Lost Via Domus (Perdidos el Videojuego)

Lost Via Domus (Perdidos el Videojuego)

La adaptación de películas o series de televisión al ámbito del videojuego no es algo nuevo. Desde los años 80 vienen sucediéndose las versiones interactivas de los estrenos más taquilleros o las sagas más emblemáticas, como los primerizos E.T., Misión Imposible o la actual versión de la famosísima serie Perdidos.

El juego de Ubisoft nos llega cuando la cuarta temporada de la serie a la que hace honor ha sido estrenada, un momento adecuado para calmar las ansias de tantos y tantos aficionados como tiene a lo largo y ancho del mundo. Abarcando hechos correspondientes a las tres primeras temporadas, no es
apto para aquellos a quienes gusten de descubrir por ellos mismos los entresijos de la serie, porque Lost Via Domus nos cuenta mucho acerca de La Isla y sus habitantes.

Metiéndonos en la piel de uno de los pasajeros del vuelo 815 que se estrella en La Isla, deberemos recorrer casi cada rincón visto en la serie para recobrar la memoria y, con ella, nuestro pasado. Personajes ya conocidos se unirán a unos pocos nuevos para ayudarnos en nuestro periplo y desentrañar los secretos que se esconden en este lugar paradisíaco y terrible.

Entre las cosas que podemos hacer, se encuentran como punto principal los diferentes diálogos que nos ayudarán a avanzar en la búsqueda de nuestro pasado. Interactuaremos por lo tanto con los conocidos habitantes de la isla, Kate, Jack y Locke entre otros, a base de preguntas clasificadas en categorías entre las que iremos eligiendo. Así conseguiremos sacarles toda la información necesaria y nos granjearemos su confianza o enemistad.

Hasta aquí parece todo correcto, pero la realidad es que este aspecto es de los más flojos. Las preguntas apenas permiten elegir, algunas se repiten constantemente de un personaje a otro (incluso con respuestas muy similares), así que realmente es un espejismo. Consecuentemente acabaremos siempre por realizar todas las preguntas disponibles al personaje, sin que nada cambie, ya que no hay cuestiones tales como la elección moral (seleccionar entre dos preguntas similares formuladas de manera muy diferente o entre dos preguntas opuestas), por lo que el ánimo de los diferentes personajes hacia nosotros está ya prefijado en el desarrollo del juego. Una lástima, puesto que darnos la posibilidad de esas elecciones morales y que afectasen a la historia habría sido un gran tanto a favor. Al final, este sistema es un mero trámite que te permite avanzar.

Un añadido también interesante pero que queda sin explotar es el uso de puzzles. En varias ocasiones deberemos usar unos fusibles de diferente potencia para alcanzar la misma requerida por un sistema eléctrico y detener el flujo de combustible o abrir un compartimento.

Finalmente no se puede dejar de nombrar otro punto curioso de este título. En varios momentos del juego tendremos la posibilidad de hacer trueques con diferentes personajes, obteniendo de ellos objetos primordiales para la consecución de nuestros objetivos. Para ello necesitaremos antes obtener otros objetos que nos sirvan a modo de intercambio, y estos los encontraremos diseminados por toda la isla en forma de botellas de agua, cocos, mangos y demás. Este aspecto cobra especial relevancia ya que se convertirá en la manera más rápida de adquirir utensílios tan útiles como una antorcha o una lámpara, vitales en ocasiones, o nuestra primera arma de fuego. Lo que sí puede resultar cansado es el tener que ir recogiendo frutos y objetos desesperadamente para poder alcanzar el trueque requerido, ya que algunos “precios” son realmente altos.

En cuanto a los controles son correctos y sin complicaciones. Cuando nos acerquemos a alguien bastará con pulsar X para establecer una conversación y navegaremos con el stick entre las diferentes opciones. Con Triángulo obtendremos una descripción del objeto que estemos mirando para decidir si lo cogemos o simplemente para hacernos una idea de lo que es. Cuando usemos algún objeto que pueda precisar una recarga o que pueda encenderse y apagarse (una lámpara o una antorcha por ejemplo), pulsando Cuadrado haremos la acción pertinente.

Usaremos el stick izquierdo para movernos y el derecho para adecuar la cámara. Con R2 pulsado correremos (indispensable para sobrevivir) y con R1 pasaremos a una vista de detalle en primera persona. La cruceta se ha usado, como en otros juegos, para acceder a opciones diversas, como el inventario al que se accede pulsado arriba o el diario, pulsando abajo, y en el que navegaremos con los botones izquierda y derecha. Cuando tengamos posibilidad de combatir, usaremos L2 para apuntar con nuestra arma y X para disparar.

En momentos puntuales, tendremos otras funciones, como al inicio de juego donde usaremos el triángulo para “llamar” al perro que nos guía, o durante nuestros periplos por la jungla donde usaremos triángulo para mirar una marca concreta y X para seguir la pista y resituar la cámara en dirección a la siguiente.

Como punto quizá más interesante, podríamos resaltar la inclusión de los “recuerdos”. Al ser nuestro personaje un periodista, en nuestros flashbacks usaremos la cámara para concretar un recuerdo borroso. Nos encontraremos inmersos en una situación que se repite en bucle hasta que consigamos dar con el encuadre y zoom correctos que coincida con lo que nuestra maltratada memoria parece querer recordar. Para ello usaremos L2 y R2 a la hora de variar el zoom y L1 o R1 para el enfoque. Con el stick izquierdo nos moveremos lo que el recuerdo nos permita y con X haremos la foto. Si coincide, todo se volverá más claro y podremos recoger algunos objetos con la mecánica ya conocida, según la situación, que nos permitirán recordar algún detalle más.

Pese a la inclusión de esta funcionalidad, no deja de ser un aspecto también bastante vacío. Se puede considerar como un minijuego que hay que superar para seguir avanzando en el juego en sí, por lo que realmente no es que añada un punto más de diversión. Más correcto hubiera sido incluir estos recuerdos como partes opcionales del juego que nos permitiesen ahondar más en la historia y desbloqueasen otras partes, pero no ha sido así.

Perdidos nos ofrece, sin embargo, algo realmente interesante. La manera en que realizamos una historia paralela a la serie oficial, siguiendo el hilo argumental de esta por otros canales, es bastante satisfactoria. Los personajes actuarán tal y como lo harían en la propia serie, sólo que dirigiendo su atención hacia nosotros e hilvanando el argumento de manera que el devenir de acontecimientos siempre se nos hará sorprendente. Situaciones tan diversas como ayudar a los supervivientes, seguir las marcas en medio de la jungla o explorar una cueva oscura entran dentro de lo que nos podremos encontrar en nuestra particular aventura. Para añadir aún más detalles que asemejen el juego a la serie, todo el argumento se halla dividido en “episodios” que emulan hasta la cabecera de la propia serie, incluyendo la frase “en episodios anteriores” por la misma voz en off que podemos oír en televisión.

Nos encontramos ante un juego de aventuras, que mezcla el género de arcade con toques de aventura gráfica de una manera algo peculiar. Al plantearnos el reto de meternos en la piel de otro pasajero del vuelo 815, en Ubisoft debieron pensar que estructurar el juego como si de episodios de la serie se tratase era un buen mecanismo, así como el añadirle algunos puzzles o que los personajes nos tratasen como si de uno más de ellos se tratara. Sin duda el planteamiento era correcto, aunque el resultado final haya quedado un tanto ambiguo por la poca profundidad que alcanza.

Uno de los aspectos quizá más complicados en este tipo de juegos es convertir un contexto “real” perfectamente conocido por millones de personas a un conjunto de polígonos y texturas identificables con su referencia. En el caso de Perdidos: El Videojuego vemos que la papeleta se ha resuelto con algunos problemas, aunque en general su conjunto es correcto.

Para empezar, hemos de hablar de los personajes. Lo primordial en este caso era poder establecer una similitud aceptable con sus homónimos de carne y hueso, y en parte se ha conseguido. Gracias a unas texturas de muy alta calidad, los detalles de los personajes en 3D saltan a la vista, siendo fácilmente reconocibles.

En segundo lugar de importancia tenemos a la propia isla, de la que visitaremos muchas localizaciones conocidas. La playa, el campamento o las cuevas están bien representados, destacando especialmente lo frondoso de la vegetación en la jungla, cargada de árboles y con muchos desniveles que aportan ese toque de verosimilitud que es preciso. Las texturas son también aquí de una calidad muy alta y a destacar la vegetación baja que reaccionará a nuestro paso. Otro punto muy reseñable es la excelente iluminación en la propia jungla o cuando usemos antorchas u otros elementos de luz en alguna cueva. La sensación clautrofóbica se hace patente y la cueva parece tan real como en la propia serie.

Por otra parte, dentro de estos aspectos hay que recalcar que existen muchas sombras. Las animaciones de los personajes, tanto del que manejaremos como de los conocidos por todos, son muy parcas y toscas, o en ocasiones realizadas cuando no toca. En algunos diálogos el personaje sólo moverá los labios o en otras ocasiones hará uso de aspavientos que no vienen al caso, contribuyendo todo ello negativamente al contexto del juego. Está también muy claro que el mayor mérito del juego se lo llevan las texturas de que hace gala, porque los personajes también van muy justos de modelado.

Los entornos, aunque plagados de detalle, son totalmente estáticos[/B]. La arena de la playa no da la sensación de tal, pudiendo haber sido perfectamente una zona de hormigón si se cambiase la textura. Ni siquiera dejaremos huellas sobre ella ni podremos interactuar con nada que no sean otros personajes o los objetos que podemos examinar o recoger. Muchas zonas que vemos nos estarán vedadas simplemente porque hay un obstáculo delante que nos llega a la rodilla, un método bastante lamentable para limitar los escenarios. En la jungla la sensación mejora, pero excepto las plantas que reaccionan a nuestro paso, nada se moverá ni será utilizable salvo los mismos objetos que podamos coger (similares en todo el juego, como los frutos). Además, el popping hace acto de aparición en notables ocasiones y la transición entre texturas y modelos de baja a alta resolución se hace a ojos vista y, casi siempre, de manera brusca. Para finalizar, el siempre presente clipping, abundante en esta generación, hará que muchos objetos atraviesen a nuestro personaje o viceversa.

En el apartado sonoro nos encontramos lo que cabría esperar en un título de estas características. Doblaje al castellano por los mismos dobladores que en la serie original, que además alcanza un muy buen nivel, y la banda sonora de la propia serie, que sirve de trasfondo para cualquier situación en el juego (que al fin y al cabo van a ser similares a las vistas en televisión).

El doblaje de los personajes exclusivos del juego tampoco se queda atrás, siendo muy correctos y bien trabajados. El mejor aspecto del juego sin duda, y una grata sorpresa encontrarnos un trabajo de doblaje de tan alta calidad viendo que en los últimos tiempos es más difícil encontrar cosas así.

Las pistas de audio están escogidas con cuidado y usadas en los momentos que cabría esperar, así como los efectos de sonido, que también parecen sacados directamente de los efectos sonoros originales de la producción.

Vaya, no imaginaba que tardarían tanto en sacar un juego sobre “Perdidos”, se veía venir desde hacía mucho tiempo. La verdad, no esperaba gran cosa, aunque al final ha ido mejor de lo que en un principio me había imaginado.

Tras la instalación de seis minutos, con la fea pantalla negra que todos conocemos y su inocuo contador de progreso, me encuentro con un nuevo juego de Ubisoft, tras aquel lejano análisis del Assassin’s Creed. Sin duda, el nivel no era el mismo, pero siempre he creído que todos los títulos merecen la misma atención. En este caso, no había mucho donde mirar, también es verdad.

Las escenas con la cámara, que curioso, lo más entretenido. La selva y las cuevas, lo más complicado y desafiante. Lástima que en su conjunto sea un juego tan del montón, tan poco trabajado. Lamentablemente, dudo mucho que vuelva a él en algún momento una vez pasado.

Un juego enfocado única y exclusivamente a dos aspectos: los fans de la serie y aprovechar el tirón de esta en un buen momento de audiencia. El producto final resulta entretenido, pero sin aportar absolutamente nada al género y siendo, en último término, una historia descafeinada demasiado sujeta al argumento de una serie archiconocida.

Técnicamente desfasado, únicamente destaca por sus texturas de alta calidad y por el buen diseño de la selva y la optimizada iluminación. Aspectos importantes que, por sí solos, no logran levantar el estandarte de unos gráficos que podrían ser de hace un año.O quizá más. Sin embargo ofrece algunos alicientes jugables que los conocedores de la saga sabrán apreciar y, sin duda, disfrutarán con ellos. Esta ventaja es también su mayor inconveniente, puesto que cualquiera que juegue y no conozca la saga con cierta profundidad, se perderá rápidamente.

A favor:

• Gran iluminación y buenas texturas
• Sigue fielmente el argumento de la serie, tomando una ruta paralela interesante
• Gran trabajo de doblaje
• Organizado en capítulos, intentando asemejarse a la serie, un toque bastante original
• Las cuevas son realmente tenebrosas
• El método para recuperar recuerdos es muy entretenido

En contra

• Se hace aburrido a las pocas horas de jugarlo, y además es bastante corto
• Instalación de 5 gigas que dura seis minutos, pero no palía defectos gráficos in-game, sólo mejora las cargas
• Lineal hasta decir basta, sólo su interesante argumento paralelo da motivos a jugar
• El aspecto jugable tiene demasiados altibajos
• No hay un tutorial que te enseñe a dar los primeros pasos