Noticias Por José D. Villalobos 15 febrero, 2019

Estudio de la Universidad de Oxford afirma que no hay relación entre la violencia y los juegos en adolescentes

Las ideas y presunciones de los investigadores afectan los estudios sobre este tema.

Los videojuegos y los jugadores desde, prácticamente, la creación de la industria, han sido víctimas de incontables juicios y aseveraciones que siempre intentan relacionar comportamientos negativos al hábito de jugar videojuegos. Afortunadamente, dichas presunciones han sido desmentidas con el paso del tiempo y hoy hablaremos de otro de esos casos.

Recientemente, en la Universidad de Oxford se ha llevado a cabo un estudio con el fin de analizar más a fondo la supuesta relación entre la violencia juvenil y el consumo de videojuegos, vínculo que, según dicho estudio, es totalmente inexistente.

En este sentido, el estudio arrojó que son las inclinaciones e ideas de los investigadores los que distorsionan la información recogida en este tipo de estudios, pues se encargan de tergiversar los datos obtenidos con el fin de que vayan acorde a sus presunciones acerca de los videojuegos.

Un total de 2008 personas fueron parte de esta investigación, tanto niños como padres, quienes respondieron preguntas acerca de su personalidad, gustos en los videojuegos y opiniones acerca de las clasificaciones PEGI y ESRB, entre otras interrogantes relativas al tema en cuestión.

Sin embargo, lo que hace diferente a este estudio de todos los demás que se han realizado anteriormente, es que también los investigadores han sido sujeto de estudio, y se les pidió que hicieran públicas sus hipótesis referentes al tema, técnicas de análisis y de recolección y resultados previos de investigaciones similares.

Luego de haber realizado todos estos estudios, Netta Weinstein, coautor del estudio y doctor de la Universidad de Cardiff, resumió en una frase los resultados obtenidos. Aquí te la dejamos:

«Nuestros estudios indican que las inclinaciones de los investigadores influían en los estudios previos sobre este tema, distorsionaban nuestro entendimiento de los efectos de los videojuegos».

Dicho esto, ha quedado demostrado una vez más que los videojuegos no tienen nada que ver con la violencia adolescente. Por último, cabe destacar que el estudio indicó que los videojuegos pueden causar frustración y enfado en los jugadores en determinadas situaciones.

¿Qué te ha parecido el resultado de este estudio?