Análisis Dragon Ball Raging Blast

ANÁLISIS DRAGON BALL RAGING BLAST

FICHA TÉCNICA

• Nombre del juego: Dragon Ball Raging Blast
• Desarrolladora: Namco Bandai
• Distribuidora: Namco Bandai Partners
• Género: Lucha
• Temática: Anime japonés
• Número de jugadores: 1-16 jugadores (offline) / 2-8 jugadores (online)
• Manual: Español
• Textos: Español
• Voces: Inglés/japonés
• Fecha de salida: 13 de noviembre del 2009
• Pegi: +12
• Resolución: 720p
• Contenido descargable: Sí.
• Trofeos: 50 trofeos (36 de bronce,11 de plata, 2 de oro y 1 de platino)
• Precio recomendado: 64,95€
• Otras plataformas disponibles: Xbox 360

INTRODUCCIÓN

A principios de la década de los 90, sustituyendo al Dr. Slump, irrumpía en la televisión autonómica catalana el anime Dragon Ball, una de las muchas series de animación japonesa que han logrado un éxito continuado durante años en nuestro país. La exitosa creación de Akira Toriyama llegó a convertirse en una serie de culto para muchos niños y adolescentes, llegando a la cúspide con las sagas de Dragon Ball Z y con las múltiples OVAs que nos contaban historias nunca vistas en el anime japonés.

Durante muchos años, los fans de Dragon Ball han podido disfrutar de múltiples videojuegos basados en las aventuras de Goku y sus amigos, especialmente en PlayStation 2, donde las conversiones del popular anime llegaron a través de dos franquicias: Dragon Ball Z Budokai y Dragon Ball Z Budokai Tenkaichi. Sin embargo, no fue hasta el tercer capítulo de los Tenkaichi, cuando los miles de seguidores de la mítica serie de Toriyama, pudieron disfrutar de un videojuego que realmente conseguía englobar todas las historias del anime y, además, recreaba fielmente los emocionantes combates que nos mantuvieron pegados al televisor durante muchas tardes y sobremesas.

Después del decepcionante debut del universo Dragon Ball en PlayStation 3 con el videojuego Burst Limit, Namco Bandai, a sabiendas que todavía son muchos los jugadores que quieren rememorar las aventuras de los guerreros Z, nos presenta Dragon Ball Raging Blast, un título cuya principal misión es recuperar la esencia de los Budokai Tenkaichi que tan buen sabor de boca nos dejaron en la pasada generación de consolas.

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GRÁFICOS

Sin llegar a la calidad gráfica de los mejores videojuegos actuales, Raging Blast ha conseguido recrear fielmente los espectaculares combates del anime japonés gracias al excelente uso del Cel Shading y a las mejoras técnicas implementadas.

A simple vista, cualquier persona podría llegar a dudar si lo que está viendo es una pantalla de un videojuego o un capítulo de Dragon Ball Z. Para lograr este hito, los desarrolladores han creado unos modelados que son idénticos a los de la serie, dotándoles de unas animaciones y expresiones faciales nunca vistas hasta la fecha. Pero eso no es todo, porque los escenarios 3D del juego son mucho más amplios y destructibles, además de contar con numerosos detalles. Si a todo lo comentado anteriormente le sumamos el hecho de que el conjunto se mueve fluidamente a sesenta imágenes por segundo (y no a treinta como los tenkaichi), el resultado es que estamos delante de la mejor conversión de la obra de Toriyama.

Además de observar como se van deteriorando las vestimentas de los personajes y como se van destruyendo los escenarios a medida que avanza el combate, somos participes de de la espectacularidad de los movimientos especiales de cada guerrero. Muchos de estos ataques, que son idénticos a los que vemos en la serie, cuentan con una escena cinemática que muestra un primer plano del luchador que realiza el ataque y del que lo recibe, con lo que podemos ver claramente sus expresiones faciales. La representación de estas técnicas masivas viene potenciada por unos espectaculares efectos de luz y visuales, como por ejemplo el blur.

La dirección artística de los menús que encontramos en el juego es soberbia, ya que cada apartado o batalla está representado por unos iconos que son escenarios o comabatientes en 3D. Para ver hasta que punto está cuidado cada aspecto del título, solo hay que fijarse en los tiempos de carga, que en esta ocasión son un minijuego donde controlamos a la nube Kinto y donde nuestro objetivo es conseguir cápsulas Hoi Poi que nos ayudan a desbloquear objetos para personalizar a nuestro personaje.

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JUGABILIDAD

Con el objetivo de recuperar la esencia del Budokai Tenkaichi 3, Namco Bandai ha optado por volver a apostar por la misma fórmula jugable que tan buenos resultados les dio en PlayStation 2. Así pues, los combates de uno contra uno vuelven a estar a la orden del día, pero con alguna que otra novedad en esa misma base jugable, que pretende ante todo, ofrecernos un espectáculo visual nunca visto antes en otro juego del universo Dragon Ball.

En este intento de recrear fielmente cada uno de los combates del anime, la primera novedad pensada para potenciar la jugabilidad es el aumento de la tasa de imágenes por segundo, que ahora es de 60, con lo que los combates se disputan a una velocidad frenética.

Los diez mapeados que encontramos en el título, además de ser más destructibles e interactuables que en entregas anteriores, consiguen darnos en todo momento una sensación de libertad muy lograda, ya sea por mar, tierra o aire. Todos ellos, están pensados para que hagamos gala del amplio repertorio de movimientos de que disponemos, especialmente aquellos que nos sirven para desplazarnos. De esta forma, podemos correr, flotar, volar, esprintar, desaparecer o teletransportarnos con absoluta libertad por todos los escenarios, al igual que hacía Goku y compañía en la serie de animación japonesa.

Otra de las premisas a destacar del diseño de los escenarios, es que nos facilitan la capacidad de sorprender al enemigo. Mediante movimientos de teletransportación o de persecución, podemos desplazarnos a una velocidad endiablada hacía nuestro adversario apareciendo delante o detrás de él, con lo que el elemento estratégico, está muy presente durante los combates que disputamos.

En este videojuego encontramos un extenso plantel de luchadores, sayanes, terrícolas, androides, extraterrestres y fusiones. En total hay 43 personajes disponibles y sus respectivas transformaciones, aunque muchos de estos personajes los tenemos que desbloquear a medida que avanzamos en el modo historia. Una de las novedades más destacables es la inclusión de dos personajes inéditos hasta la fecha, pero muy apetecibles para todos los fans de la obra de Toriyama. Estos dos personajes son Vegeta y Broly transformados en superguerreros de tercera fase y, lo mejor de todo, es que cuentan también con unas técnicas de ataque pensadas para la ocasión. El único punto negativo de este apartado es que, incomprensiblemente, se ha optado por suprimir a muchos de los guerreros que aparecieron en la última entrega para PlayStation 2, con lo que todo parece indicar, que la desarrolladora se los está reservando para futuras entregas de la franquicia.

Todos los personajes del juego cuentan con un simple sistema de combos que se ejecuta pulsando ciertos botones. En este aspecto, el juego no difiere mucho de lo que vimos en el pasado, ya que dependiendo de las veces que pulsemos o mantengamos un botón, hacemos un tipo de ataque diferente. Lo mejor de este viejo sistema es que ahora nos permite enlazar combos, con lo que después de realizar un simple combo, podemos ejecutar un super ataque o movimiento final.

En lo referente a la defensa, continuamos protegiéndonos pulsando un botón, en este caso el R1, pero también podemos escoger otras vías para evitar los ataques enemigos, como evanescencias (desaparaiciones), teletransportaciones, cancelaciones de agarre o desviar ataques energéticos. Pero eso no es todo, porque si chocamos en un movimineto de persecución o contrarrestamos un super ataque enemigo con uno propio, salta una escena en la que debemos girar rápidamente el joystick izquierdo para lograr ejecutar más golpes que el rival y de esta forma restarle un poco más de vida que en un ataque normal.

Si somos lo suficientemente habilidosos, también podemos romper la guardia del rival con los ataques de carga o de derribo, o incluso ejecutar un espectacular combo aéreo, en el que la pantalla se oscurecerá con la intención de darnos la sensación de hipervelocidad.

Las dos principales novedades jugables que se han incluido en Ragin Blast son los golpes de persecución y la posibilidad de dejar a un contrincante clavado en la pared. Para poder perseguir y golpear a un enemigo por varios lugares del escenario, previamente, debemos realizar un ataque de carga, de lanzamiento o un contrataque. Lo mejor de este brutal combo, es que se nos permite elegir la dirección a la cual queremos mandar al adversario, a excepción del movimineto final que siempre es estampar al enemigo contra el suelo del escenario.
En determinados lugares de los mapas vemos unos mensajes, que nos indican que pulsando R1+ círculo, podemos lanzar a nuestro rival contra una pared para dejarlo clavado durante unos segundos. Esto nos permite golpearlo a nuestra merced sin que éste pueda defenderse.

Si antes comentábamos que todos los personajes hacían gala del mismo repertorio de golpes simples, esto no ocurre con los super ataques ni con los movimientos finales. Cada personaje (transformación incluida) posee las técnicas energéticas que podemos ver en el anime y lo mejor de todo esto, es que son de una ejecución muy sencilla, ya que se ha simplificado el mecanismo de anteriores juegos. Ahora sólo con pulsar una dirección de joystick derecho, somos capaces de realizar un super ataque o una técnica energética que consuma gran cantidad de energía. Esto a la práctica se traduce en el aumento de la estrategia y en la posibilidad de enlazar combos simples con super ataques.

Una vez hayamos conseguido reunir la suficiente energía, pulsando hacia bajo con la cruceta, entramos en el estado conocido como «alta tensión», y eso significa que tenemos un breve espacio de tiempo para ejecutar el devastador ataque final, capaz de suprimir varias barras de vida en un suspiro. Esta clase de ataques son indispensables para decantar un combate a nuestro favor, con lo que es de suma importancia saber el momento exacto para lanzarlos.

Lástima que todo este conjunto se vea empañado por la cámara, que al igual que ya ocurría en la demo, sigue ofreciéndonos unos cambios bruscos de perspectiva que en numerosas ocasiones nos dejan vendidos durante un combate. No es extraño comprobar que repentinamente, la cámara deja de seguir al adversario y nos ofreca un plano objetivo en tercera persona de cualquier lugar, menos de donde se encuentra nuestro oponente. Por suerte, los más experimentados en el juego, ya habrán comprobado que pulsado a la derecha o izquierda de la cruceta del pad, se puede reubicar la cámara para poder seguir la acción del combate. Lo único bueno en este sentido, son los buenos primeros planos que nos ofrece la cámara cuando realizamos los ataques finales, y que nos permiten ver con total claridad las expresiones faciales de los combatientes.

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MODOS DE JUEGO OFFLINE

Si de una cosa puede presumir Dragon Ball Raging Blast es que es el videojuego basado en las aventuras de Goku que tiene más modalidades de juego. Haciedo referencia a los modos offline, tenemos que destacar el modo Colección batalla dragón, que nos permite jugar a todas las sagas de la historia original de Dragon Ball Z, así como algunas historias alternativas que podrían haber sucedido. La colección batalla dragón incluye la saga saiya, la saga de freezer, la saga de Bardok, la saga androides, la saga del monstruo Bu, la saga del Super Saiyan Legendario y las historias alternativas.

Cada saga se divide en varios capítulos que debemos ir superando para avanzar en la historia. Lo mejor de este modo es que en determinadas ocasiones no estamos obligados a superar un combate para poder disputar la siguiente batalla, porque ya se encuentra desbloqueada. Podemos elegir entre tes niveles de dificultad, que distan entre sí, por el aumeneto de la IA de los enemigos y por el daño causado por los ataques.

En esta misma modalidad tenemos la oportunidad de conseguir estrellas que nos sirven para desbloquear batallas secretas, trajes y temas musicales. Para conseguirlas es necesario rejugar los capítulos y cumplir los objetivos que se nos plantean en el apartado «Misión».

El ya habitual modo torneo mudial no podía faltar a la cita y, en esta ocasión, se han vuelto a incluir sus dos modalidades, el torneo de artes marciales y los juegos de célula. En ambos torneos pueden participar hasta 16 luchadores, o si lo preferimos pueden estar controlados por la IA. También cabe la posibilidad de escoger el nivel de dificultad, así como los requisitos.

Uno de los modos que aconsejo jugar antes de empezar a dar mamporros es el Dojo, que es el viejo modo práctica o tutorial que nos ayuda a dominar todas las técnicas disponibles en el videojuego. Los tutoriales que están disponibles van dirigidos tanto a jugadores principiantes como a los más avanzados, además, también existe la posibilidad de realizar un entrenamiento libre tanto en una batalla individual como en una de equipo.

La forma más sencilla de calibrar nuestras fuerzas contra la IA del juego es la modalidad versus, donde podemos disputar tres tipos de combates, los ya clásicos jugador contra jugador, un jugador contra la CPU o ser simples espectadores. En este apartado encontramos disponibles batallas individuales, batallas entre equipos de hasta cinco jugadores y las batallas de poder, en las que creamos equipos según los niveles de poder de sus miembros.

Uno de los mayores alicientes de Dragon Blast Raging es el hecho de poder personalizar a los personajes con una lista de objetos o escoger los super ataques que más nos gusten. Para ello contamos una tabla con unos recuadros limitados donde cabe la posibilidad de insertar unas fichas que potencian la lucha cuerpo a cuerpo, el Ki, la defensa, los super ataques y movimientos finales. Existen otra clase de fichas conocidas como especiales que nos otorgan ciertas ventajas o cambios en nuestra aparariencia física, como la aureola del más allá, escoger el color de nuestra aura o aumentar el dinero que conseguimos en el combate. Lograr acumular tanto dinero como nos sea posible, es fundamental para poder conseguir todas estas piezas, por esto, aconsejo jugar los combates en difícil para obtener una mayor suma de dinero.

El modo más espectacular y que supone el reto más importante para el jugador es el conjunto de pruebas de la modalidad «superbatalla». Los nueve tipos de pruebas que están disponibles son el arcade, supervivencia, contrarreloj, moodo puntos, ataque KO, ataque de destrucción, batalla en equipo, batalla extrema y máquina de puñetazos.

En el arcade tenemos superar varias fases y derrotar a los enemigos que van apareciendo mientras nuestra energía se recupera tras cada batalla. En superviviencia escogemos un escenario e intentamos derrotar a tantos enemigos como podamos, con el handicap que sólo recuperamos un poco de energía al ganar un combate. La prueba contrarreloj nos invita a ganar a cinco enemigos en el menor tiempo posible, y en el modo puntos nuestro objetivo es ganar puntos realizando tantas técnicas como nos resulte posible a un enemigo invencible. En ataque KO tenemos un límite de tiempo para vencer al mayor número de enemigos pero con la ventaja de tener Ki y energía inéditas. Para aprovechar que los escenarios contienen elementos destructibles se ha creado un tipo de prueba llamada ataque de destrucción que consiste en derrotar a los enemigos mientras vamos destruyendo los mapas. La batalla de equipo es un conjunto de combates que tenemos que disputar contra los equipos más carismáticos del anime y en la batalla extrema nuestro reto es ir ganando partidas contra guerreros cada vez más fuertes. Por último está la máquina de puñetazos, que consiste en golpear una máquina que mide nuestro poder.

Es esencial ir completando pruebas del modo superbatalla porque es donde conseguimos las siete bolas de dragón, cuando las reunamos todas, podemos invocar al dragón Shenron para que nos conceda un deseo. Entre lo que nos deja escoger hay piezas para personalizar los guerreros, técnicas nuevas o dinero para comprar nuevas habilidades.

En el modo museo tenemos varias opciones para elegir, como escuchar los temas musicales que hemos ido coleccionando, ver las repeticiones guardadas de nuestras partidas offline o visitar la extensa enciclopedia de los personajes.

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MODO ONLINE

Una de las modalidades estrella de este Dragon Ball, es sin duda, la Batalla en línea. Este modo multijugador online, que nos permite enfrentarnos a jugadores de todo el mundo, guarda ciertas similitudes al que pudimos disfrutar en Street Fighter IV. En la Batalla en línea se pueden disputar varios tipos de partidas como las igualadas, las de jugador, las de amigo o si preferimos podemos participar en un torneo mundial online.

Si nos decantamos por las partidas igualadas, jugamos unos combates en los que obtenemos unos puntos de batalla que nos ayudarán a subir de rango y a escalar posiciones en la clasificación. Las partidas de jugador son prácticamente lo mismo pero sin puntos de batalla, mientras que las de amigo son aquellas en las que aceptamos la invitación de un amigo para luchar.

A diferencia de los torneos offline, dónde pueden participar 16 jugadores, en los torneos online sólo pueden participar 8 usuarios de PlayStation Network que hayan adquirido Raging Blast. El único inconveniente de estos torneos es que al finalizar un combate tenemos que esperar que finalicen los otros combates de la misma ronda, con lo que muchas veces terminamos un poco agobiados.

En las modalides comentadas anteriormente podemos elegir entre personalizar una partida, crearla o hacer una partida rápida. Entre las caracterísiticas que se pueden escoger para personalizar una partida están la región, el número de participantes, el tipo de guerreros y la posibilidad de escoger personajes personalizados o descargados de la PlayStation Store. Al crear nuestra propia partida nos encontramos con unas opciones muy similares a las comentadas anteriormente, pero con la única diferencia que podemos solo dejar acceder a aquellos jugadores que hayamos invitado. La mejor opción y la que nunca falla es la de escoger una partida rápida, donde no se tiene en cuenta el rango, la personalización o la región.

Además de poder escoger el tipo de partidas multijugador online, también está disponible una clasificación mundial donde podemos consultar y ver la puntuación de las partidas igualadas o de varias pruebas de la modalidad superbatalla. Para concluir este modo, existe un apartado que se llama récord de batalla, en el que se puede consultar las batallas realizadas, las victorias, las derrotas, los empates o el ratio de victorias de las diferentes modalidades que hayamos participado. Es aquí donde al igual que sucedía en Street Fighter IV cabe la posibilidad de customizar nuestro perfil online mediante un título conseguido al cumplir ciertos requisistos.

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SONIDO

Como ya va siendo habitual en los videojuegos europeos de Dragon Ball, la banda sonora de Raging Blast no incorpora ningún tema original de la serie de anime, debido a que la editora europea no tiene los derechos. Lejos de frustarnos con este tema, tenemos que decir que las variadas melodias que podemos escuchar durante el videojuego cumplen su función con creces, ya que consiguen potenciar la épica de los combates. Una de las opciones que tenemos, es subir las canciones de la serie de televisión al disco duro de PlayStation 3 y escucharlas mientras jugamos al videojuego.

A excepción de algunos modos de juego, es de agradecer el hecho que podamos elegir el tema que queremos escuchar antes de cada combate.

El doblaje de los personajes es muy bueno, aunque sólo podemos escuchar a nuestros personajes favoritos hablando en japonés o en inglés. La inclusión de extensos diálogos al principio de cada capítulo, son otra clara muestra que el equipo de desarrollo ha tenido como premisa, intentar hacernos creer que estamos viendo un capítulo de Dragon Ball Z o una OVA, ya que en numerosas ocasiones, las palabras que se entrecruzan entre los guerreros son las mismas que las que escuchamos en los capítulos de la serie.

Los efectos de sonido cumplen simplemente el guión, ya sean los impactos, explosiones o el ruido de las estructuras que se derriban como consecuencia de la acción del combate.

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ENTRE TÚ Y YO

No son pocas las franquicias que, año tras año, lanzan un nuevo título que pretende mejorar lo mostrado en años anteriores. Los seguidores del anime japonés Dragon Ball, así lo hemos vivido durante años, especialmente con los videojuegos de la saga Budokai Tenkaichi. Sorprendentemente con la llegada de las consolas de la nueva generación, todos los jugadores amantes de los juegos de lucha, esperábamos un salto cualitativo de los títulos referentes al universo de Dragon Ball, pero la dura realidad es que parece que las desarrolladoras no quisieran emular lo que pudimos vivir con el majestuoso Budokai Tenkaichi 3 para PlayStation 2.

La intención de Namco Bandai de recuperar el espíritu Tenkaichi y superar lo ofrecido en el Burst Limit, no ha terminado de cuajar como se esperaba, ya que la compañía parece que se haya guardado varios ases en la manga para futuras entregas de esta nueva franquicia.

Aunque el plantel de luchadores es bastante amplio, desgraciadamente se ha optado por suprimir ciertos personajes carismáticos que ya aparecían en anteriores videojuegos como los saibaman, Dabra, Satan o los pequeños célula. Lo mismo ocurre con las sagas y Ovas que ahora se han visto reducidas, especialmente las segundas, ya que solo podemos jugar a la de Bardock y a la del legendario saiyan Broly.

Otro de los problemas con los que nos encontramos, y que supone un lastre continuo durante los combates, es la cámara. En numerosas ocasiones, dejaremos de ver a nuestro rival o simplemente desapareceremos de la patalla como por arte de magia, sin saber si somos nosotros los que atacamos o los que estamos recibiendo una soberana paliza.

Si somos capaces de perdonar estos detalles, Dragon Ball Raging Blast nos ofrece un sistema de combate muy dinámico y espectacular, que combinado con unos entornos muy interactuables, da como resultado la mejor conversión de la serie en un videojuego. La jugabilidad es muy similar a la de los Tenkaichi, pero si queremos dominar todos sus aspectos tenemos que pasar por los múltiples tutoriales donde se nos enseña a realizar cada uno de los movimientos y técnicas.

Si de una cosa puede presumir Raging Blast es de la gran cantidad de modos de juego que dispone y que hacen que nos pasemos muchas horas delante del televisor intentando superar cada uno de los retos que nos plantean. Desde el típico modo historia que nos sirve para conseguir desbloquear trajes, personajes o nuevos combates, hasta los espectaculares torneos de artes marciales donde pueden participar hasta 16 jugadores.

El apartado online es de lo mejorcito, ya que es muy parecido al que ya pudimos disfrutar en Street Fighter IV, y además, no hay prácticamente lag. De esta manera, los combates que disputamos nos pueden servir para ir subiendo de nivel y conseguir títulos que sirven para customizar nuestro perfil online. Otra de las características que nos han gustado de esta modalidad, es la posibilidad de disputar torneos de artes marciales online, y solo el hecho de tener que esperar a que finalicen los combates restantes de los otros jugadores empaña un poco este soberbio apartado. Esperemos que en un futuro no muy lejano, Namco Bandai, decida lanzar un parche para penalizar o evitar que los contrincantes abadonen las partidas online, porque resulta un verdadero fastidio ganar un combate y no recibir la merecida recompensa de los puntos.

La personalización de los personajes es uno de los puntos más adictivos de Raging Blast y es vital para salir victoriosos en los combates personalizados de la modalidad online. Por ejemplo, podemos crear personajes fuertes en los combates cuerpo a cuerpo o en el uso de los movimientos finales. Tampoco nos podemos olvidar que en este videojuego podemos invocar al dragon Shenron una vez consigamos reunir las siete bolas de dragón. Una vez reunidas, podemos pedirle un deseo al místico dragón, y este nos concederá nuevos ítems o dinero para seguir adquiriendo mejoras para personalizar a nuestro guerrero.

El verdadero reto de este juego es conseguir todos los trofeos. Este hecho, que podría pasar por ser una simple hazaña, sirve para desbloquear todos los combates, trajes, temas musicales y los super ataques más devastadores. Además de lo comentado anteriormente, superar todos los retos de los trofeos nos permite profundizar en el sistema de batalla y darnos cuenta de la excelente curva que nos plantea cada nivel de dificultad.

En definitiva, los sibaritas de los juegos de lucha de esta generación de consolas, se encontrarán con un título que no aporta nada nuevo al género, pero los millones de fans de Goku disfrutarán de lo lindo rememorando esas míticas batallas entre los guerreros más poderosos del universo.

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CONCLUSIONES

Namco Bandai a sabiendas que tiene un filón con los derechos para desarrollar videojuegos del universo Dragon Ball, nos deja un sabor agridulce con Raging Blast, ya que si somos aficionados a jugar a este tipo de videojuegos, nos damos rápidamente cuenta que se trata de un buen juego pero incompleto. La idea de recuperar la exitosa fórmula de los Budokai Tenkaichi y mezclarla con las innovaciones técnicas de la actual generación de consolas, hubiera funcionado si la compañía no hubiese reseteado gran parte de los contenidos que incluyó en el Budokai Tenkaichi 3.

Si por una parte nos encontramos con un título que gráficamente es un calco del anime y que nos permite disputar unos combates a una velocidad de vértigo, por otra, asistimos incrédulos a la ausencia de personajes míticos y escenarios, que ya aparecían en la última entrega de la saga Tenkaichi. Además de estos importantes hándicaps, tenemos que realizar un tremendo esfuerzo en perdonar la cámara que en determinadas ocasiones no ofrece la mejor vista para seguir el transcurso de la acción.

Por suerte, Dragon Ball Raging Blast incluye muchos puntos positivos que hacen que todo lo comentado anteriormente termine siendo anecdótico. Desde un excelente modo historia hasta la completísima modalidad online, el videojuego es la semilla que esperemos que en un futuro termine germinando para ofrecernos una saga que rivalice o incluso supere lo visto en la pasada generación de consolas.

A FAVOR:

Fiel recreación de los personajes.
Amplios escenarios 3D totalmente destructibles.
Combates que se disputan a una velocidad de vértigo.
La sensación de libertad está muy lograda.
La posibilidad de personalizar los personajes.
La facilidad para realizar los super ataques y movimientos finales.
La gran cantidad de modos de juego.
Un modo multijugador muy entretenido.
Los diálogos entre los personajes antes de empezar un combate.
La enorme cantidad de objetos desbloquables.
La inclusión de luchadores inéditos en el manga.
El contenido descargable totalmente gratuito.

EN CONTRA:

Se echan en falta algunos personajes y combates de la serie.
No están presentes las historias de Dragon Ball y Dragon Ball GT.
No se ha incluido escenarios míticos como por ejemplo el de la sala del espíritu del tiempo.
Los ozharus (monos gigantes) brillan por su ausencia.
No se han incluido las canciones del anime.
La cámara muchas veces nos deja vendidos.
Que no se penalice a los jugadores que se desconectan durante los combates online.
La elevada dificultad de conseguir algunos trofeos.