Noticias Por Daniel Valero 8 febrero, 2013

El desarrollo de Journey no fue un camino de rosas para Thatgamecompany

La desarrolladora estuvo a punto de desaparecer.

Journey ha sido uno de los juegos del año 2012 y para demostrarlo nos basta con echar un vistazo a las decenas de premios que ha conseguido hasta la fecha. Muchos de ellos llegaron ayer de la mano de la Academia de las Artes y Ciencias Interactivas, pero no todo fue tan bonito para Thatgamecompany en sus primeros años de trabajo con el juego.

En palabras de Jenova Chen, Co-Fundador y Director Creativo de la compañía, el proyecto original del año 2006 con el nombre en clave de Utopia, tenía como objetivo inspirar admiración, desconocimiento y misterio, y que permitiese a los jugadores experimentar un nivel de catarsis. Una experiencia online parecida a la de Los Sims, pero para un grupo más pequeño de jugadores.

Pero su modo cooperativo de hasta cuatro jugadores con un sistema de físicas que permitía «tirar» a los otros jugadores no funcionó correctamente haciendo que nadie se ayudase. Por lo que se optó a reducirlo a dos usuarios que pudiesen tener un objetivo independiente con un sistema de recursos compartidos.

Pero durante todo este tiempo se habían gastado muchos recursos, el juego no terminaba de gustar ni de llegar emocionalmente, y Thatgamecompany se vio obligada a pedir a Sony un año más para poder mejorar el juego. Por lo que todo siguió adelante a pesar de encontrarse al borde de la bancarrota con trabajadores que llevaban meses sin cobrar, y provocando que tuviese que poner dinero de su propio bolsillo.

Ese año de más sirvió para que se crear el auténtico Journey. Un juego lleno de emociones al que se le añadieron algunas de las partes que podemos encontrar en la versión final del juego y que obviaremos aquí para evitar Spoilers, haciendo que tres de los 25 probadores de la versión final del juego, acabasen llorando tras su finalización.

Jenova Chen también mostró al público en la conferencia la emotiva carta que recibieron recientemente de una niña que había perdido a su padre.

Vuestro juego prácticamente cambió mi vida… Fue lo más divertido que tuve con él desde que fue diagnosticado… Mi padre murió en la Primavera de 2012, sólo unos meses después de ser diagnosticado.

Unas semanas después de su muerte, pude finalmente volver a jugar a videojuegos. Lo intente con Journey y no podía pasar de la pantalla de inicio sin romper a llorar. Con la experiencia de mi padre y la mía propia con Journey, era sobre él y su viaje hacia el final, y creo que encontramos vuestro juego en el momento más perfecto.

Quisiera daros las gracias por el juego que cambió mi vida, un juego con una belleza que trae lágrimas a mis ojos. Journey es muy posiblemente el mejor juego que jamás he jugado. Sigo jugando, recordando la alegría que me trajo y la que me sigue dando.

Soy Shopia, tengo 15 años y su juego cambió mi vida para mejor. 08/01/2013