Los títulos de carreras estilo Karts forman parte de un sector selecto de los videojuegos que, a pesar del paso de los años, mantienen su fórmula intacta. De esta manera, la desarrolladora Artefacts Studios nos trajo Garfield Kart: Furious Racing, título lanzado para todas las plataformas de videojuegos de esta generación.
Este título, que viene a ser una secuela de Garfield Kart (desarrollado también por Artefacts Studios hace algunos años), no es un juego enfocado en la innovación, ya que respeta todos y cada uno de los componentes clásicos del género: carreras de 8 competidores, circuitos alocados e ítems con efectos especiales que permiten tener ventajas durante la carrera. Dicho esto, llega el momento de ver si este título (obviamente inspirado y enfocado en parecerse a un Mario Kart) es capaz de igualar los estándares establecidos por los principales exponentes del género.
Un juego de Kart en todos los sentidos… ¡Pero con Garfield!
Garfield Kart: Furious Racing es un juego que, desde el principio, deja claras sus raíces y ambiciones, y es que nos presenta la posibilidad de participar en carreras de kart locas y divertidas a través de un variado número de modos de juego. Para ello, nos presenta un roster inicial de 8 personajes franquicia del universo de Garfield, el gato come lasaña más famoso del mundo.
Y es precisamente en este punto en el que encontramos la mayor virtud del juego, ya que nos ofrece la oportunidad de competir en el Modo Grand Prix (el cual se compone de 4 copas distintas), el modo Carrera Única y el siempre divertido Modo Contrarreloj. A esto se le suman dos factores importantes que enriquecen un poco más las necesidades de los jugadores de este tipo de títulos.
El primero de ellos es el hecho de contar con los típicos niveles de dificultad 50 cc, 100 cc y 150 cc. Algo que nos invita a perfeccionar nuestro control del volante para desbloquear ítems de personalización y otros premios que serán proporcionales al nivel de dificultad en el que elijamos competir.
El segundo es el nivel de personalización que ofrece el título, pues además de poder escoger y desbloquear entre un interesante catálogo de karts, también podemos personalizar en gran medida la apariencia de los pilotos (desde sombreros hasta gafas de sol). Esta libertad a la hora de prepararnos para una carrera o competición, genera una sensación agradable que bien se sabe valorar en un título de este tipo.
Garfield solo y acompañado
Hemos comentado que Garfield Kart: Furious Racing es un juego que respeta los cánones del género en todos sus sentidos, y por eso no han dejado de lado el siempre bien valorado Modo Multijugador. En este apartado nos topamos con la posibilidad de disputar carreras en pantalla dividida con hasta cuatro jugadores. Puede que sea un modo de juego que poco a poco va quedando en el olvido, sin embargo, es de valorar que en un juego de carreras de este tipo siga presente esta opción.
Del mismo modo, la adición de un Modo Online en el juego es un aspecto bueno que probablemente nos ayude a enriquecer y extender nuestra experiencia con este título, por lo que vale la pena valorar su presencia.
Sensación agridulce al volante
A pesar del nivel de profundidad que ofrece Garfield Kart: Furious Racing a nivel de personalización y modos de juego, lo cierto es que uno de los grandes defectos de los que padece este juego es de la escueta creatividad y pasión que han demostrado los de Artefacts Studios al diseñar los circuitos que componen el videojuego. En un juego de Karts de este tipo esperamos variedad de pistas en cuanto a terreno, obstáculos, colores y trayectos.
En este sentido, al sumergirnos en las carreras, se nos genera cierta sensación agridulce, ya que se hace evidente la monotonía y falta de cariño hacia las mismas. Desde texturas deficientes hasta trayectos sosos y poco osados, todo conjuga para minimizar la sensación de diversión que genera avanzar a través de los circuitos.
Unido a todo esto, no podemos pasar por alto el hecho de que los ítems que podemos usar en medio de las carreras, los cuales podremos adquirir por medio de caramelos, nos resultan poco interesantes y para nada atrevidos.
El tercer gran escollo que encontramos en este juego de carreras es su deficiente jugabilidad al momento de controlar los autos. En este sentido tenemos que tomar en cuenta que una de las claves del éxito en los juegos de este tipo reside en la física y el movimiento de los vehículos.
Esto último es algo que no ha sido muy tomado en cuenta por los desarrolladores de Garfield Kart: Furious Racing, y es que al usar turbos, derrapar o tomar curvas, se hace más que evidente que la física de los vehículos no es ni de cerca parecida a lo que debería ser.
Conclusiones acerca de Garfield Kart: Furious Racing
Garfield Kart: Furious Racing no se acerca ni pizca a los mejores exponentes de este tipo de videojuegos, como lo son Mario Kart 8 Deluxe y Crash Team Racing Nitro Fueled. A pesar de que sus componentes básicos cumplen con los requisitos, su jugabilidad y falta de creatividad en cuanto a ítems y circuitos no llegan a ofrecer lo que esperaríamos de un videojuego de este tipo.
Por eso, si tenemos que recomendar un juego de carreras divertidas estilo Kart, Garfield Kart: Furious Racing no es el primer juego que se nos viene a la mente. No obstante, puede ser un título aceptable para niños y jugadores casuales que no necesitan mucho para divertirse. Además, aunque sean pocos en la actualidad, los fans de Garfield sabrán reírse y disfrutar de ver a los personajes de este universo en un videojuego de esta época.