Análisis Battlefield 3

• Título: Battlefield 3
• Compañía desarrolladora: EA DICE
• Publicado por: Electronic Arts
• Fecha Lanzamiento: 27 de octubre de 2011
• Plataformas: PlayStation 3, Xbox 360 y PC
• Género: First Person Shooter
• Idioma: Castellano
• Voces: Castellano
• Precio: 69,99€
• PEGI: +16

Si nos paramos a pensar en el género más explotado de esta generación, la gran mayoría de la gente nos diría que, sin duda, son los FPS (First Person Shooter). Hasta ahora, la canción había sido la misma cada año: la fraquicia Call of Duty anunciaba una entrega anual con algunos extras con respecto a su versión anterior. Durante estos años ha habido intentos de competencia por parte de alguna otra compañía por disputarle calidad y ventas a la saga de Activision, pero esas tentativas siempre estuvieron condenadas a un segundo plano. Es el caso de Medal of Honor, o Battlefield Bad Company. No importaba lo demás: el nuevo videojuego de Call of Duty llegaba y arrasaba en ventas.

Sin embargo, algunas cosas han cambiado en el último año. Con el lanzamiento de Black Ops al mercado, un gran número de jugadores de la franquicia de Activision se han sentido bastante engañados. La calidad dada por aquel videojuego no era de lejos la que muchos jugadores esperaban. Y he ahí que apareció, unos meses después, Electronic Arts, para anunciar una nueva entrega de su saga bélica más real y espectacular. Battlefield 3 estaba en desarrollo.

La acción se situaría en un conflicto bélico actual. En definitiva, se nos prometió el juego más rompedor de la Saga Battlefield. Tras un par de tráilers, la expectación por ver el nuevo trabajo de DICE en un motor gráfico nuevo creció exponencialmente. Muchos se quedaron enamorados de lo que, parecía, nos iba a ofrecer la tercera entrega de la franquicia. Un conflicto bélico total, con vehículos, grandes campos de batalla y una acción inmersiva como se había podido ver antes.

Las únicas reticencias que ha tenido el videojuego en sus comparecencias públicas han sido que la versión mostrada siempre correspondía a la versión de PC. Poco se supo de la calidad gráfica de consolas hasta prácticamente el lanzamiento. Pero ahora, por fin, llega la gran temporada de los videojuegos. El momento del año donde todos muestran sus cartas y el público es el que decide. En laps3 analizamos hasta qué punto revoluciona Battlefield 3 el género shooter.
 
[BREAK=Argumento]

El modo Campaña de Battlefield 3 nos sitúa en un conflicto bélico ficticio ambientado en una época actual. Tan actual que algunas de las referencias que se hacen durante el videojuego se parecen y mucho al más que famoso programa nuclear de Irán que tantos titulares ha dado durante los últimos 2 años. Nada más comenzar a jugar, revivimos durante los créditos iniciales lo que pasa en un futuro muy próximo: un asalto a un tren de pasajeros tomado por unos terroristas.

Pero todo se remonta días antes: en Battlefield 3 tomamos el papel de un marine de los Estados Unidos, llamado Blackburn. Somos arrestados por la CIA en Nueva York: somos sospechosos de haber conspirado contra el país por estar en un sitio el día y hora equivocados. Dos agentes de la CIA inician entonces un extenso interrogatorio donde se tratará de recordar qué hacemos allí y porque ha ocurrido todo.

Al principio de toda la historia, Blackburn, marine de las fuerzas especiales es destinado junto con un contingente a Irán, donde el PLR, un grupo terrorista, amenaza con una guerra civil en el país que derrocaría al actual mandatario. El objetivo es detener a su líder, un tipo llamado Al Bashir. La misión, de alto riesgo, se realiza en pleno centro de Teherán. En un principio todo parece ir bien, hasta que nuestros compañeros son fruto de una emboscada y la mayoría de nuestro grupo muere o es capturado. Blackburn escapa del lugar y logra reunirse con los demás soldados estadounidenses.

Tras asaltar el banco central de Teherán, donde se cree que se esconde Al Bashir, descubrimos en el sótano una caja con un arma de destrucción masiva. Pero lo peor no es únicamente eso: en la caja hay hueco para 3 bombas nucleares. Es entonces cuando la acción más frenética toma el mando del videojuego: hay que descubrir la verdad y el paradero de Al Bashir y su mano derecha, Solomon. Fases a bordo de un caza, manejando un tanque de una división de artillería o la típica misión de francotirador que nunca falta en los FPS, son la nota dominante de un conflicto bélico a la altura.

La campaña goza de buenos momentos, si bien es verdad que es muy corta. Demasiado corta. Un jugador experimentado apenas tardará 5-6 horas en pasársela en dificultad normal. Algo que ya viene siendo común en este tipo de videojuegos, mucho más centrados en su Modo Multijugador.
 

[BREAK=Jugabilidad]

La campaña de Battlefield 3 nos trae todas las cosas prometidas: variedad de situaciones, la sensación de estar en medio de una guerra más grande que cualquier otra que hayamos vivido, todo tipo de cachivaches tecnológicos con los que están dotados los vehículos de combate… pero si hay algo de lo que quizá se abusa en exceso es de los quick-time events (QTE). Demasiado peliculeros y en algunos casos sobra tanto dramatismo. Además, estos eventos consiguen, a la larga, que estemos mucho más atentos a nuestro mando que a lo que se desarrolla en pantalla en las escenas cinemáticas. Más de una vez morirás por fallar un QTE.

En Battlefield 3 se agradece la gran cantidad de situaciones que vivimos, tanto como soldados de infantería como pilotos de un caza o tanque. Experiencias únicas que hacía bastante tiempo que no vivíamos en FPS. Sin embargo, hay determinados momentos que podían haber sido mejores de no ser por pequeños fallos en el desarrollo del videojuego. Por ejemplo, cuando corremos a toda prisa a un punto de extracción donde un helicóptero nos espera con las puertas abiertas de par en par y estamos totalmente rodeados de enemigos, no nos será posible entrar en él hasta que nuestros compañeros lo hayan hecho. Algo invisible nos lo impide. Pequeños fallos como este empañan el gran trabajo que ha realizado DICE con el videojuego.

Los movimientos de nuestro protagonista (o el soldado que manejamos en el Modo Multijugador) son marca de la casa de la saga Battlefield. Al movernos agachados, nuestras manos se moverán sorteando obstáculos de una forma bastante más natural que lo visto anteriormente en otros videojuegos del mismo corte.

Otra de las cosas a comentar es la Inteligencia Artificial de la máquina. Se podía haber mejorado un poquito más. Nuestros enemigos permanecerán en todo momento en la cobertura que hayan elegido incluso aunque nos acerquemos por detrás y nos vean. Otros comportamientos, como la capacidad y el tiempo de disparo, son a veces incluso mejores que el nuestro. Se pasa de estar cubierto detrás de una columna, a meternos varios tiros en la cabeza prácticamente medio segundo después de salir. Por lo general, esto no es gran fallo, pero sí se nota a la hora de jugar en las fases en lugares cerrados.

Una de las cosas que nos ha gustado más son las misiones cooperativas a las que podrás jugar con un amigo de forma Online (desgraciadamente, no se ha incluido la pantalla dividida). Seis misiones con una duración más que aceptable, que nos llevarán su tiempo completarlas. Un añadido al videojuego que, junto con nuestro compañero, nos dará más horas de diversión.

En definitiva, la jugabilidad del videojuego orientada a la vida Offline de éste es bastante notable y se puede observar el esfuerzo que ha puesto DICE para traernos un videojuego mucho más realista en todos los sentidos. Sin embargo, como suele pasar, un par de fallos empañan el gran trabajo realizado. Para leer nuestra valoración de la jugabilidad del videojuego orientada a los modos Online, mira el apartado Online.

[BREAK=Gráficos]
 

El motor gráfico empleado en el desarrollo de Battlefield 3 ha sido el aclamado Frostbite 2. Con un potencial mayor que el primer Frostbite, usado en Battlefield Bad Company, la incógnita era saber hasta qué punto el apartado gráfico había mejorado en la versión para consolas de sobremesa. Pero esta incógnita no ha quedado resuelta hasta prácticamente el lanzamiento, ya que todas las demostraciones jugables abiertas al público que se hicieron del videojuego hasta octubre fueron en su versión de PC.

Con el juego en nuestras manos, es hora de evaluar hasta qué punto supone una revolución gráfica (o no) su versión consolera. Como era de esperar, el juego a nivel gráfico convence. El resultado es mucho más vistoso y de mayor calidad que Battlefield Bad Company 2. Animaciones y personas recreadas con un nivel de detalle que poco tiene que envidiar a su versión homónima en PC.

Las explosiones, el humo, el acabado gráfico de las armas… todo cumple notablemente con lo que se espera del videojuego. Aunque es importante destacar también que no es un revolucionario dentro del género. Los niveles del multijugador y los espacios abiertos dejan algunos polígonos y texturas de menor calidad que sólo podrían haber sido pulidas con mucho trabajo. Esto no es algo negativo puesto que la mayoría de los videojuegos traen este tipo de defectos gráficos menores que no suponen para nada una molestia.

Otra de las bazas más importantes del videojuego es la iluminación. El videojuego luce muy bien las sombras y las fases donde hay más luz, aunque lamentablemente también abundan las misiones nocturnas o a bordo de vehículos donde no se pueden apreciar igual de bien la calidad gráfica dada por Frostbite 2. El HUD que nos indica nuestra munición, minimapa, etc es bastante vistoso y fácil de ver.

En líneas generales, es un videojuego que no destaca gráficamente por encima de otros juegos de similar calibre, pero que tampoco se ha quedado atrás. Se pueden seguir viendo texturas a menor calidad o pequeños dientes de sierra en algunos objetos de menor importancia. Pero también, por ejemplo, las explosiones se han recreado con un grado de fidelidad muy fiel, al igual que la mayoría de los escenarios por donde nos movemos. Podemos afirmar que DICE ha logrado un trabajo sobresaliente trasladando el videojuego a la versión para sobremesa.

[BREAK=Sonido]
 

En los First Person Shooter siempre es muy importante el apartado sonoro. No nos referimos exclusivamente a la banda sonora sino a la atmósfera que debe transmitir un juego de estas características. En Battlefield 3, Electronic Arts ha puesto toda la carne en el asador para lograr un apartado sonoro que destacase por encima del resto. Y lo ha conseguido. Pero vayamos por partes. La banda sonora del videojuego ha contado esta vez con 2 compositores, Johan Skugge y Jukka Rintamaki. Un tándem que se complementa estupendamente y que ha conseguido traernos una banda sonora a la altura de lo que se esperaba.

El tema principal del videojuego, el cual suena durante varios momentos del modo Campaña, es sin duda el mejor trabajo logrado hasta ahora en la franquicia. Un tema que recuerda mucho a su anterior entrega pero que le ha dado un toque mucho más moderno y épico, que era lo que necesitaba. Además, gran parte de los momentos de tensión del videojuego se han complementado de forma muy correcta con música y efectos especiales que le han dado el toque que necesitaba de espectacularidad, de saber que estamos metidos dentro de una gran guerra.

Como viene siendo habitual (e imprescindible) en el género, el videojuego viene completamente doblado al castellano. Un doblaje que no destaca demasiado, pero que tampoco es malo. Las voces elegidas y la sincronización labial se han arreglado bastante bien, ya que hemos completado el videojuego sin haber notado nada relativamente importante.

Una de los aspectos con los que más hemos disfrutado ha sido con los efectos sonoros de todo lo que concernía a la acción donde se encuentra nuestro protagonista: desde un sonido totalmente fiel de nuestro francotirador hasta el fragor de una batalla en una división de tanques. Una vez hemos podido pasarnos el modo Campaña con un equipo de sonido 5.1 no podemos terminar esta sección del análisis sin mencionar que estamos encantados con este aspecto del videojuego, que es donde EA ha conseguido el mejor resultado, a nuestro juicio, con el videojuego.

[BREAK=Online]
 

Una vez que hemos podido sacarle el máximo partido a lo que nos ofrece el videojuego en su modalidad Offline, es el momento de analizar el que es quizás es el verdadero arma de la franquicia: el Modo Multijugador Online. Este año desde DICE se nos ha prometido un modo Online mucho más colosal que lo que veníamos conociendo hasta ahora. Un modo multijugador que combinase la innovación de lo actual con lo mejor de la vieja escuela, de aquello que nos dejó Battlefield 2. Una guerra total, abierta y real.

El videojuego cuenta con 9 mapas y 5 modos de juego. Quizá donde más hemos disfrutado ha sido en el modo Conquista, que es donde Battlefield 3 se amolda a la perfección a lo que quieren sus jugadores. Como siempre, hay varias bases localizadas por todo el mapa y nuestra misión es lograr mantener el mayor número de puntos capturados para obtener ventaja sobre nuestro enemigo y que su puntuación vaya descendiendo. El primero que llegue a 0 pierde la partida.

Pero esto no es todo lo que podemos encontrarnos en nuestra aventura por el modo Online. Para aquellos jugadores que prefieran una acción más directa, donde lo que importa es acabar con el enemigo, existen también los modos de Duelo por Equipos y Duelo por Equipos en Escuadrones. 2 opciones adicionales con las que DICE ha intentado atraer a un público más acostumbrado a estos modos de juego y así poder satisfacer en la demanda a mucha más gente. A esto se le suma el Modo Extremo, con armas que causan más daño, y el Modo Asalto, donde un equipo tiene que conseguir las bases del mapa y el otro defenderlas.

Los mapas, aunque a priori pueda parecer que nueve es un número bastante escaso, se logra compensar con la vasta extensión de los mismos. Hay algún mapa que si intentamos cruzarlo a pie podemos tardar varios minutos en llegar al otro lado. Grandes escenarios para grandes batallas. Esa es la filosofía predominante en un videojuego que apuesta por un máximo de 32 jugadores en consolas y 64 en PC, lo que demuestra las proporciones titánicas de las partidas que se juegan.

Cada mapa cuenta con una geografía única. Hay centenares de sitios en los que realizar la función que tengamos asignada. Desde proteger una base con armas de corto alcance hasta dando soporte de francotirador desde lo alto de una grúa. Somos parte de algo mucho más grande y eso es lo que sentimos en el campo de batalla: somos vulnerables, somos alguien insignificante estando solos, pero fuertes en equipo. Porque al final, la idea que predomina en el juego Online siempre es la misma: el bien común de nuestro equipo.

Para que una guerra entre 32 jugadores con unas dimensiones tan grandes funcione bien, el uso de los vehículos de combate se hace imprescindible. Podemos utilizar helicópteros, cazas de combate, buggys, jeeps… todo tiene su función. Desde dar apoyo aéreo a nuestros compañeros de infantería para que puedan capturar una determinada base hasta hacer explotar jeeps bomba en la zona de reaparición enemiga. Infinitas posibilidades.

Nuestro soldado, como viene siendo habitual, evolucionará según las partidas, muertes y puntos que vaya consiguiendo, mediante un ranking de niveles. Dependiendo de nuestro nivel se nos abrirán nuevas armas y accesorios con los que aumentaremos nuestro potencial en el campo de batalla. La variedad es bastante grande, con unas 60 armas en total. A la hora de jugar, hay 4 tipos de soldado disponibles: asalto, ingeniero, apoyo y francotirador. Cada una cuenta con una función en la batalla, como su propio nombre indica.

Todas las funciones comentadas son procesadas por una gran herramienta, el Battlelog, que nos sirve para poder observar hasta el más mínimo detalle de nuestra andadura por el Modo Multijugador. Historiales, partidas, amigos… todo se encuentra recopilado en esta herramienta. Además, también tiene una conexión con las redes sociales para que los usuarios que quieran publicar sus resultados lo hagan de una forma sencilla.

Terminamos comentando que sin duda, el modo Online es el gran aliciente para comprar el videojuego. Si te gusta el rollo de una gran guerra real, con sus vehículos, sus grandes escenarios, la destrucción, las acciones en equipo, en definitiva, si te gusta la idea de la saga Battlefield, este es tu juego. Sin embargo, si eres un jugador mucho más directo, en donde las partidas largas y puede que no tan fructíferas en el terreno personal no sea lo que más te apasione, es probable que este juego no sea la mejor opción.
 

[BREAK=Conclusión]

Sin embargo, el juego se ha visto empañado por un modo Campaña algo más soso de lo que esperábamos, donde las escenas cinematográficas “espectaculares” cobran peso en detrimento del argumento. Campaña que por otra parte se hace bastante corta, algo quizás más perdonable si eres un jugador al que sólo le interese su modo Multijugador.

En definitiva, concluimos nuestro análisis con una sensación buena, pero con el regusto amargo de que no todo de lo que parecía tan espectacular en las demostraciones y trailers ha acabado igual de bien al jugarlo en nuestras propias carnes. Esto no quita por supuesto, que DICE haya conseguido un juego a la altura, que a buen seguro contará con una gran legión de jugadores a sus espaldas en los próximos meses.

A favor

– Modo Online, con diferentes propuestas y mucha variedad.
– Guerra a gran escala recreada con gran fidelidad.
– Una banda sonora a la altura.
– La inclusión final de Battlefield 1943 por su compra en PlayStation 3.

En contra

– Un modo Campaña corto con un argumento no demasiado convincente.
– La inteligencia artificial y determinados aspectos de la jugabilidad offline.