La saga WipEout ha sido siempre sinónimo de PlayStation. La velocidad y la música que abanderan una forma de jugar que se hace única no han faltado nunca a la cita con cada nuevo hardware de la compañía de origen japonés. Y por supuesto, PlayStation 4 no iba a ser menos. Ya sin el desaparecido Studio Liverpool haciendo todo el trabajo, pero con la buena mano XDev detrás, me encuentro con una recopilación que aúna WipEout HD (2008), Fury (2009) y 2048 (2012) en este WipEout Omega Collection. Pero, como voy a comentar ahora mismo, no se trata únicamente de una remasterización al uso, sino de una adaptación a los tiempos que corren de un conjunto de entregas que ya en su día dejaron con un buen sabor de boca a los fans de estas trepidantes carreras.
El reto era mayúsculo por la diferente procedencia de los juegos que componen esta recopilación. Ya WipEout HD, aparecido en PlayStation 3, se nutría de Pure (2005) y Pulse (2007), que vieron la luz en PSP. Mientras que WipEout 2048 hacía lo propio en la sucesora de aquella portátil, PS Vita. Una amalgama de juegos que han ido fusionándose con el paso del tiempo y dando el salto entre plataformas hasta llegar a PS4, donde se ha llevado a cabo un concienzudo trabajo de maquillaje para conseguir transmitir una sensación de uniformidad que se expande a todas las facetas del juego.
Eso se puede apreciar simplemente a la hora de entrar en el modo campaña y ver las tres disponibles, para cuyo disfrute no hace falta pasar por un selector de juegos previo como, por ejemplo, se ha podido ver en remasterizaciones como Kingdom Hearts 1.5 + 2.5 HD (justificadas, en este caso). Cada modo aventura en este sentido mantiene, eso sí, su propias características, como es el caso de los modos de juego que pertenecen a cada entrega y que no necesariamente se encuentran en todas en esta recopilación.
Y es que WipEout Omega Collection casi se siente una nueva entrega de la saga por este homogeneidad visual y de estructura del título. Un conjunto de elementos jugables, estéticos y sonoros que casan perfectamente dentro de un entramado de opciones extremadamente amplio. Hasta 46 naves, con 26 circuitos diferentes y 9 modos de juegos que hacen de Omega Collection el título más completo de la franquicia, así como también la experiencia definitiva para todos los amantes de la velocidad.
Porque WipEout siempre ha sido una saga difícil, y eso se respeta al máximo en esta recopilación. Las primeras partidas que uno pueda echar en los diferentes campeonatos nada tendrán que ver con las posteriores, que hacen sudar de lo lindo hasta al más hábil para sacar la máxima condecoración de la prueba. Y se construye para empezar con una inteligencia artificial de verdad, que busca ganar en cada carrera y que no tendrá ningún tipo de reparo en buscar los atajos o vías óptimas que cada circuito ofrece para conseguir algo de ventaja. Pero que también logrará optimizar todos los “pick ups” para aprovechar todas las ventajas que la pista ofrezca y marcar así la diferencia momento.
Tal vez, el modo Zona es el que mejor resume todo esto que trato de explicar. Con una tonalidad de colores estridente que podría llegar a provocar un ataque epiléptico a más de uno, la velocidad va aumentando constantemente hasta que que la propia nave llega a su límite o se superan todas las secciones. Temple, perseverancia y buenas dosis de paciencia que acaban siendo ingredientes necesarios para poder entender y disfrutar de WipEout en su máximo expresión. Exigencias que, por otra parte, siguen haciendo de esta franquicia única -sin olvidar F-Zero- en su especie.
Los sustitutos de Studio Liverpool tampoco han querido dejar pasar la oportunidad de introducir un online para 8 jugadores que cumpla con las exigencias de hoy en día en este tipo de juegos en la vertiente competitiva. Si ya la inteligencia artificial hace un uso realmente bueno de las armas disponibles y otras herramientas menos ofensivas, poder competir con otros jugadores alrededor de todo el mundo supone el forma perfecta de transformar toda la acción en algo mucho más tenso y emocionante. Pero si hay algo que me ha gustado en este sentido, es la inclusión del multijugador a pantalla dividida, pues supone un guiño muy valorable para todos aquellos que, como yo, aprecian la diversión de poder competir de tú a tú con una persona sentada a escasos centímetros de ti.
Y, por supuesto, en WipEout Omega Collection uno no se puede olvidar de comentar la música, que es el alma de un juego cuyos vehículos se mueven al son de la energía que transmiten todas sus canciones. Esta franquicia no sería lo que es si mientras corres por pistas futuristas suenan de fondo temas de The Chemical Brothers, The Prodigy o Swedish House Mafia.