Los desarrolladores de videojuegos a veces saben lo que la comunidad quiere, y esto es el fiel reflejo de lo que pasó con Wreckfest, videojuego que fue lanzado hace ya más de 1 año en Steam y que ahora se estrena en PS4.
El juego fue desarrollado por Bugbear, un estudio conocido por habernos traído FlatOut y FlatOut 2. Este proyecto lo que ofrece es una experiencia desenfadada de conducción, mezclando dos estilos que incluso hasta los más escépticos podrán disfrutar: eventos de destrucción y carreras tradicionales.
Conducción extrema y temeraria
En pocas palabras, Wreckfest es un videojuego de conducción arcade que presenta un control muy pulido, permitiéndole al usuario seleccionar entre 4 niveles de dificultad diferentes: fácil, normal, difícil y muy difícil.
De esta manera, aunque la conducción en las dificultades más avanzadas no es demasiado exigente, la experiencia de juego puede ser más o menos complicada. Según el grado de dificultad seleccionado, Wreckfest activa o desactiva ayudas como el cambio automático, el control de tracción o la asistencia de frenado.
Viendo como está planteado el juego, y luego de haberlo jugado por más de 4 horas, podemos decir que el título se disfruta de forma perfecta con el mando, pues no hace falta ningún tipo de periférico adicional para poder realizar las maniobras necesarias para esquivar las colisiones, o bien, destrozar a los demás autos que compiten contra nosotros.
Tampoco podemos dejar afuera de este análisis el avanzado sistema de destrucción que tiene Wreckfest para PS4. El mismo consiste en que los desperfectos ocasionados por los choques se reflejen con enorme precisión visual. Una vez que se colisiona contra otro auto, o bien contra las paredes de los circuitos, no solo se perderán piezas, sino que además el chasis se irá abollando hasta quedar totalmente dañado.
La tecnología utilizada en Wreckfest supone un increíble avance con respecto a la mayoría de los títulos de conducción, pues demuestra la enorme potencia que aún poseen las consolas de esta generación (PS4 y Xbox One, claro está).
Dos estilos de competición muy diferentes
Este “Derby Demolition” cuenta con dos tipos de disciplinas para hasta 24 jugadores: destrucción y carrera. En las carreras el objetivo, como en la mayoría de estos juegos, es llegar primero, disputando pruebas sin ningún tipo de reglamentación.
O sea, los jugadores pueden sacarse de la pista, chocarse entre sí y, en general, lo que se les ocurra hacer. Al no haber reglas, no hay ningún tipo de penalización. Eso sí, ir en sentido contrario está totalmente prohibido.
Por otro lado, en la variante de destrucción, el objetivo es eliminar a la mayor cantidad de rivales y sobrevivir. Este modo es extremadamente divertido, pues nos permite exprimir al máximo la jugabilidad.
Puede que este modo suene simple, pero desde ya te adelantamos que no lo es, pues es extremadamente importante saber cuándo chocar, en qué parte del auto del rival chocar y cuándo escapar de una colisión.
Cabe destacar que estas variantes pueden jugarse de forma offline u online. Todo el contenido que se ofrece dentro de Wreckfest puede jugarse con amigos, en partidas privadas, partidas abiertas y hasta dentro de un modo campaña que permite obtener mejoras y desbloquear vehículos para luego utilizarlos de forma online.
La personalización está presente
Si bien Wreckfest para PS4 no cuenta con licencias oficiales para sus vehículos, el juego dispone de un interesante catálogo de coches asiáticos, europeos y americanos que cualquier amante de los autos podrá reconocer al instante.
Según la procedencia del vehículo, variará su comportamiento, viéndose más afectadas estadísticas como velocidad máxima, aceleración, resistencia, manejo y fuerza.
En otras palabras, si se elige un auto rápido y pequeño, la resistencia del mismo será prácticamente nula. Algo totalmente distinto ocurre con los autos grandes y pesados, estos se mueven más lentos, pero tienen muchísima más resistencia.
Todos los coches disponibles en Wreckfest son personalizables, aunque no tanto como quisiéramos. Solo se le puede personalizar el color, las pegatinas, y algún que otro elemento que nos permite diferenciarnos de los demás automóviles. Esto último es bastante importante, pues hay carreras o eventos online en donde todos los jugadores eligen el mismo auto.
Conclusión
Wreckfest es un juego de conducción que ha logrado traernos algo nuevo y fresco dentro de un género que ya, de por sí, está bastante gastado. Si buscas un título que te permita competir, destrozar y correr carreras sin importante demasiado la simulación o las reglas, pues deberías darle una oportunidad a este título que llegó a PS4.