Análisis – Dead or Alive 6

José D. Villalobos · 14 junio, 2019
La saga de Team Ninja y Koei Tecmo mantiene sus estándares de calidad.

Al pensar en Dead or Alive como serie, lamentablemente, son muchos los que relacionan a esta longeva saga de juegos de lucha con el erotismo y la voluptuosidad de sus personajes femeninos, sobre todo por los títulos de DOA Xtreme que, básicamente, lo único que hacen es explotar el lado más sexista y banal de una franquicia que tiene mucho que ofrecer desde muchos aspectos.

Precisamente, Dead or Alive 6 ha llegado para dejar claro el enfoque real que hizo que esta serie ganara tantos seguidores alrededor del mundo, proponiendo una jugabilidad de alto ritmo, intuitiva y, por sobre todas las cosas, muy entretenida.

Sin embargo, se debe mencionar que no dejó de lado en su totalidad la sexualización de sus personajes que, sobre todo en Japón, le genera tantas ventas a la serie.

Por otro lado, aunque no haya sido la meca de la innovación con respecto a otros juegos de lucha que están en el mercado actualmente, el juego ofrece una serie de nuevos contenidos que le dan su propia identidad, por lo que catalogarlo como una revisión de DOA 5 o algo similar, no sería lo más adecuado, en mi opinión.

Dicho esto, nos adentramos al análisis de este nueva incursión de la serie en la industria.


Jugabilidad entretenida y accesible para todos.

Team Ninja y Koei Tecmo han logrado ofrecer una jugabilidad correctamente balanceada que tiene las cargas adecuadas de accesibilidad para los jugadores casuales y de complejidad para los más aficionados de la serie que quieren convertirse en unos maestros del combate, siendo este el primer punto a destacar del juego, ampliando su espectro de captación de potenciales usuarios.

¿Cómo lo han conseguido?, afianzados en un ritmo de juego muy rápido que prolifera la realización de combos con mayor fluidez que en entregas anteriores, generando combates visualmente espectaculares de primera mano, eliminando algunas mecánicas como los Power Blow o Critical Burst de su predecesor.

Además, han mantenido el muy conocido sistema triangular de combate de DOA, en el que los golpes le ganan a los derribos, los derribos a las llaves y las llaves a los golpes, dándole también ese toque estratégico a las batallas, que aumenta la tensión en los momentos finales de cada enfrentamiento.

Del mismo modo, como principal novedad y como especie de sustitución de las mecánicas eliminadas, se ha introducido una nueva barra de energía, que se sitúa debajo de la barra de salud de toda la vida. Recargar este medidor durante el combate resulta muy sencillo y abre un abanico de posibilidades muy amplio, ya que puede utilizarse para desencadenar un potente ataque cuando esté completamente llena, el cual puede reducir drásticamente barra de salud de tu oponente si logras conectarlo. Por supuesto, si el jugador falla dicho ataque quedará totalmente expuesto por algunos segundos, por lo que es también un arma de doble filo.

La energía de la nueva barra también te permitirá ejecutar técnicas defensivas y de evasión que te permitirán escapar de situaciones complicadas en las que te veas abrumado por tu oponente, así que gran parte de tu estilo de pelea depende de la utilización de dicha barra en los momentos clave, lo que le da un gran dinamismo a los combates, haciendo que ninguno sea jamás igual al anterior.

Por otro lado, el plantel está conformado por 23 luchadores de inicio, sin contar a Nyotengu (incentivo de reserva) y a Phase 4 (solo disponible para quienes hayan adquirido la Deluxe Edition). El róster está conformado por viejos conocidos de la saga como Ryu Hayabusa, Kasumi, Ayane, Hayate o Leifang, siendo la mayoría de ellos extraídos de Last Round.

Las dos novedades del plantel son NiCO, una chica finlandesa que hace gala de su estilo Pencak Silat y su rapidez, atributos que combina con su habilidad para electrocutar enemigos, lo que la hace una luchadora bastante única y muy divertida de utilizar.

La otra adición es Diego, un luchador oriundo de Nueva York que no cae en contemplaciones de estilos ni técnicas depuradas para luchar, pues simplemente se encarga de repartir poderosos golpes y patadas a diestra y siniestra, ideal para los jugadores que más allá de querer hacer muchas combinaciones, quieren machacar botones hasta hacer añicos a sus rivales.

Variedad en modos de juego.

Dead or Alive 6 le ofrece varias posibilidades de juego a sus usuarios, que podrán disfrutar de un modo historia muy similar a los que hemos visto últimamente en otros juegos de lucha, con cinemáticas que anteceden combates de una ronda, protagonizados por los personajes más importantes de la serie.

No obstante, más allá de su simpleza, el modo historia del juego resulta bastante entretenido ya que permite probar a los luchadores del plantel de forma orgánica, ideal para los nuevos jugadores que aún no conocen a fondo a los personajes y no se han decidido por sus favoritos. Además, algunas escenas tienen ese toque excéntrico y humorístico que a más de uno le causara gracia, por lo que merece la pena completarlo en su totalidad.

Por otra parte, el modo DOA Quest es el modo más divertido y exigente de todo el juego, en mi opinión. Dicho modo nos ofrece una cantidad enorme de misiones por completar, representadas en combates en los que el jugador debe salir victorioso para poder seguir avanzando.

Sin embargo, lo que hace más interesante este modo de juego es que con derrotar a tu enemigo no te será suficiente para superar las misiones, ya que ellas imponen algunas condiciones de victoria que deben ser cumplidas para avanzar. Por ejemplo, en un combate el juego puede requerir que realices algún ataque específico o que inflinjas una cierta cantidad de daño a tu oponente con un combo.

Para aún más entretenimiento, al cumplir dichos requisitos en el combate, el jugador es premiado con una serie de recompensas que varían en nuevos trajes para los personajes, misiones, peinados, gafas, accesorios y monedas en el juego para poder comprar aún más contenido, lo que incentiva al jugador a mejorar e intentar cumplir las condiciones del combate.

De más está decir que el modo DOA Quest es el que más potencia las habilidades del jugador, ya que se deben adoptar distintas estrategias para poder cumplir con los requisitos del combate, teniendo a veces que utilizar distintos personajes para cumplir los objetivos.

Como aspecto negativo, se debe mencionar el descarte del modo Tag, con lo que el juego ha perdido un poco de terreno en variabilidad. La lista de modos de juego la cierran los clásico versus local, contrarreloj, supervivencia y entrenamiento, sin olvidar, por supuesto, la vertiente de combates en línea.

Un apartado audiovisual que no desluce, pero tampoco sorprende.

Si bien, Dead or Alive no se ha caracterizado por ser una saga que busque los gráficos más realistas, el apartado gráfico de DOA 6, a pesar de que ha mejorado con respecto a su predecesor, no cuenta con muchas diferencias considerables que nos permitan ver un salto realmente significativo entre el aspecto visual de un juego y otro.

En líneas generales, el apartado visual de Dead or Alive 6 cumple pero no sorprende, pues aunque han mantenido los efectos de deterioro de la ropa y el sudor de los personajes, pienso que se quedaron algo cortos en la mejora de texturas, iluminación y animación de algunos personajes puntuales, que pueden a llegar a verse algo rígidos, especialmente en las cinemáticas, aunque no sea algo tan escandaloso como lo ocurrido con Jump Force, por ejemplo.

En cuanto a la banda sonora, a pesar de no ser la más legendaria de la saga sí supone una mejoría, aunque muy leve, con respecto a Dead or Alive 5, con un manejo de dinámicas musicales más adecuado que amenizan correctamente la intensidad de los combates. Además, también se han traído de vuelta varios temas clásicos de la saga que gustarán a los jugadores veteranos.

Antes de finalizar, es menester destacar que otro aspecto negativo que reduce la calidad del juego es que de arranque se ve algo falto de contenido en materia de trajes y accesorios para la personalización de personajes, lo que puede resultar en una contra importante para los jugadores que le sacan provecho a este apartado.

El pase de Temporada, que pinta que agregará todos esos trajes y accesorios que faltaron de inicio, además de personajes adicionales como Mai Shiranui de SNK, cuenta con un elevado precio que sobrepasa los 90 euros, haciéndolo prácticamente inaccesible para una parte importante de jugadores, lo que puede traducirse en muchas críticas por parte de los aficionados, sobre todo si se introducen contenidos que pongan en desventaja a quienes no puedan o no quieran adquirir el pase.

En conclusión, Dead or Alive 6 ha reunido las características jugables más importantes de la serie y las ha potenciado con una serie de novedades que le añaden variantes interesantes a los combates, con modos de juego capaces de entretener a los más nóveles y experimentados jugadores. Sin embargo, el juego, a pesar de que mantiene el estándar de calidad de la serie, no supone un salto evolutivo muy considerable que, aunado a la falta de contenido por las ganas de sacarle provecho a la política de DLC, no termina de explotar todo su potencial.

 

Salir de la versión móvil