Tomb Raider: Underworld

ANÁLISIS TOMB RAIDER: UNDERWORLD

INTRODUCCIÓN

Si alguien puede presumir en el mundo de los videojuegos esta es, sin duda, Lara Croft. La arqueóloga más famosa de todos los tiempos debutó en Tomb Raider en el año 1996 y, durante más de doce años, ha vivido innumerables aventuras que la han llevado a convertirse en uno de los mayores iconos consoleros de todo el mundo.

Pero no todo ha sido un camino de rosas, después del éxito rotundo de las tres primeras entregas de la saga, la franquicia entró en un declive que tocó fondo con Tomb Raider Angel of darkness. Suerte que Eidos Interactive reaccionó a tiempo y apostó por Cristal Dynamics que hizo un magnífico trabajo en las dos últimas entregas de la saga, el “Legend” y el “Anniversary”.

Apenas un año después de su última aventura en Playstation 2, Lara debuta en PlayStation 3 con Tomb Raider: Underworld, un juego marcado por la herencia de las dos últimas entregas pero con la obligación de integrarse a la nueva generación de consolas. Para ello se han mejorado muchos aspectos, sobretodo el apartado jugable, pero sin renunciar a esa esencia tan característica que envuelve a los Tomb Raider.

Siguiendo el argumento de “Legend”, nuestra protagonista intentará resolver el misterio que gira alrededor de la desaparición de su madre en el Nepal, cuando ella aún era una adolescente. Para ello, deberá adentrase en Avalón, tumba del rey Arturo, pero necesitará encontrar el legendario martillo de Thor y resolver los misterios que giran alrededor de esta arma de la mitología nórdica.

Nuestra aventura empezará con una desconcertante escena en la mansión Croft, que nos servirá de tutorial y donde Lara deberá escapar de las llamas. A partir de aquí, y siguiendo las pistas que dejó su difunto padre, que murió mientras buscaba Avalon, nuestra protagonista empezará a descubrir la relación que existe entre la muerte de su padre y la desaparición de su madre.

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GRÁFICOS

Las considerables mejoras introducidas a nivel gráfico en Tomb Raider Underworld son la principal muestra de la continua evolución a la que está sometiendo Cristal Dynamics a la franquicia. La muestra más clara de estas mejoras es la propia protagonista, ya que si comparamos a la actual Lara con la que vimos en “Legend” o en el Annyversari” nos daremos cuenta que ahora es más real.

Aunque la arqueóloga sigue teniendo un cuerpo explosivo que le resta naturalidad, sus animaciones son más humanas y numerosas, gracias a la técnica del motion capture. Además, se ha mejorado considerablemente la expresión facial de Lara y el modelado de su cuerpo, que ahora es más musculoso acorde a su condición de gimnasta.

Nuestra protagonista “sufre” en tiempo real los efectos del escenario y en numerosas ocasiones la vemos llena de barro o mojada por el agua, lo que incrementa, aún más, la dosis de realismo con la cual Cristal Dynamics ha querido dotar al juego.

Otro acierto es, que antes de empezar a jugar en un escenario, tenemos la posibilidad de escoger el traje con el que Lara afrontará ese determinado nivel. Para esta ocasión, la señorita Croft, dispone de varios modelitos más o menos atrevidos que varían según las características climatológicas de la ubicación.

La evolución gráfica no sólo ha afectado a Lara, ya que los escenarios son más amplios y presentan unas texturas muy bellas y repletas de numerosos detalles, como por ejemplo, las inscripciones que decoran cada rincón de los templos que visitamos.

Durante nuestro viaje en busca del martillo de Thor, viajamos por varios escenarios, como por ejemplo, Tailandia, México o el Ártico. Pero sin duda, las localizaciones submarinas son las más espectaculares de Underworld. Nunca en la saga, la majestuosidad del fondo marino y el diseño del agua habían sido tan bien recreados.

La recreación de la luz es espectacular, sobretodo la de la luz solar, y es uno de los aspectos más logrados del juego. Cristal Dynamics ha sabido combinar a la perfección los efectos de luces dinámicas con los mapeados de iluminación predefinidos.

Los efectos de la climatología quedan bien patentes tanto en los escenarios como en Lara y un ejemplo de ello es cuando llueve. Mientras Lara se moja y se ensucia con el barro, el entorno se llena de charcos y nuestras pisadas se borran.

Las secuencias cinemáticas son de una calidad impresionante y tienen la finalidad de descubrirnos, poco a poco, el argumento de la historia.

Aunque Tomb Raider: Underworld tiene un acabado gráfico casi sobresaliente, también presenta algunos aspectos negativos como el acabado final de los personajes secundarios y de algunas criaturas, que no están a la altura de Lara y de los escenarios.

Los errores del motor gráfico son mínimos, pero en alguna ocasión, nos encontramos con problemas de clipping y también con la presencia de bugs. Sorprende a estas alturas, ver a Lara atravesando algún que otro elemento del escenario o quedándose quieta después de realizar un salto.

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SONIDO

Cuando jugué por primera vez a Tomb Raider, me quedé sorprendido por la gran cantidad y calidad de sus melodías y por el uso de la música en las situaciones más importantes. Ahora, doce años después, me alegra ver como Cristal Dynamics sigue cuidando tan bien este aspecto, que ha sido toda una reseña para la franquicia.

En la última aventura de Lara, las melodías siguen siendo fieles al espíritu de la saga y ayudan a crear la mejor atmósfera, según la situación en la cual nos encontremos. El juego viene doblado al español y eso es un punto a tener en cuenta, ya que así no nos perderemos ni una pizca de la acción.

El sonido del agua al sumergirse o mientras buceamos está muy bien recreado, al igual que el de las armas o el de nuestros gadgets.

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JUGABILIDAD

Tom Raider siempre ha sido un título que ha mezclado genialmente varios géneros, como la exploración, las plataformas, los puzzles o la acción, y en esta entrega, la fusión de todos ellos da como resultado un juego que roza el sobresaliente.

Los escenarios de Underworld han sido diseñados para dar más libertad de exploración y aumentar la jugabilidad. Muestra de ello, es que ahora son mucho más grandes e interactivos para que sean explorados a fondo si queremos encontrar todos sus secretos. Lo de seguir un camino predeterminado para avanzar ya es historia, debido a que durante todo el juego nos encontramos con varios caminos alternativos.

En cada nivel tenemos que resolver, por norma general, varios puzzles para poder accionar un mecanismo que nos permita proseguir en nuestra aventura. Su dificultad no es muy elevada, y además, los podemos resolver sin seguir ningún orden en concreto. Raramente vamos a atascarnos en la resolución del enigma, pero si necesitamos ayuda podemos pedir una pista o que nos revelen por completo el puzzle.

La “nueva” Lara ya no es un personaje tan arcaico, y se ha optado por darle un aspecto más real. Para ello, cuenta con nuevos movimientos y animaciones, como por ejemplo, la capacidad de bucear rápidamente o disparar simultáneamente a dos objetivos.

Pulsando select, accedemos al pequeño ordenador de Lara, el PDA. Este ayudante de datos personales, a parte de proporcionarnos información del área, contiene otras cosas, por ejemplo, un inventario, el diario y el mapa sonar.

El mapa sonar es uno de los múltiples gadgets con los que cuenta nuestra protagonista, y está especialmente diseñado para crear mapas 3D de baja resolución del área donde estamos ubicados. Es de gran ayuda en las fases submarinas, debido a la gran extensión del fondo marino, pero también esta accesible en cualquier momento. A parte del sonar, contamos con varios objetos que nos resultarán muy útiles para avanzar por los escenarios.

El gancho, que usamos por primera vez en “Legend” vuelve a estar disponible, y con él, podemos escalar, hacer rápel, balancearnos, desplazarnos entre plataformas y activar mecanismos.

Otro de los objetos indispensables del equipo con el que cuenta Lara, es la cámara digital que nos sirve para visualizar el entorno con su potente zoom.

Cuando nos adentramos en un lugar oscuro, podemos activar la linterna que lleva incorporada la arqueóloga en su traje y que se apaga automáticamente al acceder a una zona iluminada.

En las fases submarinas disponemos de un equipo de buceo con unos cilindros más pequeños de lo habitual para dotar a Lara de más movilidad debajo del agua.

Si queremos acceder rápidamente a los botiquines de recuperación de salud, cambiar de arma, activar la cámara o encender la linterna, sólo hay que pulsar la dirección correspondiente a cada una de ellas en la cruceta del mando.

Uno de los géneros que siempre ha estado en un segundo plano en Tomb Raider es el de la acción. Crystal Dynamics, que lo sabe de sobra, ha intentado aportar frescura a este género con la inclusión, más o menos acertada, de numerosas novedades que pretenden mejorar la jugabilidad.

El mejorado sistema de disparo sigue siendo muy similar al que vimos en “Legend”, y nos permite escoger entre apuntar manualmente como en un shooter o autoapuntar. Como novedad importante, ahora podemos apuntar y disparar a dos objetivos de forma simultánea o disparar colgados desde una cornisa.

A medida que vamos usando las armas, nuestro medidor de adrenalina se va llenando, y es entonces cuando podemos ralentizar la acción para acabar rápidamente con los enemigos. Con un poco de práctica, utilizando este sistema, llegaremos a ser capaces de eliminar a los enemigos de un certero disparo a la cabeza. Lara dispone de un gran surtido de armas con las que además de poder disparar, puede golpear con ellas y romper elementos de los escenarios.

Las armas que están disponibles son: las clásicas pistolas, escopeta, ametralladoras, fusil de asalto, pistola tranquilizante, arpón submarino y las granadas lapa. Antes de empezar un nivel, se nos brinda la posibilidad de escoger nuestra arma secundaria, ya que las archiconocidas pistolas están disponibles durante toda la aventura, incluso debajo del agua.

Desde nuestro ordenador se nos permite poder cambiar de arma porqué las armas secundarias tienen munición limitada, y cuando se termina, aquella arma queda inservible. Particularmente me hubiera gustado poder encontrar munición repartida por los escenarios.

Por primera vez, la señorita Croft puede luchar cuerpo a cuerpo propinando patadas y golpes con las armas, aunque esperemos que este aspecto jugable mejore en los próximos juegos, porqué es muy limitado y repetitivo.

Los enemigos son variados (animales, humanos y seres sobrenaturales) y suelen atacar en grupo, pero casi siempre, con una IA muy reducida que los limita a atacar directamente sin seguir una estrategia. Por desgracia, seguimos con la mecánica de saltar y disparar para acabar con ellos, y solo los momentos en que usamos el medidor de adrenalina o cuando aparecen los slow motion, salvan este apartado de la mediocridad.

Los nuevos movimientos para esquivar los ataques, aunque son de gran ayuda, prácticamente no hace falta utilizarlos por la facilidad de acabar con los enemigos.

Para dotar de más espectacularidad a la acción, se han incluido, los mencionados anteriormente, slow motion que ralentizan el tiempo en una determinada situación o enfrentamiento. A diferencia de los eventos interactivos de los anteriores títulos, durante los slow motion tenemos que superar la situación nosotros mismos sin que aparezcan los comandos a pulsar.

Pero el gran lastre de Tomb Raider Underworld, es sin duda la cámara. Cuando supimos que el juego contaba con una cámara manipulable 360º, no podíamos esperar que fuera lo peor de esta aventura. La verdad es que en numerosas ocasiones nos encontramos con unos molestos cambios de ángulo que hacen que perdamos el control de Lara en el preciso instante antes de realizar un salto. El resultado de esto es su muerte, y suerte tenemos que el juego hace los autoguardados en breves espacios de tiempo.

Mención especial merece el magnífico nivel del Perú, donde el uso de la moto es imprescindible para desplazarnos y superar las numerosas trampas con las que cuenta dicho enclave. Es toda una delicia poder conducir por el interior de los templos y cavernas con este vehículo.

Aunque la duración de Tomb Raider Underworld es relativamente corta, depende en gran medida de cómo afrontemos la aventura. Para exprimir al máximo el juego, aconsejo ajustar los retos a la dificultad extra si ya has jugado anteriormente a Tomb Raider e intentar encontrar todos los tesoros y reliquias para aumentar nuestra vida. Por el contrario, si queremos pasarnos el juego rápidamente, siempre nos queda la opción, una vez finalizado, de buscar los tesoros que nos falten en “la caza del tesoro”.

Para finalizar este apartado, comentar que a medida que avancemos en la aventura, vamos desbloqueando el guión gráfico y los bocetos de escenarios, personajes y equipo.

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ENTRE TÚ Y YO

El primer Tomb Raider para PlayStation 3 encandilará a los más acérrimos fans de la saga y no terminará de convencer a los más críticos. Y digo esto, porque después de haber jugado a todos los videojuegos de Lara, un servidor puede afirmar que estamos delante de uno de los mejores títulos, pero con muchos aspectos mejorables.

Tomb Raider Underworld es un juego que entra por la vista, con unos escenarios enormes y llenos de detalles, y además, Lara luce como nunca. Una vez empecemos a jugar, iremos descubriendo poco a poco la gran cantidad de novedades que se han incluido, sobretodo en el aspecto jugable.

Se agradece que existan varios caminos para poder resolver los puzzles y también las pistas que nos brindan; pero particularmente, no veo muy útil lo de la resolución parcial o total de los enigmas, ya que no son de mucha dificultad.

Es todo un acierto que al inicio de cada nivel nos dejen elegir el traje y el arma que Lara utilizará en ese escenario, pero el hecho de no encontrar munición en los escenarios hace que el arma deje de ser útil una vez que esta se termina. Habrá quien le encante ahorrar balas y habrá otros, como yo, que se preguntan porqué no podemos coger la munición de los enemigos humanos abatidos.

El nuevo sistema de escalada me ha recordado mucho a la que pude ver en Assassin’s Creed, y me parece fantástico, pero lo que realmente me ha decepcionado ha sido el sistema de combate cuerpo a cuerpo. Ya que Crystal Dynamics le ha dado más protagonismo a la acción en este Tomb Raider, esperaba que Lara pudiese realizar combos para despachar a los enemigos, pero no ha sido así, sólo se limita a dar patadas o golpear a los enemigos con el arma.

La IA de los enemigos depende mucho de la dificultad elegida, pero por norma general, siguiendo la misma estrategia de saltar y dispar los eliminaremos. Los enfrentamientos contra los gigantescos seres sobrenaturales serán uno de los momentos más espectaculares del juego. El nuevo sistema de disparo aporta frescura a la acción y ha sido todo un acierto.

Las fases a bordo de los barcos ofrecen más acción y recuerdan a las últimas fases de Uncharted: El tesoro de Drake, pero a diferencia de este último juego, los enemigos son muy fáciles de vencer. También echamos de menos la posibilidad de poder interactuar con los elementos que encontramos tanto fuera como dentro de los navíos.

Tomb Raider: Underworld no es un juego largo, y si además “pasamos” el tema de los tesoros y las reliquias, el título se hace bastante corto. Aunque Underworld está pensado para ser rejugado, aconsejo que en la primera partida ya empecéis a buscar los tesoros y las reliquias para disfrutar más de la aventura.

Esperemos que el próximo Tomb Raider añada por lo menos, un modo local u online cooperativo, o desafíos contrarreloj para poder comparar nuestras estadísticas con los demás usuarios.

Si te gustan los puzzles y las plataformas no dudes en hacerte con él, pero si buscas más acción, encontrarás otros títulos más interesantes en el catálogo de Playstation 3.

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CONCLUSIONES

Sin perder una pizca del espíritu que siempre ha rodeado a la saga, Tomb Raider Underworld da otra vuelta de tuerca a muchos de los aspectos que ya vimos mejorados en “Legend” y en “Anniversary”. Gráficamente el juego está a la altura de los títulos de esta generación, y el apartado jugable presenta una gran cantidad de novedades, que presagian un futuro más que prometedor a la franquicia.

Muchos opinarán que tiene muchas cosas mejorables como la cámara o la duración, y es verdad. Pero el título de Cristal Dynamics es un paso adelante en la evolución de la saga y el punto final al misterio que envolvía a la familia Croft.

Lo mejor

El gran trabajo gráfico realizado tanto en los escenarios como en Lara.
La amplitud de los niveles y la sensación de libertad.
Los puzzles y las trampas.
La ayuda para resolver los puzzles.
El nuevo movimiento de buceo rápido.
El nuevo sistema de disparo.
Encontrar a viejos enemigos de la arqueóloga.
La inclusión de las reliquias.
La posibilidad de escoger el traje de la protagonista antes de iniciar un escenario.
Poder elegir el arma secundaria al principio de cada nivel.
Las melodías y efectos sonoros son increíbles.
Está perfectamente doblado.

Lo peor

La duración.
La cámara.
Los pocos movimientos que tiene Lara en la lucha cuerpo a cuerpo
El sonar que sólo es útil en las zonas submarinas.
La dificultad de encontrar todos los tesoros.
La poca interactuación en los niveles del barco.
La floja IA de los enemigos.
La fácil identificación de los jarrones y vasijas que contienen los tesoros.
Que no tenga modo cooperativo local u online.
No inclusión de un sistema de trofeos.