.
El hype
- El Egipto faraónico en conflicto, a punto de ser tomado por los romanos
- Mapa mastodóntico y con regiones muy diferenciadas
- Muchísimos menos puntos de interacción en el mapa y exploración más importante
- Por fin vamos a saber cómo se formó La Hermandad
- El nuevo sistema de combate más cercano a un Dark Souls que a lo anterior
- IA prometedora y combates de riesgo donde no es díficil caer
- Crafting extremo, con grandes inventarios y recursos para mejorar armas y equipo
- Siempre que no sea razón para colar micropagos, el sistema de loot y rareza es bienvenido, encaja y lo hace adictivo
- La arena de combates, oleadas y jefes
Las dudas
- Problemas con la cámara en espacios cerrados, con algún daño recibido que se siente injusto
- Es una alpha, pero hemos visto algún bug
- Gráficamente no deja demasiado atrás lo visto en Syndicate