Análisis Soul Calibur IV
EL AMANECER DE UNA NUEVA ERA
El combate entre el bien y el mal retoma su rumbo. Los seguidores de la espada maldita y la espada de espíritu están de enhorabuena,una de las sagas más populares de los últimos tiempos vuelve a la carga tras una ausencia de casi tres años, hablamos ni más ni menos de Soul Calibur. Con esta cuarta entrega ( o quinta según se mire), Namco Bandai pretende establecerse como líder indiscutible dentro del mercado de los juegos de lucha, algo no muy difícil de conseguir vista la ínfima cantidad de títulos de su calibre disponibles actualmente para la consola de Sony.
La franquicia comenzó su andadura en Dreamcast, la última consola de Sega, y logró cosechar un éxito sin precedentes, obteniendo así excelentes críticas por parte del medio especializado gracias a su innovadora jugabilidad y magnífico apartado gráfico. Años más tarde, Namco se decidió a lanzar una secuela en las tres consolas del momento (PS2,GC y XBOX), añadiendo así algunas modificaciones en la jugabilidad y la inclusión de un personaje exclusivo para cada versión ( Heihachi en la de PS2, Link en la de GC y Spawn en la de Xbox). En el 2005 vió la luz, en exclusiva para PS2, el antecesor de este nuevo Soul Calibur, el cuál destacó por su inmensa variedad de modos de juego así como con su notable mejoría en el apartado técnico.
Como ya hemos dicho anteriormente, Soul Calibur IV pretende coronarse como rey dentro de sú género, pero para realizar tal labor no se servirá únicamente de glorias pasadas. El juego desarrollado por Project Soul introduce cambios sustanciales con respecto a entregas anteriores que darán a la saga de las espadas legendarias un aspecto nunca visto.
Gráficos
Este es sin duda uno de los aspectos que más se ha mejorado. El apartado gráfico no innova tanto como la primera entrega de la saga, pero Soul Calibur IV cumple perfectamente con lo que se espera de un juego para consolas de nueva generación, y para ello presenta un nuevo estilo que pretende marcar diferencia.
Los modelados de los personajes, al igual que las animaciones, es uno de los aspectos más cuidados. Los efectos de luz están muy logrados, y eso lo notaremos en cada golpe que asestemos. El diseño de lo escenarios goza de una gran profundidad y variedad, podremos combatir en cerca de veinte diferentes, que van desde salas del trono, barcos piratas y paisajes helados hasta otros sacados del universo de Star Wars. Todos ellos poseen componentes destructibles que se harán notar cuando por ejemplo lancemos a nuestro oponente contra el suelo y éste se rompa.
Si hay algo que diferencie a Soul Calibur IV de sus competidores en el mercado ( Virtua Fighter, Tekken, etc) es la fluidez que posee. El motor gráfico otorga a los movimientos de los combatientes un rapidez asombrosa, en ningún momento del juego notaremos parones ni cosas por el estilo.
Por último, mencionar que tenemos la posibilidad de instalar el juego en el disco duro de nuestra PS3. De esta forma las cargas se reducirán ligeramente, pero no es algo que se note mucho. Dicha instalación ocupa alrededor de 2,5 GB
Acorde con el apartado gráfico, nos encontramos un apartado sonoro que es más que decente. Las melodías serán de un estilo muy similar al de sus predecesores. Nos encontremos con temas épicos de corte clásico que harán más llevaderos los combates. Cabe destacar el hecho que tenemos la posibilidad de descargar canciones de entregas anteriores, a través de Playstation Network Store, y escucharlas en Soul Calibur IV ( por ahora sólo se pueden descargar desde las Stores Norte Americana y Japonesa)
Los sonidos de los golpes así como las voces de los diferentes personajes cumplen perfectamente su objetivo y nos logra envolver aún más en el combate. Podemos escoger entre voces en inglés o en japonés.
Jugabilidad
Como era de esperar, esta nueva entrega mantiene el mecanismo clásico de la saga, intensos combates 3D con armas blancas, aunque eso sí, cuenta con unas cuantas novedades jugables que darán un toque fresco al sistema de juego.
Tomando como telón de fondo un mundo fantástico ambientado en el sigo XVI, el argumento de Soul Calibur IV nos sitúa en la eterna lucha entre Soul Edge y Soul Calibur, la espada maldita y la espada del espíritu. Normalmente, los luchadores buscan una o ambas espadas para destruirlas o para usar su poder, aunque existen historias algo más «personales», como la de Zasalamel, que ofrecen algo distinto y aportan mayor variedad a la trama.
Ahora vamos a centrarnos en uno de los puntos fuertes del juego: el elenco de luchadores. El plantel lo componen más de 30 personajes (número que puede ascender estrepitosamente gracias al editor que incorpora el juego), cada uno con un aspecto y estilo únicos ( salvo los personajes de bonificación). Algol y Hilde son los dos personajes «originales» que debutan en este entrega, y se supone que su presencia se mantendrá en entregas posteriores. Como era de esperar, muchos provienen de capítulos anteriores, éstos son : Siegfried, Mitsurugi, Taki, Voldo, Sophitia, Seong Mi-na, Cervantes, Rock, Nightmare, Yoshimitsu, Ivy, Astaroth, Maxi, Kilik, Xianghua, Lizardman, Cassandra, Raphael, Yun-seong, Talim, Tira, Zasalamel, Amy y Setsuka, todo ellos cuentas con nuevos movimientos y un «look» renovado para la ocasión. A éstos personajes debemos de añadir cinco personajes de bonificación que han sido diseñados por dibujantes de manga y anime de renombre, como Oku Hiroya (Gantz) o Yutaka Izubuchi (RahXepon), sin embargo, estos personajes serán «clones» de otros luchadores, es decir, no poseerán un estilo de lucha propio, combatirán usando las técnicas de ciertos personajes originales. En lo único en que se difereciarán serán en el aspecto físico y en las armas. Para finalizar, tenemos dos personajes «invitados» extraídos directamente del universo Star Wars, y sin duda darán un aspecto único a este nuevo capítulo de Soul Calibur: Darth Vader y el Aprendiz.
Alrededor de la mitad de los personajes anteriormente citados estarán desbloqueados desde el principio. Generalmente, los luchadores restantes se consiguen «comprándolos» en el editor de personajes, pero hay algunos, como el Aprendiz o Algol, que para poder controlarlos tendremos que acabar el modo Historia o el modo Arcade.
El sistema de lucha se basa principalmente en la utilización de cuatro botones: ataque vertical, ataque horizontal, patada y guardia. La correcta combinación de estos comandos supondrá la ejecución de diversos combos, llaves y técnicas especiales, algo bastante fácil de aprender pero difícil de dominar dada la la gran cantidad de movimientos de este tipo que existen en el juego.
Como novedad jugable, Project Soul ha añadido a esta nueva entrega el denominado «Indicador de Alma», un medidor que se sitúa junto a la barra de vida que va cambiando de color a medida que transcurre el combate. Este medidor se nos puede presentar en tres estados diferentes: azul (máximo), verde (normal) y rojo (crítico). Cuando nuestros ataques impacten contra el oponente , el indicador de alma irá aumentado, mientras que a medida que vayamos recibiendo golpes el indicador irá bajando. Si la barra se encuentra en estado crítico, se producirá una «rotura de alma», momento en el que el luchador atacante tendrá la oportunidad de ejecutar un ataque definitivo denominado «Final Crítico» si pulsa los cuatro botones principales rápidamente. En dicho ataque, veremos una secuencia pregrabada en el que veremos al personaje desatando todo su poder y acto seguido acabaremos con la vida del rival.
Otro añadido al sistema de juego es que ahora los personajes pueden perder su equipamiento, a medida que transcurre el combate, si sufren muchos golpes en una de las tres partes cruciales de su cuerpo (superior, media e inferior).
Todo esto lo podemos poner en práctica en los diferentes modos de juego presentes en Soul Calibur IV. Éstos son: Historia, Arcade, enfrenamiento,la nueva modalidad Torre de almas perdidas y la modalidad online. El primero nos propone vivir el relato de cada personaje a través de cinco niveles que se nos hacen realmente cortos, sin embargo superar este modo con todos los luchadores nos puede llevar bastante tiempo. La mecánica de este modo siempre es la misma, un texto nos sitúa en la historia de cada protagonista, y seguidamente comenzamos nuestra peculiar odisea a través de cinco fases diferentes hasta que llegamos al combate contra el jefe final de turno ( Algol, Nightmare o Siegfried), y tras vencerlo, observamos un vídeo creado con el motor gráfico del juego que nos muestra el desenlace.
El arcade y enfrentamiento son los modos clásicos de cualquier juego de lucha por excelencia. En el primero tenemos que derrotar a los luchadores que se nos encaren a lo largo de ocho niveles, mientras que el segundo es el modo versus de toda la vida, en el que podemos disfrutar un sinfín de batallas 1vs1 contra la CPU o contra un amigo.
La Torre de almas perdidas es la novedad de la saga. Este modo nos invita a subir la friolera de sesenta plantas que forman parte de la torre. En cada planta nos encontraremos con uno o varios enemigos que tendremos que derrotar para seguir avanzando. Dependiendo del piso en que estemos, podremos elegir un personajes principal y varios secundarios, de tal manera que podremos alternar entre todos ellos en medio de la batalla y así aprovechar las ventajas que ofrece cada uno. Podremos conseguir cofres con tesoros ocultos si conseguimos realizar determinados objetivos específicos de cada planta. Comentar que en las plantas finales la dificultad toma un rumbo casi imposible, por lo que llegar a la última planta sólo estará al alcance de los más hábiles.
Cuando hayamos acumulado suficiente experiencia en los modos para un jugador, nuestro siguiente paso será el de adentrarnos en la modalidad estrella, el apartado multijugador online. Con PlayStation Network tenemos la posibilidad de luchar contra jugadores de todo el mundo y ver quién es el mejor gracias a la inclusión de un ranking online. Existen dos tipos de partidas: enfrentamiento estándar y enfrentamiento especial. En el primero los luchadores no tendrán habilidades ni mejoras de equipamiento, mientras que en el segundo sí. También podemos crear salas e invitar a nuestros amigos para participar en batallas que no influyen en las estadísticas del ranking. Cabe destacar que en ocasiones se hace difícil encontrar partidas en el online, ya sea en las puntuables como en las no puntuables.
Al igual que la anterior entrega, Soul Calibur IV cuenta con un editor de personajes con el que podemos dar rienda suelta a nuestra imaginación y crear cualquier luchador que se nos ocurra. Esta potente herramienta nos permite personalizar cada aspecto del personaje, desde el equipamiento más íntimo hasta el corte de pelo. Empezamos seleccionando el género de nuestro combatiente, y acto seguido escogemos el estilo de lucha que gustemos entre los disponibles ( todo están basados en los estilos de los personajes originales del juego). A continuación es el momento de comenzar con la «individualización» en sí, ahora toca seleccionar todo el equipamiento del personaje, los accesorios, el arma que utilizará, el color del pelo, las voces, etc, vamos, un sinfín de elementos que tendremos que escoger sabiamente para crear nuestro «luchador definitivo». Las piezas de equipamientos poseen unos puntos con los que podemos asignar habilidades especiales a nuestro personaje, dichas habilidaes estarán activas en los modos historia, torre de almas y enfrentamiento especial, además, podemos comprar nuevas piezas con el dinero que ganemos en las diferentes modalidades.
Para sumar alicientes, el juego cuenta con unos «logros» que se desbloquean al cumplir ciertos objetivos. Sin embargo, éstos no están únicamente como adorno, a medida que vamos consiguiendo nuevos logros se nos irá desbloqueando nuevo equipo para el editor de personajes, aunque eso sí, hay algunos que sólo los podrán liberar los jugadores más hábiles debido a la alta dificultad que supone superarlos. Todos los logros los podemos observar en un apartado denominado «Museo», en él también podemos ver la historia de cada personaje, los eventos y vídeos del juego e ilustraciones varias.
Bueno, tras haber acumulado casi cien horas de juego en Soul Calibur IV puedo afirmar, sin temor a equivocarme, que es el mejor dentro de su género, y también me atrevería a decir que es uno de los grandes para Playstation 3. Sin duda, ante la ligera monotemática que existe en la consola de Sony, es una opción más recomendable para todos aquellos que quieren salirse de lo habitual y probar algo más que no sea disparar contra el ejército enemigo.
Siendo fan de la saga desde la anterior entrega ,y adepto a los juegos de lucha en general, esperaba con ansias la salida de este juego. El momento llegó y pude finalmente hacerme con él. En las primeras partidas que pude disputar pude observar que el apartado técnico , a pesar de que no está al nivel de Uncharted o MGS4, ha sido realmente cuidado. Me costó bastante hacerme con los controles, seguramente porque hacía bastante tiempo que no jugaba a un título de ésta índole, pero pronto entré en materia y pude preciar la depurada jugabilidad que éste me ofrecía. Tras completar el modo historia, este me dejó un poco frío, tanto como su escaza duración como por su simplicidad. Me dispuse a indagar un poco más en los modos para un jugador, no tarde mucho en darme cuenta de que eran algo simples, la nueva torre de almas no me convenció mucho, esperaba uno similar al genial «Crónicas de la Espada» de su antecesor, pero no fue así. Sin embargo, tras probar los modos online me di cuenta de que se le había otorgado mayor protagonismo a este apartado, era endiabladamente divertido jugar contra mis amigos del Network. A la hora de buscar partidas por mi mismo tardaba un poco en encontrar un decente, y de vez en cuando saltaba algún error de conexión, pero nada realmente importante.
Luego me metí de lleno en editor de personajes, quería ver todo lo que éste me podía ofrecer. Cierto es que me disgustó la poca variedad de voces y caras que les puedes asignar a tus creaciones y que tampoco puedes modificar la altura de tus nuevos luchadores, pero tras ver la gran cantidad de equipo, traje y accesorios me contenté bastante ( eso sí, hay algunos que son demasiado horteras y/o parecen de puro plástico). Por experiencia digo que te puedes pasar horas en este modo, intentando perfeccionar al máximo hasta lo más insignificantes detalles para lucir un personaje de calidad.
En definitiva, Soul Calibur IV muestra una gran calidad en muchos de sus aspectos, siendo su argumento el punto más débil, pero que sin duda merece la pena adquirirlo.
Conclusiones
Namco Bandai nos ha traído una obra que, como hemos citado anteriormente, promete establecerse como líder indiscutible hasta nueva orden y sin duda se presenta como una oferta bastante refrescante.
Argumentalmente hablando no destaca mucho, pero su apartado gráfico, su magnífica jugabilidad y su extensa duración lo convierten en un título por el que merece la pena pagar.Los más acérrimos fans de la saga puede que no vean con buenos ojos la gran cantidad de cambios que ha ejercido Project Soul en este nueva entrega, eso sí, los jugadores noveles seguramente lo encontrarán como una propuesta más que decente.
A favor
-Jugabilidad
-Cantidad de personajes
-Apartado técnico
-Duración
-Editor de personajes
-Modo online
En Contra
-Argumento
-Simplicidad de los modos para un jugador
-La dificultad del modo torre de almas perdidas, en ocasiones se ve demasiado alta.
-La velocidad para encontrar partidas online cuando no es por invitación.